Covid-19

España dirá adiós a las mascarillas en interiores el próximo día 20

Unanimidad del Pleno del Consejo Interterritorial a la propuesta de la Ponencia de Alertas para la retirada de los cubrebocas en espacios cerrados

Tras el documento elaborado por los técnicos de la Ponencia de Alertas en el que recomendaban retrasar hasta después de Semana Santa la retirada de la mascarilla en interiores, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha anunciado que el próximo día 19 se aprobará la nueva normativa sobre el uso de cubrebocas en España a través de un Real Decreto, que se hará efectiva el día 20, con su publicación en el BOE. De este modo, desaparecerá la obligatoriedad de llevar mascarilla en interiores, aunque según informó el martes LA RAZÓN, se mantendrá «en trabajadores y visitantes de centros asistenciales y personas ingresadas cuando estén en espacios compartidos fuera de su habitación». También en centros sociosanitarios (los residentes no deberán llevarla, pero sí los trabajadores y los visitantes) y en los medios de transporte.

Además, según indicó la ministra Darias, se recomendará su «uso responsable» cuando se produzcan aglomeraciones de personas, así como entre las personas vulnerables y profesionales que trabajen con éstas. También se aconseja responsabilidad «en el entorno familiar» y «en espacios cerrados de uso público», como por ejemplo en los centros comerciales.

En los centros escolares «por supuesto» no habrá que llevar cubrebocas, aunque a los docentes con algún tipo de vulnerabilidad se les recomendará su uso. Respecto a los centros de trabajo, Darias ha señalado que el Real Decreto «va a recoger lo que es obligatorio», aquellos ámbitos y espacios en los que el cubrebocas va a a mantenerse, y en el ámbito laboral «serán los servicios de prevención» de riesgos laborales los que determinen su uso en cada lugar de trabajo.

La decisión para la retirada de las mascarillas en espacios cerrados se ha tomado con la «práctica unanimidad» de todos los miembros asistentes al Pleno del Consejo Interterritorial celebrado hoy, dentro del contexto «positivo» actual de la pandemia, y con «una altísima inmunidad» de la población gracias a las vacunas.

Tras más de dos años de empleo de esta medida para el control de la situación epidemiológica, varias comunidades autónomas habían pedido su retirada, ya que no la consideraban efectiva en este momento de la pandemia. Madrid se había manifestado incluso a favor de no esperar hasta después de Semana Santa, y en este sentido, el departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña criticó también que no se retiren hasta después de las fiestas, pues considera que no hay «ningún fundamento científico» que justifique ahora mismo mantener las mascarillas por más tiempo.

Tras conocerse la nueva propuesta las reacciones no se hicieron esperar. La diputada de Vox, Macarena Olona, ha calificado el fin de la obligatoriedad como una «extraordinaria noticia» que llega «tarde», porque está causando «problemas psicológicos en un núcleo de la población». Olona ha indicado que su formación reclamaba desde hace meses que cayera esta medida, «ante la falta de evidencia científica», y que ha constituido «un auténtico maltrato infantil».

El Gobierno vasco se ha manifestado a favor de la propuesta de eliminar el empleo de mascarilla en espacios interiores, pero ha lamentado la forma en la que se ha trasladado el documento al Consejo Interterritorial, «al elevar a definitivo lo que era un borrador», sin haberlo difundido antes a las comunidades y «sin pasar, siquiera, por la Comisión de Salud Pública». La consejera de Salud vasca, Gotzone Sagardui, ha indicado que la región se ha mostrado a favor porque antes de manifestarse al respecto «era necesario conocer primero la opinión de las y los expertos».

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, juzga como «prudente» y «consecuente con el nivel de solución» que se ha dado al coronavirus en España la retirada de los cubrebocas. «La diferencia entre el respeto al Covid y el miedo a la Covid es notable, es lo importante, y los españoles nos hemos ganado el no tener que tenerle miedo a la Covid, aunque sí respeto y sí prudencia». García-Page se ha alegrado de «empezar a normalizar la convivencia», especialmente «en un momento en el que España necesita como nunca tirar para adelante desde el punto de vista económico, social y cultural».

No obstante, también ha habido voces en contra de la propuesta. El consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, considera «precipitada» la retirada a partir del día 19, porque, a su juicio, supone «una disminución de la percepción del riesgo» entre la población, por lo que se ha mostrado a favor de «seguir usándola» en los espacios cerrados.

Sin embargo, Aguirre destacó que sí «está de acuerdo» en que «no se exija» mascarilla en los colegios, ya que «es muy importante para el aprendizaje de los niños el ver el habla y esa transmisión de información a través de gestos entre profesores y alumnos».

El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, ha llamado a la «prudencia» ante el acuerdo alcanzado en el Consejo Interterritorial, aunque se ha mostrado partidario de esta decisión porque «está avalada por los técnicos».

Por su parte, el vicepresidente segundo de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, ha valorado positivamente el apoyo de todas las autonomías a que la retirada de las mascarillas debía estar basada en los criterios técnicos de la Ponencia de alertas. «Todos han acatado el informe de los técnicos, que es lo que siempre ha reclamado Extremadura», indicó Vergeles, quien ha destacado además que ha habido opiniones sobre si adelantar o no la fecha de su entrada en vigor, pero «ningún debate que contradiga los criterios técnicos de la Ponencia».