De la polémica en Benidorm al «Chanelazo»

Hace meses se conocían los integrantes del cartel de la preselección para Eurovisión, en el Benidorm Fest con Rayden y Azúcar Moreno como cabezas. Pero al final, serían Tanxugueiras, Rigoberta Bandini y Chanel las grandes protagonistas del Festival, que tuvo finalmente a Chanel como ganadora y candidata de España para Eurovisión. Sin embargo, la polémica arrasó el Benidorm Fest en cuanto se conocieron los resultados. El discutible peso del televoto, que apoyó masivamente a Tanxugueiras y el pasado profesional de Chanel con la coreógrafa Myriam Benedited, miembro de aquel jurado, hicieron saltar las teorías conspiranoides en redes sociales. Semanas después de aquel revuelo la cantante reconocía que le llegó afectar tanta polémica y el acoso en redes.

Sin embargo, sería en el extranjero donde recibiría los mayores halagos, en sus visitas a Portugal y en Holanda.El propio Mahmood, que ejercerá de candidato anfitrión en Turín, reconocía a este medio que «lo poco que pude escuchar del Benidorm Fest fueron maravillas sobre Chanel». Así, la artista de origen cubano, ha ido convenciendo a diestro y siniestro en cada intervención televisiva o actuación, que no han sido pocas. Lo que ha vivido en estos meses es una auténtica gira o casi una campaña electoral para convencer de que su candidatura tiene muchos argumentos. Chanel ha ido «desfilando» por «El Hormiguero» o «Masterchef», dándose a conocer a la audiencia.

Pero todos estos escaparates mediáticos no solo los ha utilizado para demostrar sus dotes vocales y de bailarina profesional. Chanel también se ha convertido en un icono de moda y una artista comprometida con muchas causas sociales, aunque hay quien ha intentado utilizar la letra de la canción «Slomo» para acabar con esta imagen.

Polémica en «Slow motion»

Chanel sobre el escenario siempre se ha mostrado como una mujer segura y con carácter arrollador, «ready para romper caderas» como dice la letra de «SloMo». Sin embargo, esta misma estrofa ha sido también criticada por «cosificar a la mujer» y «seguir reforzando la idea sexista que se pretende desterrar para avanzar», una acusación que siempre ha perseguido a la música latina.

El imprevisto con el sol giratorio del escenario de Turín ponía patas arriba la mayoría de puestas en escena del certamen, pero la de Chanel no ha sido de las más damnificadas. Ella ha cuidado todo detalle, más allá de la iluminación y el sonido, apostando decididamente por el vestuario, contando con Palomo Spain como diseñador, una de las firmas más prestigiosas en el extranjero. De hecho, Palomo extiende así su sinergia con RTVE, con quien lleva trabajando desde hace años como miembro del jurado de «Maestros de la Costura». En esta ocasión, la temática taurina es la que ha inspirado el ceñido diseño que lucirá Chanel.

Esta imponente puesta en escena ha ayudado sin duda a que hoy en Turín el de Chanel sea de los nombres más repetidos. Pero además sus dos ensayos consolidaban sin complejos a Chanel entre las cinco favoritas. Así lo acreditan las casas de apuestas eurovisivas. Aunque el porcentaje de probabilidades de victoria que le atisban apenas supera el 5%, iguala el porcentaje que le otorgaban al candidato italiano que ganó en 2021.

Aun así, hasta el sábado todo es un misterio, ya que el televoto a veces ha dado un vuelco a las especulaciones iniciales. Desde Turín la prensa acreditada corrobora estas sensaciones con lo que ya han bautizado como «Chanelazo», imitando otros fenómenos de Twitter como «El Plan» de Fernando Alonso. Tras el tercer ensayo, ayer todo el equipo de Chanel salía radiante y asegurando que «hemos sentido el calor de los asistentes». Además, el ensayo de ayer dejó una divertida anécdota entre Chanel y Laura Pausini, cuando ésta le dio paso, como presentadora del Festival. Pausini le preguntó que «¿cuándo fue la última vez que España ganó Eurovisión?», dando a entender que este año se puede repetir la hazaña. Además, le deseó «mucha mierda».