Inditex está intratable

Son espectaculares los resultados del segundo trimestre de Inditex, conocidos esta pasada semana. No sólo ha esquivado la crisis de inflación y las turbulencias de los mercados, sino que el puntero grupo textil ha disparado sus beneficios hasta un 40%, con unas ganancias de 2.513 millones hasta junio, que serán de 5.200 millones a final de año, apenas por detrás de los gigantes de la banca Santander y BBVA. No en vano la empresa de Amancio Ortega iguala ya prácticamente a Iberdrola como tercera empresa del Ibex por beneficios. Las ventas del grupo rompen también todas las barreras, al sobrepasar por vez primera los 9.000 millones, con una cifra de negocio de 16.000. Un espaldarazo pleno a la gestión de Marta Ortega, cuyo objetivo declarado en la presidencia del holding es hacer un proyecto capaz de transformarse sin perder la esencia, bajo el lema de que «Inditex es magia: siempre podemos hacerlo mejor», dentro de unos valores marcados por «la auto-exigencia».

Los mismos valores que impulsó Amancio Ortega desde el nacimiento del grupo, con la modesta tienda de Zara en La Coruña. Ahora Zara va a levantar en Rotterdam su establecimiento más grande del mundo, que va a superar incluso al Zara inaugurado el año pasado en la Plaza de España de Madrid. La estela de Ortega, interpretada magníficamente bien por Pablo Isla durante años, sigue imparable con Marta Ortega y encara estos días la difícil decisión de retomar en un futuro la actividad en el que fue históricamente su segundo mejor mercado a nivel global: el ruso. Algo que previsiblemente no sucederá mientras persista la guerra en Ucrania.