España a bocados en coche eléctrico

La #eVuelta ha recorrido más de mil kilómetros en nueve etapas en compañía de los chef Samantha Vallejo-Nágera y Pepe Rodríguez

La gastronomía es uno de los platos fuertes de la oferta turística de nuestro país y una excusa ideal para recorrer toda la geografía nacional. De hecho, cada vez son más los viajeros que se suman a esta tendencia que invita al trotamundos a hacer kilómetros en busca de un bocado especial, de esos que quedan grabados en la retina y en el paladar.

Una forma de lo más original de descubrir España a golpe de fogones es la #eVuelta en vehículo eléctrico encabezada por Endesa, que ha recorrido mil kilómetros para dar a conocer a los ciudadanos las ventajas de la movilidad sostenible.

La II vuelta a España en vehículo eléctrico de Endesa se realizó a finales de 2018 a través de 10 etapas que incluyeron la visita a un total de 16 ciudades tanto de la Península como de las Islas Canarias y de las Islas Baleares bajo la batuta de empleados de la compañía eléctrica que recorrieron más de mil kilómetros en compañía de Samantha Vallejo-Nágera y Pepe Rodríguez, de MasterChef, en busca de productos ecológicos de calidad que llenan las mesas de nuestro país.

Santiago, punto de partida

La primera etapa arrancó en Galicia, con Santiago de Compostela como inmejorable telón de fondo. Aquí resulta obligado realizar una visita a la plaza del Obradoiro y, ya que estamos, adentrarse en el templo más famoso de nuestro país para saludar a Santiago Apóstol. Con los deberes hechos, la aventura gastronómica propuesta por los chefs arranca en L’Horta D’obradoiro, en la calle de Las Hortas, un restaurante de apenas tres años pero con una apuesta potente a medio camino entre la cocina clásica gallega y las nuevas tendencias.

En este caso, el chef Pepe Rodríguez y Emilio, empleado de Endesa, aprovecharon para degustar gastronomía típica, y no dudaron en atreverse con una buena ración de pimientos de Padrón, uno de los productos más simbólicos de la tierra gallega, pues ya se sabe que algunos pican y otros no. ¿Distinguiría Pepe unos pimientos normales de unos de Padrón?

Movilidad eléctrica

Dentro del compromiso por la lucha contra el cambio climático, Endesa apuesta por la movilidad eléctrica como una de las piezas clave en la transición a un modelo energético más sostenible. Son muchas las ventajas que ofrece el coche eléctrico para proteger el medio ambiente, pero también para el usuario, pues se trata de un transporte cómodo, silencioso y cuya huella ambiental es de cero emisiones, de ahí que su priorización en las ciudades lo haga además muy rentable: su uso implica un importante ahorro en aparcamiento y circulación.

La oferta de coches eléctricos casi se ha triplicado en los últimos años en nuestro país y varios estudios constatan la tendencia al alza. De hecho, ya se puede acceder a un vehículo de este tipo por 19 euros al día por medio de los diferentes planes de renting, como el BMW i3, pero hay otras opciones aún más baratas, tal y como muestra un estudio de la web Autocasión que constata la curva descendente en los precios de este tipo de vehículos. En concreto, los automóviles eléctricos puros tienen costes de consumo mucho más bajos (la electricidad es más barata que la gasolina y el diésel) y el gasto de mantenimiento es menor, ya que sus motores son más simples, tienen muchas menos piezas y hacen la función de retención por medio de la recuperación, por lo que los discos y las pastillas de freno se gastan más tarde.

Más de 2.000 puntos de recarga

Con estos datos sobre la mesa y la creciente preocupación por el entorno, no es de extrañar que la movilidad sostenible sea una realidad dominante en los próximos años. De hecho, Endesa espera tener más de 2.000 puntos de recarga públicos en 2020, que se multiplicarán por cuatro tres años después. Y más de 100.000 puntos de recarga privados en este periodo. Es el compromiso firme de la compañía: que el usuario no recorra más de 100 kilómetros sin tener un sitio donde repostar la batería.

De Burgos a Logroño

Viñedos de titanio para disfrutar de un maridaje perfecto

Samantha y Gonzalo, empleado de Endesa, recorrieron la distancia que separa Burgos y la capital de La Rioja en vehículo eléctrico. Pero, antes de arrancar, los protagonistas de la segunda etapa de la #eVuelta aprovecharon para visitar el museo de la Evolución Humana, una cita imprescindible para conocer los entresijos de nuestra historia. Después, la ruta cruzó los campos de secano burgaleses que, poco a poco, dejaron paso a los viñedos riojanos. A mitad de camino la parada obligada fue la bodega Marqués de Riscal, diseñada por el genial arquitecto Frank Gehry, donde el vino es el actor principal, permitiendo un exquisito maridaje entre los mejores caldos y la cocina típica de la zona.

