Psicología
Marian Rojas dicta sentencia: estas son las consecuencias en adolescentes asociadas al consumo de redes sociales
La psiquiatra alerta de que vivir enganchado a las pantallas "tiene serias consecuencias en el desarrollo cognitivo y emocional"
La edad media en España en la que un menor recibe el primer móvil con acceso a Internet es a los 10,96 años. Cada vez el acceso a estos dispositivos se produce a edades más tempranas, un fenómeno que preocupa especialmente a los expertos de salud mental.
Precisamente la psiquiatra Marian Rojas ha publicado un post en Instagram en el se detallan las graves consecuencias de hacer un uso descontrolado de las redes sociales durante la adolescencia, "una etapa de maduración muy importante".
Estar enganchados a las pantallas puede interferir en el correcto desarrollo cognitivo y emocional del menor, según explicaba la experta en la publicación.
Por ello, es muy importante que durante este período "se cuiden y regulen las conductas que puedan ser dañinas y se fomente la comunicación y las buenas relaciones con compañeros, amigos o familia".
¿Cuáles son las consecuencias del uso descontrolado de las redes sociales?
- El sistema de recompensa se modifica. Cambia la forma de disfrutar, de experimentar el dolor, de relacionarnos y de relajarnos.
- Se busca constantemente la gratificación instantánea. Los menores se acostumbran a la hiperestimulación, a vivir intensamente todo en cuestión de segundos o milisegundos.
- Hay drogodependencia emocional. Cuando desaparece esa búsqueda incesante de sensaciones, surge el temido vacío, la frustraciones, etc.
- Cero tolerancia a la frustración, al dolor, al sufrimientos, etc. Se termina entrando en una espiral de apatía, de angustia, lo que deriva en una crisis de salud mental.
- Viven distraídos. Es más fácil dominar los instintos. Perdiendo la capacidad de atención y concentración.
Marian Rojas: "Históricamente las drogas eran por vena, por nariz o por boca: ahora entran por los ojos, y está diseñado para que sea así”
Rojas ha explorado el impacto psicológico y neurológico de las redes sociales, especialmente la respuesta del cerebro al recibir un "like". Cuando alguien recibe un "like", se produce una liberación de dopamina, la hormona del placer, similar a la respuesta que generan las drogas o el juego. Esta liberación crea una sensación de satisfacción que motiva a la persona a seguir publicando contenido para obtener más "likes". Sin embargo, este ciclo puede llevar a una adicción, afectando la atención, la voluntad y, a largo plazo, la felicidad.
Los dispositivos móviles y las aplicaciones se diseñan para generar adicción. Las empresas tecnológicas utilizan conocimientos de psicología, neurofisiología y neurociencia para captar y mantener la atención de los usuarios, lo que resulta en un consumo continuo y prolongado. Este fenómeno se conoce como "economía de la atención", donde los datos se han convertido en uno de los recursos más valiosos.
La adicción a las redes sociales y dispositivos móviles puede comenzar a edades muy tempranas, afectando profundamente la mente de los niños y adolescentes. Esto puede alterar su capacidad para procesar información, gestionar emociones y manejar la frustración.
La experta recomienda que cada persona reflexione sobre su uso de la tecnología y busque un equilibrio que permita aprovechar los beneficios sin caer en conductas perjudiciales. En el caso de los menores, es vital que la gente adulta de su entorno les ayude a usar los dispositivos móviles con control.
"Necesitamos una juventud con mejores herramientas para resolver situaciones complicadas y las pantallas son expertas, justamente, en arrebatar estas herramientas" concluye la experta en la publicación.
✕
Accede a tu cuenta para comentar