Lenguaje
¿Cuál es el superlativo de «enemigo»? Esta es la respuesta de la RAE
La prestigiosa institución aclara que, durante la construcción de esta forma gramatical, se modifica la raíz del adjetivo
La lingüística siempre ha sido un campo de interés para aquellos apasionados por las complejidades del lenguaje. En esta ocasión, nos adentramos en un tema que ha generado cierto debate: la formación del superlativo del adjetivo "enemigo".
Cuando exploramos la gramática española, nos encontramos con la fascinante categoría de los superlativos, que denotan el grado máximo de una cualidad. La mayoría de las veces, formar un superlativo es tan simple como agregar el sufijo "ísimo -ma" al final del adjetivo. Así, obtenemos términos como "facilísimo" o "cordialísimo".
Sin embargo, existen casos peculiares que requieren un análisis más detenido. Uno de ellos es el adjetivo "enemigo". ¿Cuál sería su superlativo? ¿"Enemiguísimo" o "enemicísimo"? Según la Real Academia Española (RAE), el superlativo del adjetivo "enemigo" es "enemicísimo". Esta forma, que presenta una modificación sustancial de la raíz del adjetivo, es considerada la más adecuada por la institución lingüística de referencia.
Además de "enemicísimo", la RAE menciona otras variantes como "inimicísimo", aunque poco utilizada, y "enemiguísimo", que ha caído en desuso. Este detalle resalta la riqueza y la complejidad del idioma español, donde incluso la formación de una sola palabra puede generar discusiones y análisis profundos.
Más allá de la cuestión gramatical, el adjetivo "enemigo" posee una amplia gama de significados. Puede referirse a algo o alguien contrario, opuesto o adversario. En el contexto de una guerra, se utiliza para describir a personas o países que están en conflicto. Además, se aplica a aquellos que tienen mala voluntad hacia otros y les desean o hacen mal.
✕
Accede a tu cuenta para comentar