Oncología

Una nueva combinación de fármacos aumenta la supervivencia en el cáncer de pulmón más agresivo

Además, disminuye el riesgo de muerte en un 27% y el de progresión del tumor en un 46%, según los resultados de un estudio liderado por el Hospital 12 de Octubre, de Madrid

Luis Paz- Ares, jefe de Servicio de Oncología Clínica del Hospital 12 de Octubre
Luis Paz- Ares, jefe de Servicio de Oncología Clínica del Hospital 12 de OctubreHospital 12 de Octubre Hospital 12 de Octubre

El cáncer de pulmón de células pequeñas (CPCP) o microcítico representa el 15% de los tumores en este órgano y es particularmente relevante, ya que es el subtipo más agresivo. Está ligado prácticamente en todos los casos al uso de tabaco y tiene una dificultad extraordinaria en su tratamiento ya que la mayoría de las veces se diagnostica con metástasis. Por ello, el desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas es urgente en este contexto clínico.

En este sentido, un nuevo estudio, liderado por el Hospital 12 de Octubre, de Madrid, evidencia que una nueva combinación de tratamiento, un tipo de inmunoterapia (atezolizumab Tecentriq®) más un inhibidor de la transcripción oncogénica (lurbinectedina, desarrollada por PharmaMar) no solo mejora la eficacia del tratamiento estándar sino que también retrasa la progresión de la enfermedad y aumenta la supervivencia global de los pacientes con CPCP en estadio avanzado.

Se trata de un ensayo clínico en fase 3 (denominado IMforte) cuyos resultados acaba de publicar la revista The Lancet coincidiendo con la presentación del estudio en una de las citas más importantes de la oncología, el Congreso de la Sociedad Americana de Oncología (ASCO) celebrado en Chicago, donde se presentan los últimos avances en investigación del cáncer.

Actualmente, lurbinectedina se administra en segunda línea de tratamiento, después de que los pacientes hayan recaído. Su aprobación en primera línea, representaría un paso significativo en el tratamiento de mantenimiento a los pacientes con esta grave enfermedad.

"Lurbinectedina aumenta la eficacia de la inmunoterapia porque es capaz de inducir un contexto inmune más respondedor, el tumor se hace más inmunogénico y responde mejor a la inmunoterapia” explica Luis Paz-Ares, jefe de Servicio de Oncología Clínica del Hospital 12 de Octubre, responsable del grupo Oncología Torácica y Clínico-Traslacional del Instituto de Investigación i+12 e investigador principal de este ensayo clínico. “La tolerancia a esta nueva estrategia terapéutica es adecuada –continúa- y, en base a estos resultados, consideramos que probablemente se adapte esta nueva combinación como nuevo estándar de tratamiento en este contexto clínico”.

“Desafortunadamente, a pesar de los avances en el conocimiento biológico del cáncer microcítico, hemos mejorado muy poco el tratamiento y sus resultados. De hecho, a día de hoy, la supervivencia esperada, a pesar de haber introducido recientemente la inmunoterapia, es relativamente baja, menos de un 10% a largo plazo. Esta nueva combinación de tratamiento de mantenimiento, es la primera que impacta en la supervivencia”, añade el oncólogo.

Se abre la puerta, además, a la utilización de esta combinación terapéutica en estadios más precoces de la enfermedad, no solo como tratamiento de mantenimiento sino también como tratamiento inicial.

En el ensayo se incluyeron 660 pacientes en 91 centros de 13 países (7 centros españoles) con CPCP sin tratamiento previo, sin antecedentes de metástasis cerebrales y con buen estado funcional. Todos recibieron terapia estándar de inicio. Si presentaban respuesta tumoral o estabilización seguían en el ensayo con la terapia de mantenimiento con lurbidectidina y atezolizumab (rama experimental) o atezolizumab solo (rama estándar).

Tras una mediana de seguimiento de 15 meses, la supervivencia sin crecimiento del tumor fue de 5,4 meses en comparación con los 2 meses en los que recibieron atezolizumab solo. Los pacientes que recibieron lurbinectedina y atezolizumab como terapia de mantenimiento tuvieron un riesgo 46% menor de que su cáncer creciera o cambiara que aquellos que recibieron atezolizumab solo.

La supervivencia global para los pacientes que recibieron lurbinectedina y atezolizumab fue de 13,2 meses. En comparación, la mediana de supervivencia global para quienes recibieron atezolizumab solo fue de 10,6 meses. Los pacientes que recibieron lurbinectedina y atezolizumab como terapia de mantenimiento tuvieron un riesgo de muerte un 27% menor que aquellos que recibieron atezolizumab solo.