Defensa

Así es la bomba JDAM-ER, guiada por GPS, con la que Ucrania podría machacar la retaguardia rusa

Estados Unidos podría haber entregado a Kyiv este tipo de proyectiles, muy precisos, lanzados desde aviones y que pueden alcanzar objetivos hasta 72 kilómetros de distancia.

Así es la bomba JDAM-ER, guiada por GPS, con la que Ucrania podría machacar la retaguardia rusa
Así es la bomba JDAM-ER, guiada por GPS, con la que Ucrania podría machacar la retaguardia rusaBoeing

Aunque la noticia no está confirmada por el Pentágono, son muchas las fuentes militares que parecen confirmar el envío de Estados Unidos a Ucrania de un tipo de municiones de ataque directo conjunto (JDAM), que convierten las bombas ordinarias en armas aire-tierra de alta precisión. Obtener JDAM significaría para la Fuerza Aérea de Ucrania aumentar su abanico de oportunidades de ataque, pues podría lograr destruir, con alta precisión, objetivos enemigos en tierra, al tiempo que brinda cierta protección al avión que los dispara.

Se trataría de bombas guiadas por GPS de largo alcance, capaces de alcanzar objetivos a 72 kilómetros de distancia. JDAM combina un sistema de navegación inercial (INS) y un receptor GPS capaces de convertir bombas simples de caída libre, como son la serie Mk-80, en munición guiada. El kit incluye unas alas que se incorporan al cuerpo central de la bomba y una unidad de cola que tiene aletas controlables que permiten maniobrar el proyectil. Además de tener una gran precisión en cualquier condición climatológica y de visibilidad, se trata de un arma "disparar y olvidar", que permite que el avión se aleje inmediatamente después del lanzamiento. Esto ofrece un aumento significativo en la capacidad de supervivencia. Y, gracias a la guía combinada, la precisión del arma sigue siendo a menudo aceptable, incluso si la señal del GPS se interfiere o se pierde. Además, este tipo de munición es fácilmente adaptable a los aviones que actualmente tiene Ucrania, como el MiG-29, Su-25, Su-24 y Su-27, o los que pudiera recibir en un futuro, pues las coordenadas se introducen en tierra, antes del despegue, sin necesidad de modificar la aviónica del aparato ni cambiar el software. Una vez disparada, la bomba recibe actualizaciones de los satélites GPS, lo que ayuda a guiar con precisión el arma hasta su objetivo.

Además, la versión JDAM-ER ofrece la capacidad adicional de alcanzar objetivos en rangos de distancia mucho mayores. Según Boeing, el fabricante de estas bombas, el kit de ala JDAM-ER triplica el alcance efectivo del JDAM original, dependiendo de la velocidad y la altitud del avión de lanzamiento.

En numerosas ocasiones Ucrania ha pedido proyectiles con un mayor alcance y aunque las JDAM-ER quizás no sean lo que Kyiv esperaba, sí que es un paso en esa dirección, pues estas bombas podrían poner en serios apuras las posiciones defensivas rusas, incluidos los cuarteles generales y las líneas de suministro en la retaguardia.

El sistema JDAM-ER se desarrolló en cooperación con la Real Fuerza Aérea Australiana para bombas de 230 kg, y más tarde se desarrolló un sistema de municiones de 907 kg en cooperación con Corea del Sur.

JDAM permite su uso en armas aire-tierra de precisión contra objetivos estáticos y móviles de cazas y bombarderos. El sistema de navegación se inicializa transmitiendo la alineación desde la aeronave, que proporciona los vectores de posición y velocidad de los sistemas de la aeronave. Las correas proporcionan estabilidad adicional y potencia de elevación.

