Spotify anuncia que vuelve a subir de precio

Mala noticia para los suscriptores de Spotify. La veterana plataforma de streaming ha anunciado en su blog un nuevo incremento de precio en sus tarifas. Este llega un año después de que Spotify las subiera por primera vez en su historia -fue lanzada en 2008- el pasado verano.

La subida de 2023 fue global, pero esta comienza por Estados Unidos antes de llegar a otros países. Spotify no hace mención a otros mercados en su publicación y sitúa julio como la fecha en que comenzará a aplicarse. Si tenemos en cuenta la correlación existente hasta ahora entre los precios en dólares y en euros de sus planes de pago, puede preverse que la misma subida, en euros, veremos por aquí.

La suscripción Spotify Premium aumenta 1 dólar al mes, pasando de 10,99 $ a 11,99 $. Spotify Duo sube 2 dólares mensuales, de 14,99 $ a 16,99 $. Y el plan Familiar recibe un incremento de 3 $ en cada mensualidad, subiendo de 16,99 $ a 19,99 $.

La tarifa actual de cada uno de estos planes en España es de 10,99 €, 14,99 € y 17,99 €, respectivamente, con lo que nos podemos hacer una idea de cuánto costarán Premium, Duo y Familiar una vez llegue la subida a Europa. El único plan que no aumenta de precio es el destinado a estudiantes, el más económico, a 5,99 $ / 5,99 € cada mes.

"Para que podamos seguir invirtiendo e innovando en las características de nuestros productos y brindar a los usuarios la mejor experiencia, ocasionalmente actualizamos nuestros precios”, explica la plataforma.

¿Cuándo llegará esta subida a Europa? El mes pasado Bloomberg informó de los planes de Spotify para subir su precio en “numerosos mercados clave” en la segunda mitad de este año, por lo que no habrá que esperar demasiado. También aseguró que Spotify continúa adelante con la creación de un nuevo plan Superpremium en el que lleva años trabajando y que incluye nuevas características en la plataforma. Entre ellas, la transmisión de audio lossless.

Esto se refiere al uso de formatos de audio como FLAC en los que no se pierde ninguna información durante el proceso de compresión. A diferencia de la compresión con pérdida -lossy compression-, que elimina ciertos datos del archivo de audio para reducir su tamaño y facilitar el streaming, la compresión sin pérdida -lossless compression- preserva todos los datos originales y asegura la misma calidad.