Parrilla vasca, vinos y un toque asiático

El sabor viajero no tiene límites y en esta ocasión la alta cocina se encarga de presentar el hierro y fuego del País Vasco cimentado con técnicas asiáticas en el restaurante Asiako. Ubicado a solo unos pasos de la Castellana, en Marqués del Riscal, 5, la brasa y la parrilla Japo-Fusión cobran cuerpo en un elegante y recóndito espacio. El chef Eduardo Marco y el jefe de sala y sumiller Luis Martín-Portugués le han imprimido a Asiako un sello indiscutible con una atrevida carta cuyo hilo conductor es la carne vasca en porciones ligeras.

Para empezar, entre los principales éxitos de entrantes destacan las alcachofas ahumadas a la brasa, el bocata brioche de panceta al estilo chino o el katsuobushi, hecho con una divertida versión del talo, típico de la gastronomía vasca. Y ya que nos sumergimos por el norte español, es momento de degustar el dim sum de rabo de vaca betizu. El recorrido continúa a través de los famosos nigiris del chef. En este punto, ya nos hemos rendido ante Asiako, pero esta nos estimula más, ya que además de todo el sabor, cada plato es macerado con una selección de vinos, perfectos para acompañar esta ruta de sabores.

Entre algunas de las galantes opciones vinícolas que encontramos en el mesón, está el Mingua Garnacha Blanca 2020, el Pyjama Mencía del Bierzo o el Velo Flor Manzanilla (Bodegas Alonso). El toque dulce fulmina este encuentro con el mochi de panchineta, la clásica tarta de queso o, en líquido, la sidra de hielo Valverán 20. Asiako es el restaurante más gastronómico de Grupo Sr.Ito, el cual ha sido recomendado por las distinguidas guías Repsol y Michelin. Sugerencias más que merecidas, por la gran calidad que se percibe en cada detalle del lugar.