Tras el lanzamiento, el proyectil se dirige de forma autónoma a las coordenadas de destino especificadas cargadas antes del despegue, aunque la tripulación las puede cambiar manualmente justo antes del lanzamiento o se pueden introducir automáticamente a través de la selección de objetivos utilizando los sensores a bordo de la aeronave, si tuvieran esta tecnología. En su modo más preciso, el sistema JDAM proporcionará un error circular probable (CEP) de cinco metros o menos en vuelo libre cuando los datos del GPS estén disponibles. Si los datos de GPS no están disponibles, el posible margen de error (CEP) es de hasta 30 metros o menos para vuelos libres con duraciones de hasta 100 segundos. JDAM tiene además la ventaja añadida de que se pueden lanzar desde baja cota, pero también desde mucha altura prácticamente en cualquier tipo de circunstancias de vuelo.

GLSDB, bombas de precisión pequeñas y baratas

Paralelamente a este sistema JDAM-ER, el Pentágono también está considerando una propuesta de Boeing para suministrar a Ucrania bombas de precisión pequeñas y baratas (Ground-Launched Small Diameter Bomb) para su instalación en cohetes, lo que permitiría a Kyiv atacar muy por detrás de las líneas rusas mientras Occidente lucha por cumplir con la demanda de más armas. La diferencia respecto del otro sistema es que esta bomba se puede lanzar desde posiciones ocultas o protegidas para evitar la detección y es capaz de destruir búnkeres. Pero lo que realmente sobresale es su largo alcance, de hasta 150 kilómetros de distancia.

Propulsado por el motor de cohete M26 para la fase inicial de impulso/desnivel, las alas del GLSDB se despliegan y vuela sin potencia -tal y como explica Thomas Newdick en TheWarZone- como una bomba deslizante. Utiliza el sistema de navegación inercial existente del GBU-39/B y el GPS incorporado para guiarlo hacia su objetivo. Este sistema es resistente a las interferencias de la guerra electrónica, algo especialmente preocupante en el conflicto de Ucrania .

Los inventarios militares de Estados Unidos y sus aliados se están reduciendo, y Ucrania enfrenta una necesidad cada vez mayor de armas más sofisticadas a medida que avanza la guerra. El sistema propuesto por Boeing, denominado Bomba de pequeño diámetro lanzada desde tierra (GLSDB, por sus siglas en inglés), es uno de los planes para poner en producción nuevas municiones para Ucrania y los aliados de Europa del Este de Estados Unidos, dijeron fuentes de la industria.

GLSDB podría entregarse ya en la primavera de 2023, según un documento revisado por Reuters y tres personas familiarizadas con el plan. Su diseño esta basado en la bomba de pequeño diámetro lanzada desde el aire GBU-39 fabricada por Boeing y empleada por la US Air Force.

Aunque Estados Unidos ha rechazado las solicitudes de Ucrania para enviar el sistema de misiles ATACMS, que tienen un alcance de 297km, el alcance de 150 km del GLSDB permitiría a Ucrania alcanzar objetivos militares valiosos que han estado fuera de su alcance y ayudaría a continuar presionando sus contraataques interrumpiendo las áreas de retaguardia rusas.

GLSDB está fabricado conjuntamente por SAAB AB y Boeing y ha estado en desarrollo desde 2019, mucho antes de la invasión. En octubre, el presidente ejecutivo de SAAB, Micael Johansson, dijo sobre GLSDB: “Estamos esperando contratos inminentemente en breve”.

Doug Bush, el principal comprador de armas del Ejército de EEUU, dijo a los periodistas en el Pentágono la semana pasada que el Ejército también está buscando acelerar la producción de proyectiles de artillería de 155 milímetros, que actualmente solo se fabrican en instalaciones gubernamentales, al permitir que los contratistas de defensa los construyan.

La invasión de Ucrania aumentó la demanda de armas y municiones fabricadas en Estados Unidos, mientras que los aliados de Estados Unidos en Europa del Este están “haciendo muchos pedidos” de una variedad de armas para abastecer a Ucrania, agregó Bush.

“Se trata de obtener cantidad a bajo costo”, dijo Tom Karako, experto en armas y seguridad del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales. Dijo que la caída de los inventarios de EEUU ayuda a explicar la prisa por obtener más armas ahora, y dijo que las reservas están “bajando en relación con los niveles que nos gusta tener a mano y ciertamente a los niveles que vamos a necesitar para disuadir un conflicto con China”.