Bullón de Mendoza repite al frente de los propagandistas

La Asociación Católica de Propaganditas revalida su confianza en Alfonso Bullón de Mendoza durante cuatro años más. El historiador madrileño de 58 años continuará como presidente en un segundo mandato después de haber recibido el respaldo del 91 por ciento de los votos de quienes han participado en la IV Asamblea General Extraordinaria de la entidad. O lo que es lo mismo, 242 votos a favor, 22 en blanco y uno nulo.

Estar al frente de esta agrupación de fieles laicos unidos fundada en 1019 por el jesuita Ángel Ayala y presidida inicialmente por el cardenal Ángel Herrera Oria, implica liderar otras plataformas como la Fundación Universitaria San Pablo CEU, la Fundación Abat Oliba, la Fundación San Pablo Andalucía CEU, el Colegio Mayor Universitario San Pablo, la Fundación Cultural Ángel Herrera Oria, y el periódico El Debate.

«Los tiempos que vivimos hacen más necesaria que nunca la presencia en la sociedad española de una Asociación Católica de Propagandistas activa, sin complejos, consciente de su misión y dispuesta a trabajar sin descanso para llevar a cabo la evangelización para la que surgió hace más de un siglo», expuso ayer Bullón de Mendoza en el transcurso de un ‘cónclave’ que ha ratificado el apoyo su labor realizada en este cuatrienio.

Y es que, a lo largo de su primer período de mandato, el presidente de los propagandistas ha centrado sus esfuerzos subrayar el carisma identitario propio de la Asociación Católica de Propagandistas que pasa por evangelizar en el ámbito social y político, a través de una apuesta por renovar el Congreso Católicos y Vida Publica, además de incrementar diferentes campañas de sensibilización vinculadas al movimiento provida como ‘Vividores’ y ‘Cancelados’.

Con la mirada puesta en el futuro, el catedrático de la Universidad CEU San Pablo reivindicó ayer la necesidad de promover «una seria reflexión sobre nosotros mismos, nuestro papel en la sociedad y la necesaria implicación personal de todos y cada uno de nosotros en la apasionante tarea que tenemos por delante».

Además, el reelwgido presidente subrayó que el desafío que queda por delante es «mucho, inmenso y, sin duda, muy superior a nuestras fuerzas y recursos lo que nos queda por hacer», pero apostilló que «como dice san Pablo, todo lo puedo en Aquel en que me conforta» desde «la diversidad tan propia de esta casa».