Sucesos

87 muertos y hasta 1.050 rescatados en las montañas

El 63,9% de éstos son hombres, un 72,6% no están federados y el 22,5% tiene entre

19 y 30 años

 Guardia Civil y UME localizaron el viernes el cadáver de un montañero estadounidense de 27 años en el Parque Nacional de Ordesa
Guardia Civil y UME localizaron el viernes el cadáver de un montañero estadounidense de 27 años en el Parque Nacional de OrdesaGuardia CivilAgencia EFE

Una gran mayoría de los accidentes de montaña, senderismo, escalada, barranquismo... son evitables si se planifica bien la actividad. Por error humano o por otra causa, siguen ocurriendo y, en muchos casos, es la Guardia Civil la que acude al rescate. En lo que va de año ya ha socorrido a 1.050 personas, 87 de las cuales ya habían fallecido.

Son datos que ha facilitado a Efe el Servicio de Montaña del instituto armado, pero a los que habría que añadir los rescates que realizan otros cuerpos y servicios de emergencia en las distintas comunidades autónomas.

De todos modos, son significativos y ofrecen una radiografía bastante fiel a la realidad: el 63,9% de los rescatados eran hombres, un 72,6% no estaban federados y un 22,5% tenía entre 19 y 30 años, la franja de edad que este año ha sufrido más percances, como recalca el capitán Fernando Rivero, portavoz del Servicio de Montaña de la Guardia Civil.

Y si hay un dato que también se considera «preocupante», en palabras de Rivero, es que el 25% de los accidentados, o lo que es lo mismo, uno de cada cuatro, realizaba la actividad en solitario.

Las 1.050 personas socorridas entre enero y julio de este año por los agentes de la Guardia Civil lo fueron en 689 rescates, que suponen un 6% más sobre las intervenciones del mismo periodo del pasado año.

El número de fallecidos ha descendido de los 91 en ese periodo de 2024 a los 87 (cuatro menos) de este año, pero los heridos han aumentado de los 413 a los 441 y los ilesos de los 496 a los 522.

Desde el ahogamiento hasta la rotura de anclaje, las causas del accidente al que acude la Guardia Civil son numerosas, pero el mayor porcentaje –uno de cada cuatro– del tipo de accidente es el tropiezo o caída al mismo nivel, con 173 casos del total de rescates, «casi todos provocados por una falta de atención en la actividad».

Le siguen los problemas físicos, con 124 intervenciones de los agentes, entre los que se incluyen golpes de calor, agotamiento, alguna afección cardíaca e, incluso, un cólico nefrítico. «Estamos observando que se hace caso omiso sobre los avisos de olas de calor y la gente no se hidrata o se protege adecuadamente», advierte Rivero.

Tras ellos, le siguen los rescates por extravío, con 109, y ya muy lejos, las caídas verticales, con 73.

Y por tipo de actividad, el senderismo se lleva la palma. Un total de 376 rescates entre enero y julio (el 54,5 % del total) fueron por actividades de senderismo, por delante de los 48 en barranquismo o los 32 en cada caso en escalada en alta montaña y en esquí de montaña.

Dice Rivero que esas cifras tienen que ver con que el senderismo es la actividad más practicada, «por esa falsa seguridad que da caminar en senderos señalizados», pero se lleva a cabo «en un entorno que se puede volver tremendamente hostil con un cambio de tiempo, con un mal cálculo de los horarios, etc...».

En verano, el barranquismo da bastante trabajo a los grupos de montaña (los conocidos como Greim) de la Guardia Civil, ya que «la gente piensa que está en un parque acuático».

«Afortunadamente, la necesidad de alquilar el neopreno y material técnico lleva a los que no están muy acostumbrados a este tipo de actividad a contratar un guía. Gracias a esto hay muchos menos accidentes en el barranquismo», recalca el teniente.

Como ha destacado Rivero, de la estadística de la Guardia Civil se desprende que uno de cada cuatro rescatados fue solo a realizar la actividad (el 25,6%). Mientras, el 31,5% fue con otra persona y el 23,3% en un grupo de más de tres. Antes, dice el teniente, todo el mundo se apuntaba a clubes de montaña para empezar a realizar actividades en el medio natural. Y así debería seguir siendo.