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El truco para que el edredón no salga de la lavadora hueco

Con estos pocos consejos, puedes alargar la vida útil de estas prendas imprescindibles para el invierno

El truco para que el edredón no salga de la lavadora hueco istock

Lavar un edredón de plumas puede convertirse en una pequeña odisea doméstica si no se siguen los pasos adecuados. Muchas personas han pasado por la experiencia de sacar su edredón de la lavadora y descubrir que parece más una prenda sin vida que ese mullido abrigo que tantas veces les protegió del frío. ¿Qué ha pasado? ¿Se ha estropeado para siempre? La respuesta es no. Y lo mejor: hay solución.

El lavado: clave para evitar el desastre

El primer paso para que un edredón no acabe hueco o desinflado comienza mucho antes del secado. Lo ideal es asegurarse de que la prenda puede lavarse en máquina. Esto es especialmente importante si se trata de plumas naturales, como las de ganso, ya que requieren cuidados más delicados.

Una vez verificado esto, la lavadora debe configurarse en el programa de prendas delicadas o de lana, con una temperatura máxima de entre 30 y 40 grados y una velocidad de centrifugado baja. Esto reduce el riesgo de dañar el relleno. Un truco muy efectivo es añadir al tambor un par de pelotas de tenis limpias: actúan como masajeadores que evitan que las plumas se apelmacen durante el lavado.

En cuanto al detergente, mejor usar una dosis moderada y nunca añadir suavizante. ¿Por qué? Porque el exceso de jabón puede incrustarse en el relleno y dificultar el aclarado, favoreciendo la formación de grumos y provocando ese temido efecto “chaqueta vacía”.

El secado: el momento de la verdad

Una vez lavado, toca secar el edredón correctamente. Aquí hay dos caminos posibles, dependiendo de si se dispone de secadora o no.

  • 1. Con secadora: Es la opción más eficaz para devolver el volumen perdido. Al igual que en el lavado, se recomienda introducir un par de pelotas de tenis o bolas de secado junto a la prenda. Esto ayuda a separar las plumas y mantener su esponjosidad. El programa debe ser de baja temperatura y, si es posible, revisar cada cierto tiempo para asegurarse de que se está secando de forma homogénea.
  • 2. Sin secadora: Si no se dispone de este electrodoméstico, el proceso será un poco más lento, pero igualmente posible. Lo mejor es extender el edredón sobre una superficie plana y bien ventilada, alejándolo del sol directo y de fuentes de calor intensas. Hay que sacudirlo con frecuencia y cambiarlo de posición para permitir que el aire circule entre las plumas.

Cuando el edredón sigue plano: técnicas de rescate

Si, a pesar de todo, el edredón sale del secado apelmazado o sin forma, no está todo perdido. Una de las soluciones más prácticas y accesibles es usar un secador de pelo, siempre en la temperatura más baja. Este método consiste en dirigir el aire caliente hacia las zonas hundidas, entrando por los puños y el cuello si se trata de una chaqueta, o enfocando directamente las partes afectadas en caso de un edredón de cama. El calor ayuda a evaporar la humedad restante y a soltar las plumas, devolviéndoles su volumen natural.

Otra técnica es más manual, pero igual de efectiva: sacudir la prenda vigorosamente varias veces al día y masajear con suavidad las zonas aplanadas para redistribuir el relleno. La constancia aquí es clave.

En muchos casos, los problemas durante el lavado de edredones se deben a lavadoras demasiado pequeñas en relación con el tamaño del relleno. Si la prenda no tiene espacio para moverse libremente, es muy probable que las plumas se compriman, acumulen humedad y formen grumos. Por eso, si tu lavadora no es lo suficientemente grande, lo mejor es acudir a una lavandería con máquinas industriales.

Cuidar un edredón de plumas no tiene por qué ser una tarea imposible. Con el programa adecuado, el uso inteligente de pelotas de tenis y un secado consciente, puedes alargar la vida útil de estas prendas imprescindibles. Y si algo sale mal, no desesperes: con un poco de aire caliente y paciencia, incluso el edredón más aplastado puede volver a su antigua gloria.