De Alcañiz a Huesca

Picnic de verduras, quesos y tomate rosa

La tercera etapa de la #eVuelta partió desde el icónico Parador de Alcañiz, ubicado en la comarca del Bajo Aragón, en la provincia de Teruel, donde los protagonistas, Samantha y Bienvenido Domingo, empleado de Endesa, disfrutaron de un picnic a base de verduras frescas y quesos muy diversos que tanta buena fama tienen en la zona, entre las que no faltaron los tomates rosas, cuyo sabor resulta muy sabroso y único. Una de las sorpresas de esta etapa fue la de poder conducir en el circuito de Alcañiz, referencia en el mundo del motociclismo. Después, tras varios kilómetros de carretera, la aventura terminó en la ciudad de Huesca, donde resulta obligado visitar la catedral y, por supuesto, sentarse a la mesa de alguno de sus restaurantes para probar el ternasco o los espárragos montañeses.

Lanzarote, sabores volcánicos

Delicatessen canaria

Las Islas Canarias son uno de los destinos obligados para cualquier viajero que se precie y también, por supuesto, para los que quieren disfrutar de un viaje gastronómico. Por eso, la cuarta etapa de la #eVuelta Endesa llevó a Pepe Rodríguez y a Germán hasta Lanzarote, quienes recorrieron la isla en coche eléctrico. El paraje Natural de La Geria, muy próximo al Parque Nacional de Timanfaya, cubierto de un espectacular manto negro de ceniza volcánica, fue uno de los lugares en los que los protagonistas pudieron chuparse los dedos, pues la aventura incluyó una parada en Bodegas La Geria, donde les esperaba delicatessen de la zona, como mermelada de cactus, de aloe vera y quesos locales de lo más sabrosos.

De Sevilla a Córdoba

Frutas y verduras de la huerta sevillana

Los viajeros más exigentes, también los gastronómicos, bien saben que Andalucía casi nunca defrauda, no en vano puede presumir de tener una de las despensas más privilegiadas de la geografía española. Buena prueba de ello fue la quinta etapa de la #eVuelta que partió desde Sevilla para acabar en la ciudad de Córdoba. Antes de arrancar, Pepe Rodríguez y Juan, empleado de Endesa, descubrieron una frutería local en la que compraron productos propios del campo andaluz, ya que el producto fresco de las huertas sevillanas, denominados kilómetros cero, llega a los puestos de forma directa, como a Verde Limón, encabezado por Fernando, una frutería ecológica donde Pepe y Juan se retaron a descubrir si conocían el nombre de cada uno de los productos.

De Mérida a Cáceres

Higos de chocolate, la innovación del sabor extremeño

La sexta etapa de la #eVuelta atravesó el campo extremeno desde Mérida hasta llegar a Cáceres. La primera de ellas es uno de esos destinos que hay que visitar al menos una vez en la vida, pues su puente romano, con más de 2.000 años de tradición, rezuma historia, aunque en cada callejuela el viajero puede toparse con restos romanos que quitan el hipo. Precisamente el puente romano fue el punto de partida del recorrido que realizaron Samantha y Javier, empleado de Endesa, cuyo destino fue la plaza mayor de Cáceres. Además, hicieron un alto en el camino en Almoharín, capital europea del higo, donde degustaron productos locales como higos rellenos y cubiertos de chocolate.

De Tarragona a Barcelona

Calçotada con vistas a la montaña

La gastronomía catalana es uno de los platos fuertes que puede encontrar el viajero en este destino, tal y como comprobaron Samantha y la empleada de Endesa, Grasielli Feuser, quienes se sentaron a la mesa del restaurante Can Martí, situado en la montaña de Collserola, en medio de la naturaleza. Allí disfrutaron de una tradicional calçotada, una variedad de cebolleta/puerro especialmente cultivada asada directamente sobre llamas de sarmientos que se comen con la mano y aderezados con una salsa especial, la salvitxada, similar a la romesco. Barcelona fue el final de la etapa, donde resulta obligada una visita a la Sagrada Familia.

Mallorca

Aceitunas y clementinas con denominación

Las Islas Baleares no defraudan a ningún viajero, pues tiene el privilegio de combinar mar, montaña y una oferta turística de lujo, entre la que se incluye una gastronomía de máximo nivel. El recorrido por la isla de Mallorca se realizó por carreteras montañosas y serpenteantes que regalaron a Pepe Rodríguez y Arnau Domínguez, empleado de Endesa, paisajes únicos y muy espectaculares. Para conocer la gastronomía más auténtica de la isla, Pepe y el empleado visitaron La Cooperativa Agrícola Sant Bartomeu de Sóller, fundada en el año1899, que hoy en día dispone del único huerto ecológico del valle, donde además de aceitunas con denominación de origen propia destinadas a la producción de su propio aceite, se cultivan unas clementinas de sabor excepcional.

Última etapa: Madrid

Raciones de gambitas, jamón, queso, mejillones, broche final de la #eVuelta

La etapa final de la #eVuelta fue en la capital española, donde se realizó un corto recorrido desde las oficinas de Endesa hasta el Paseo del Prado, pero muy intenso. Entre las paradas gastronómicas obligadas de esta ruta, Pepe Rodríguez y la empleada de Endesa María del Roser Medina hicieron una parada en el bar «El doble», el lugar favorito de Pepe, según confesó el chef. Aquí el menú es sencillo, pero de lo más auténtico: cañas de cerveza bien fresquita con unas gambitas, unos mejillones, una de queso, un poquito de jamón cortado a cuchillo... Todo ello ideal para brindar por el final de una aventura que ha recorrido 16 provincias y más de mil kilómetros.

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