Informática

Enchufados para la vuelta al cole

Con septiembre llegan los arquetipos propios del mes: la cuesta, el verano que no se quiere ir y las compras para los primeros, los del medio y los últimos días de clase.

Enchufados para la vuelta al cole
Enchufados para la vuelta al colelarazon

Con septiembre llegan los arquetipos propios del mes: la cuesta, el verano que no se quiere ir y las compras para los primeros, los del medio y los últimos días de clase.

Cualquiera que se dedique 10 minutos a navegar un poco por internet a la caza y captura de los mejores gadgets para el comienzo de clase podría observar, con sorprendente entrecejo, que en la lista de los 10, los 12 o los 25 dispositivos más interesantes para la escuela, siempre hay cascos, televisores, baterías portátiles y sistemas para «streaming» de vídeos...Todos ellos tan vinculados a la educación académica como el cachopo asturiano a la dieta mediterránea: apetece hacerse con uno, seguro, pero no cuela. Por ese motivo, hemos decidido pasar de los smartphones, las tabletas y los portátiles para centrarnos en los gadgets con fines educativos y que sí pueden entrar en clase. Si alguien quiere llevar una tele, he visto algunas de 54 pulgadas más livianas que los libros que llevan los niños en sus mochilas.

Si antes los lápices servían sólo para colorear o escribir, ahora son engendros inteligentes con superpoderes. O eso nos parece a algunos. El Circuit Scribe es una pluma cuya tinta conductora permite dibujar circuitos eléctricos, mucho más avanzados que los tableros, clavos y alambres que muchos debíamos llevar al cole para el proyecto de Tecnología.

El boli 2.0

Algunos de nosotros, 15 años atrás, nos considerábamos modernos por llevar una grabadora a la universidad para evitar tomar notas. Hoy es mucho más sencillo y práctico. El Livescribe 3 Smartpen envía las notas manuscritas directamente a un ordenador o al smartphone. También sirve para grabar y basta pulsar en una palabra con este «boli» para escuchar exactamente lo que que el profesor decía en ese momento. Una sola carga dura 14 horas.

La tecla correcta

La gran ventaja del teclado Logitech K480 Bluetooth es que permite realizar la tarea aún sin tener acceso directo al ordenador. Si está disponible un smartphone, este teclado se conecta a él y el alumno puede realizar búsquedas y escribir mucho más rápido. El K48 es capaz de conectarse a tres dispositivos diferentes al mismo tiempo.

Todo polo positivo

Imanes y electricidad. Nada más que eso se precisa para que los más pequeños se pasen horas experimentando con ciencia y tecnología. LittleBits Electronics Base Kit incluye un motor, sensores de luz y movimiento, un motor vibrador y un juego de imanes que conecta todo ello. A partir de ese momento se pueden comprar piezas extras, pero es como un Lego...que enseña electromagnetismo mediante la imaginación.

Redondo, redondo

El robot Sphero SPRK es una esfera. Nada más. Parece demasiado sencillo. Pero los más pequeños, desde la guardería, pueden darle órdenes: hacia dónde moverse, cuan rápido, apagar y encender sus luces y participar de diferentes juegos relacionados con ciencia, matemáticas y arte. Todo resulta un juego (la mejor forma de aprender) en el camino de comprender la codificación.

Curiosidad fuera y dentro del aula

Un profesor se da cuenta de que ha tenido éxito, cuando, fuera de clase, sus alumnos siguen buscando respuestas y preguntas al contenido curricular. Pero a menudo esa curiosidad necesita un estímulo. El microscopio Veho Digital tiene un aumento de 400X, luces LED y, lo mejor es que se conecta al ordenador para que el pequeño (y no tanto) explorador pueda ver en vivo y en directo sus «capturas».

De excursión por planeta Programación

Programar será una de las claves para la nueva generación, permanentemente conectada. No sólo para su éxito laboral, sino porque será un nuevo idioma tan importante como el inglés para personalizar gadgets y aplicaciones. Con esto en mente nacen Dash&Dot, dos robots programables desde la caja, diseñados para niños. Funcionan con una app para Android o iOS y los niños aprenden lo básico de informática por medio de historias, música y luces.

Arquitectos del hogar

Todos esos proyectos de smarthome y casas conectadas nace aquí, con MeshTags. Cada etiqueta (un pequeño bloque de madera) hace lo que uno le ordene: desde subir la persiana, apagar la luz, conectar varias habitaciones por wifi, activar la cámara del teléfono a distancia, etc. Los más pequeños aprenden a codificar, programar y a relacionar dispositivos inteligentes entre sí. Otros Legos, pero para poner la casa patas arriba. Y que camine.

Conectados con seguridad

Al comenzar las clases, sobre todo a partir de los 10 años, las tareas a menudo involucran buscar material en internet. Desafortunadamente los padres no siempre podemos ayudarlos en eso, pero sí buscamos el modo que, ni se encuentren con páginas poco adecuadas para su edad ni se dispersen en su tarea. Para ello existe Kidokey, básicamente una caja wifi, que actúa de filtro para las páginas que sí pueden abrir. Lo bueno es que el contenido no ha sido supervisado por un sistema de inteligencia artificial, sino por padres, maestros y expertos informáticos que han dado su visto bueno. Lo único que hay que hacer es conectarlo al router. Nada más.

La excusa perfecta desaparece

Cuenta la leyenda que muchos haraganes aseguraban, llegado el día de la entrega de un trabajo, que su tarea se la había comido el gato, el perro o el hermano. O que la abuela la había metido en el horno. Pues ya no valen esas excusas con el Rocketbook Wave. Un cuaderno y un boli inteligente que parecen muy normales, pero que envían todo lo que en ellos se escriba a la nube. Lo mejor es que puede usarse en grupo y acceder a todas las notas almacenadas más tarde. ¿Los mejores apuntes? Allí están, para acceso de todos. Y, cuando las hojas se acaban, se mete en el microondas y se borran, para empezar de nuevo.