Viajes

Ponant Cruises: una expedición de lujo por los confines del planeta

La compañía propone recorrer la Antártida y el río San Lorenzo de la forma más cómoda y exclusiva

Foto retocada: fotomontaje con dos imágenes. Paisaje Antártida. Ponant Cruises
Paisaje Antártida. Ponant Cruises©Nathalie Michel, NStudioPONANT

Adentrarse en las regiones más inexploradas del planeta en un buque de lujo puede parecer un sueño. Pero ese sueño es viable cuando se realiza de la mano de expertos. Es el caso de Ponant Cruises, líderes en expedición de lujo. En concreto, Ponant ofrece elegantes cruceros de estilo francés que recrean la atmósfera de un yate privado. Su flota, de pequeño tamaño, diseñada y certificada para zonas extremas, permite navegar por zonas de difícil acceso: regiones polares extremas como el norte de Alaska, la Antártida o el Ártico, el archipiélago malayo, el río Amazonas o las islas remotas del Pacífico.

Los 13 buques que actualmente forman parte de la flota de Ponant aúnan diseño, tecnología avanzada y respeto por el medio ambiente. Todo ello con el confort asegurado, gracias a un equipamiento innovador, camarotes elegantemente diseñados, espaciosas suites con ventanas y áreas de salón que se abren hacia el exterior. Así, Ponant es fiel a su filosofía: pequeña capacidad, decoración exquisita, ambiente único y una sutil mezcla de lujo, privacidad y bienestar siempre con un pulcro respeto al entorno. Además, cuenta con una amplia gama de actividades a bordo y charlas sobre naturaleza impartidas por guías expertos.

Ponant Cruises
Ponant Cruises©François LefebvreStudioPONANT

Donde otros no llegan

Gracias al pequeño calado de sus yates, estos pueden atracar y llegar donde otros barcos de gran calado no pueden acceder. Por ello sus itinerarios son los más insólitos y llegan a puertos muy exclusivos, tal y como ocurre en la mítica Antártida. Y es que, si hay un destino en el que Ponant es experto, probablemente sea la Antártida, pues la compañía ofrece 60 cruceros de lujo de expedición para contemplar una tierra legendaria con una historia de atracción de grandes exploradores.

Ponant ofrece la posibilidad de descubrir el continente blanco a bordo de Le Commandant Charcot, primer rompehielos eléctrico de clase polar, o en sus buques gemelos de pequeña capacidad y ambiente único, diseñados para expediciones polares. En concreto, concreto, para el invierno 2024-2025, la compañía ofrece salidas desde diciembre a marzo.

Con la garantía de Ponant, el viajero puede adentrarse en la Antártida más emblemática. Tras cruzar el legendario Pasaje de Drake, la Península Antártica ejerce su magia sobre los ojos de quienes llevan tanto tiempo soñando con venir aquí. Le espera un telón de fondo helado repleto de una fauna excepcional: pingüinos, ballenas jorobadas, jorobadas, focas, elefantes marinos... Y todos los días, según las condiciones, desembarcos y salidas en zodiac para descubrir los tesoros del continente austral (icebergs tabulares, playas volcánicas, estaciones de investigación científica, vestigios de la industria ballenera).

Osos polares
Osos polares ©Olivier BlaudStudioPONANT

En primicia

En la temporada de invierno 20242025, Le Commandant Charcot realizará por primera vez un itinerario muy especial, revelando el Lejano Norte en todo su esplendor, visitando los fiordos noruegos, el archipiélago de Lofoten, el Cabo Norte, Spitsbergen, el río San Lorenzo, el Mar Báltico, Finlandia, el Golfo de Botnia… Esta región ofrece muchísimos paisajes extraordinarios para apreciar y admirar. Le Commandant Charcot ofrecerá estos nuevos viajes y una gama completa de experiencias sin precedentes, ideadas para brindar una experiencia inmersiva en la atmósfera única del invierno boreal.

Por primera vez, Le Commandant Charcot navegará el 17 de enero de 2025, a través del hielo del río San Lorenzo, una región inaccesible a los barcos convencionales en esta época. En este río legendario, la exploración cobra todo su significado. En el aspecto cultural, cabe disfrutar de la cálida cordialidad de los animados festivales y carnavales de invierno, como el que se celebra en la ciudad de Quebec. Con la oportunidad de conocer al pueblo Innu, sus leyendas y su forma de vida adaptada a las condiciones extremas. En cuanto a la naturaleza y el entorno natural, destaca el majestuoso bosque boreal, adornado con su manto blanco y que se extiende hasta donde alcanza la vista.