PP y Cs pactan que no habrá «trasvase» entre sus cargos para blindar el Gobierno andaluz

Un «acuerdo de garantía de estabilidad» para encarar con sujeciones la montaña rusa en la que se ha convertido la política española. Esto es lo que han firmado las direcciones regionales de PP y Ciudadanos (Cs), según han anunciado hoy el vicepresidente de la Junta, Juan Marín (Cs), y el consejero de la Presidencia y portavoz del Ejecutivo, Elías Bendodo (PP). Han concretado que se trata de una adenda de cinco puntos que extiende el pacto de 2018 con el que echó a andar una legislatura que tienen la «intención firme» de agotar. La iniciativa partió de los populares y entre lo rubricado destaca el apartado dos, en el que se lanzaron estas palabras: «Respeto a la autonomía de los dos partidos que integran el Gobierno andaluz, con el compromiso de que no se produzca ningún trasvase entre cargos de las formaciones políticas con representación parlamentaria».

«Estamos hablando de respetar que Ciudadanos no va a aceptar ningún cargo electo ni ningún responsable político del PP, si –alguien– lo pretendiera, y que el PP tampoco» a la inversa, ha condensado Marín. O, dicho de otra forma, «de Despeñaperros para abajo» han optado por «reafirmar el compromiso» que en teoría se había plasmado en el recién actualizado en el Congreso Pacto Nacional Antitransfuguismo, tras la ruptura de coaliciones de gobierno de PP y Cs en la Región de Murcia o en la Comunidad de Madrid; y de que cargos como el ex secretario de Organización de la formación naranja Fran Hervías se hayan pasado a las filas populares. Pese a que el secretario general del PP, Teodoro García Egea, ha llamado estos días a dar ese paso a los dirigentes de Ciudadanos, en lo que desde este partido han calificado de «OPA» hostil, tanto Bendodo como Marín han asegurado que le han trasladado el movimiento a sus respectivas direcciones nacionales y lo apoyan.

De hecho, Bendodo ha dicho haber hablado con Egea y que éste ha «comprendido» y respalda «la decisión importante» que se ha tomado para «dotar de mayor estabilidad aún» al Ejecutivo autonómico que encabeza Juanma Moreno. «El mensaje debe ser ‘todos nos quedamos en Andalucía donde estamos’», hareiterado, para que no haya «injerencias» ni «ruido externo». Ha proclamado que «el PP es un partido de puertas abiertas para entrar y para salir», pero ha matizado que «ahora» y en la región van a «respetar este acuerdo».

«En Andalucía hay estabilidad institucional y la va a haber hasta finales de 2022», cuando tocan las elecciones, ha garantizado el portavoz de la Junta. Y ha engarzado que le han «dado un impulso» al acuerdo armado hace dos años y cumplido «en un 90%», con el fin de «encapsular» todavía más al Gobierno autonómico y «ganarle la partida a la pandemia» para que la comunidad pueda «coger el tren de la recuperación». «Vamos a mantenernos cada uno donde estamos», ha martilleado, en alusión a los integrantes de PP y Cs, al menos hasta que se agote la legislatura. Después, «ya se verá».

«Andalucía hoy tiene estabilidad, el resto de España no la tiene y lo que pretendemos es que no haya ningún género de dudas de que esta legislatura el que la empezó en Ciudadanos la terminará en Ciudadanos y cuando lleguen las elecciones de 2022 y se disuelvan el Parlamento y el Gobierno –regionales–, cada uno que haga lo que le parezca y crea conveniente», ha recalcado Marín.

En la misma línea, Moreno ha aseverado más tarde: «Los dos socios de gobierno nos blindamos», ya que «son muchos los asuntos pendientes». Buscan «que no haya transferencia» de una fuerza política a otra que pueda desestabilizar el Ejecutivo, en una situación en la que, de momento y a pesar de la volatilidad general, no les consta que exista ningún intento de moción de censura en la comunidad. También han descartado que haya previsto cambios en la estructura de un Ejecutivo regional que sigue teniendo como prioridades la salud, el empleo y el trasmitir tranquilidad a ciudadanos e inversores. De hecho, el presidente ha descrito a Andalucía como un «refugio seguro» frente a «la tormenta» que existe en otras zonas del Estado.

En el resto de puntos del refuerzo del pacto original se ha incluido la protección de la sanidad, la educación o las políticas sociales; y la profundización en la regeneración democrática y en la agenda reformista «tras décadas de mala gestión y corrupción de los gobiernos socialistas» en la comunidad. Éstos han quedado redactados como sigue: