Navidad 2025
La tendencia viral que está cambiando cómo decoras el árbol de Navidad
Cada vez más hogares están dejando atrás el árbol recargado para apostar por diseños más simples, llenos de luz cálida y pocos adornos
Durante años, las bolas han sido el símbolo por excelencia del árbol de Navidad. Pero esa imagen empieza a quedarse atrás. Cada vez más hogares están aparcando los adornos de siempre para apostar por una decoración más sencilla, cálida y casi escenográfica, donde el árbol se convierte en una pieza de ambiente y no en un catálogo de adornos colgando de cada rama.
Del árbol recargado al árbol "atmósfera"
La nueva tendencia no nace de la nada: llega importada de países del norte de Europa y se ha colado en nuestras casas a golpe de películas, series y redes sociales. El cambio de lógica es claro: menos objetos colgados, más sensación de refugio.
En lugar de llenar el árbol de bolas de colores, la apuesta es otra:
- Menos adornos, pero más pensados: algunos elementos especiales, piezas artesanales o detalles con valor sentimental.
- Protagonismo absoluto de las luces: muchas, pequeñas y en tonos cálidos, creando un efecto envolvente.
- Árboles frondosos pero casi desnudos, que se integran en la decoración del salón en lugar de desbordarlo.
El resultado es un árbol más sereno y elegante, que acompaña el espacio en vez de competir con él.
Naturaleza, nostalgia y "dopamine decor"
Los especialistas en decoración coinciden en que la Navidad que viene se mueve en dos direcciones que se entrelazan:
- Línea natural y nostálgica: gamas de verdes profundos (oliva, musgo), rojos vino, bronces envejecidos y dorados suaves. Materiales como terciopelo, ramas secas, maderas oscuras y vidrio trabajado a mano. El árbol puede ir casi al natural, solo iluminado, o con muy pocos adornos protagonistas. La clave está en que el conjunto se sienta cálido y vivido, no perfecto.
- Toque de "dopamine decor": para quienes prefieren el color, se suman rosas, verdes vivos, azules intensos, aquas y dorados brillantes. No se trata de saturar el árbol, sino de incorporar uno o dos detalles llamativos (un adorno oversize, un muñeco de nieve gigante, una guirnalda inesperada) que aporten alegría y juego visual.
En ambos casos hay una idea que se repite: reutilizar lo que ya hay en casa. Textiles, frascos de vidrio, adornos de otros años… La decoración deja de ser algo que se compra de cero cada temporada y se convierte en un ejercicio de memoria y mezcla.
Las luces, el nuevo "must" del árbol
Si hay un elemento que define esta tendencia, son las luces. Guirnaldas largas, bien repartidas y en tonos cálidos son, literalmente, el 90 % del efecto final. Con ellas se puede:
- Dejar el árbol sin apenas adornos y apoyarlo solo en la iluminación.
- Resaltar unas pocas piezas especiales.
- Extender el ambiente al resto de la casa: marcos de puertas, estanterías, cabeceros…
Adiós a la obligación de colgar bolas en cada rama.[[LINK:INTERNO|||Article|||692cc9c4f2d33700070a49ea||| La Navidad 2025–2026 ]]se mueve hacia árboles más ligeros, llenos de luz y con decoraciones que cuentan historias personales más que tendencias pasajeras.