Política

Moreno apela a la «sangre andaluza» de Montero para que pague la deuda

El presidente de la Junta cree «insólito» que Hacienda ofrezca a las regiones endeudarse más y el PSOE le pide que no dé lecciones de andalucismo porque el PP «es heredero de Alianza Popular»

El presidente de la Junta, Juanma Moreno, hizo balance ayer en el Parlamento andaluz de los resultados del Consejo de Política Fiscal y Financiera
El presidente de la Junta, Juanma Moreno, hizo balance ayer en el Parlamento andaluz de los resultados del Consejo de Política Fiscal y FinancieraManuel Olmedo

La cercanía del 28F se notó ayer en el Parlamento andaluz. Los partidos vienen planteando una peculiar competición para exhibir qué formación es la más andalucista. Uno porque se desmarca de la directriz que establece Madrid para formar un grupo propio con acento andaluz, otro porque ha gobernado la Junta durante casi 40 años y otro porque «antepone» los intereses de los andaluces a los del partido. Esta pugna se visualizó en la Cámara, especialmente en el «cara a cara» que mantuvieron el presidente de la Junta, Juanma Moreno, y el portavoz parlamentario socialista, José Fiscal, que fue el encargado de formular las preguntas al presidente dado que la líder de los socialistas andaluces, Susana Díaz, se ausentó porque acaba de dar a luz. Durante el encendido debate la bancada popular volvió a sacar a relucir la reclamación de los 537 millones de euros por la liquidación del IVA correspondiente a 2017, rechazada por el Ministerio de Hacienda a cambio de permitir a las comunidades autónomas la posibilidad de endeudarse más. Es en este contexto cuando Moreno aseguró que espera que a la titular del ramo, María Jesús Montero, «le hierva la sangre andaluza» y se dé cuenta de que «no puede maltratar a la región». El presidente lamentó que el último Consejo de Política Fiscal y Financiera dejó la «sensación» de que la reunión «sólo sirvió para cubrir un expediente» y no para solucionar los «graves problemas» que padecen las comunidades en materia de financiación, al tiempo que calificó de «insólito» que ofrezca un aumento del objetivo de déficit. También lamentó que la reunión se produjera un día después del encuentro que mantuvieron Pedro Sánchez y Torra en Barcelona, en el que el presidente del Gobierno prometió 4.000 millones de euros para Cataluña. Ante esto, Moreno aseguró que «no podemos quedarnos de brazos cruzados», recordando que ha enviado un requerimiento al Ministerio de Hacienda para reclamar el pago de la deuda y, si no hay respuesta, formulará un recurso en los tribunales.

Fiscal, por su parte, hizo una encendida defensa de la gestión socialista en Andalucía, unas políticas que «transformaron la región radicalmente», aunque, tras 40 años de autonomía, reconoció que «todavía quedan retos por resolver». En este punto, aseguró que el actual Gobierno andaluz «no está dando respuesta a las principales demandas de los ciudadanos». También echó mano de un argumento habitual en las comparecencias de los socialistas: el apoyo externo de Vox, un partido que «no cree en la autonomía andaluza y quiere eliminarla». «No van a ser más autonomistas que nadie ni van a tergiversar la realidad», insistió Fiscal, además de remarcar que la voluntad de su grupo parlamentario no es la de «confrontar por confrontar». Por tanto, instó al presidente a «no dar clases de andalucismo absolutamente a nadie», puesto que el PP es «heredero directo» de Alianza Popular, un partido que no apoyó la autonomía.

Moreno recogió el guante calificando de «vacío» el argumento de Fiscal. «Me reprocha el apoyo de Vox cuando Sánchez tiene el respaldo de partidos como ERC y Bildu que quieren romper España». Junto a ello, señaló que está seguro de que hay diputados socialistas que «aman a esta tierra» y no están de acuerdo con el menoscabo de fondos públicos que lleva a cabo del Gobierno.

«Pablo Iglesias es quien tiene que apretar»

Los ecos de las manifestaciones de los agricultores, ante la crisis de precios que padecen, resonaron ayer con fuerza en la Cámara andaluza. Todas las formaciones respaldaron las protestas, pero también se escucharon reproches. El presidente de la Junta, Juanma Moreno, instó al Gobierno central a «tomarse en serio» los problemas del campo, además de asegurar que quien tiene que «apretar» es el vicepresidente Pablo Iglesias, en alusión a sus declaraciones en las que animaba al sector a «seguir apretando». Moreno criticó la «falta de decisiones» por parte del Ejecutivo de Sánchez. «¿Qué va a hacer? ¿Cómo no está ya trabajando de manera determinante para que la Política Agraria Común (PAC) o el presupuesto sea importante?», se preguntó dirigiéndose a la bancada socialista. Por ello, exigió al Ejecutivo central que sea «consciente» de la situación del campo porque «si hay una reducción vamos a un drama social y económico y a un caos en el sector». «No veo esa conciencia», lamentó, además de criticar que «se pasen la pelota de unos a otros» mientras censuró que pidan al sector que «apriete» porque ellos son «los que tienen que apretar». Los diputados de Vox lucieron en su solapa lazos verdes como muestra de apoyo a las reivindicaciones del campo.