Evidencia científica

Un estudio confirma la efectividad de las medidas restrictivas implementadas contra la COVID-19

La investigación estima cuánto se redujo la transmisión del SARS-COV-2 con el incremento de restricciones para controlar la pandemia

Varias personas caminan por la calle con mascarillas puestas en Sevilla
Varias personas caminan por la calle con mascarillas puestas en SevillaManuel OlmedoManuel Olmedo

Desde su aparición, el SARS-COV-2 tuvo un impacto devastador en todo el mundo. Ante la gravedad de la situación y la falta de herramientas farmacológicas para luchar contra la catástrofe, muchos gobiernos se apresuraron a tomar medidas para tratar de frenar con urgencia su propagación entre la población. Impusieron el uso obligatorio de mascarillas y la promoción de la higiene de manos, la limitación de la movilidad, el confinamiento, el cierre de escuelas y lugares de trabajo no esenciales, etc. La pertinencia de estas medidas, las cuales se fueron actualizando y adaptando a lo largo del tiempo en función de la situación epidemiológica en cada momento, generó un profundo debate. Algunos sectores y grupos de opinión argumentaron que las medidas impuestas eran excesivas y limitaban las libertades individuales, la economía y el empleo. Otros, en cambio, argumentaron que eran necesarias para proteger la salud pública y evitar una mayor propagación del virus. Los epidemiólogos lo tenían claro: era necesario tomar medidas basadas en la evidencia científica y la experiencia en otros países para proteger la salud pública. Ahora, las conclusiones de una investigación liderada por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) confirman que las restricciones impuestas para el control de la pandemia se asociaron a una reducción importante en la transmisión de COVID-19 en España.

Las autoras de esta investigación multicéntrica española, lideradas por la investigadora del Centro Nacional de Epidemiología del ISCIII Susana Monge, han confirmado que el uso de medidas preventivas y restricciones permitió reducir la transmisión del virus y la incidencia de la enfermedad, y han estimado hasta qué punto la intensidad de estas medidas define cuánto se redujo la transmisión: los cálculos estadísticos señalan que incrementar un 34% la intensidad de las medidas logró reducir la transmisión un 22% semanal. Los resultados se publican en la revista Frontiers in Public Health.

Estos porcentajes se han estimado gracias a la aplicación de un índice que mide la intensidad de las medidas restringentes utilizadas de manera combinada, que representa la intensidad en una gradación del 0 y 1 analizando diferentes variables: la aplicación de las medidas en el día a día, los diferentes ámbitos de utilización y su uso por provincias.

El trabajo recoge la información de todas las medidas de restricción impuestas en España desde el principio de la segunda ola en septiembre de 2020 hasta el fin del segundo estado de alarma en mayo de 2021, a nivel provincial e incluyendo también las medidas sobre los municipios. Los resultados señalan como especialmente efectivas las medidas tomadas en distancia social y ocupación de zonas de restauración, sobre todo en interiores, mientras que el efecto es menos claro para otras medidas restrictivas, como las aplicadas en lugares de ocio, cultura y culto, celebraciones religiosas o zonas de práctica deportiva en interiores.

Las autoras destacan que hay que interpretar con prudencia el efecto obtenido con las medidas aplicadas en unos ámbitos frente a otros, ya que estas medidas se aplicaron en distintos ámbitos de manera simultánea, por lo general, lo que hace más complejo su análisis conjunto.

El estudio ha sido realizado por un equipo del ISCIII en colaboración con el Ministerio de Sanidad, el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital y las Universidades de A Coruña, Cádiz y Complutense de Madrid. Además, la investigación se ha llevado a cabo en coordinación con el Comité Español de Matemáticas (CEMat), que bajo la iniciativa de la Acción Matemática contra el Coronavirus ha tenido una estrecha colaboración con el Ministerio de Sanidad y el ISCIII durante la pandemia por COVID-19.

Además de analizar la relación entre la intensidad de las medidas y la incidencia de COVID-19, el equipo del proyecto ha puesto a disposición pública toda la información recogida en la web https://npispain.org/ “para estimular y facilitar la investigación de los efectos de las medidas de restricción y poder tener mayor conocimiento sobre su impacto, algo fundamental para enfrentar posibles situaciones similares en el futuro”, explican las autoras.