Entrevista
Francisco Salado: «No entendemos por qué el Gobierno no hace nada ante la escasez de AVE»
El presidente de la Diputación de Málaga considera «un castigo» la falta de conexiones con Madrid
¿Con qué sensaciones arranca la temporada estival?
Siempre he sido muy optimista pero en esta ocasión además los datos lo avalan y, aunque no se equipara en previsiones a los históricos datos de 2019, estamos muy cerca. El mercado que más se está ralentizando y que nos tiene pendientes de la última hora es el alemán; entre tanto, el francés, el italiano y el nórdico están aportando buenos vaticinios. Respecto al británico, que es nuestro principal emisor y que sufrió con la pandemia una caída del 30%, también se está equiparando a los datos anteriores al coronavirus. En cualquier caso, las reservas de última hora nos harán superar las previsiones iniciales que apuntan al 80% y podemos pensar que finalmente se alcanzará el 90, que es un porcentaje muy positivo.
En ese objetivo de recuperar los indicadores de 2019, ¿cuál es la hoja de ruta?
Seguimos haciendo campañas no sólo para el verano, sino especialmente de cara al último cuatrimestre y adelantándonos ya a 2023. Estamos implementando acciones importantes en mercados como el americano, especialmente en el segmento de golf, con la mirada puesta en la Solheim Cup en septiembre del año próximo. Tenemos que conseguir que ese deporte, el golf, sea todo un atractivo para ese mercado. Y todo ello, con el objetivo claro de alcanzar la definitiva desestacionalización, y que cosechemos niveles importantes de ocupación durante los doce meses del año.
El aeropuerto de Málaga es uno de los puntales.
Sin duda. Trabajamos intensamente en mejorar la conectividad a nivel aéreo con el continente europeo; afortunadamente, cada vez hay más enlaces con ciudades hasta ahora nunca conectadas. Y además, se ha avanzado mucho con el resto del mundo; hemos de conseguir que se avance en la implantación de vuelos que nos unan con Estados Unidos.
¿Cuáles son las principales amenazas que pueden hacer que se tambaleen las previsiones?
Desafortunadamente, no son pocas. La inflación, la subida de precios, el conflicto en Ucrania... Son factores que distorsionan el mercado turístico. Y, además, nos encontramos con la injusta e insuficiente oferta de conectividad a través de la Alta Velocidad con Madrid. El mercado nacional, que es un gran puntal para este destino, está sufriendo enormes molestias por la falta de frecuencias. No llegamos a entender por qué no se recuperan los horarios y trenes que había antes de la pandemia. Y es fundamental, no sólo para el sector turístico, sino para el sector empresarial, habida cuenta de que hay un importante volumen de viajeros que utiliza esa conexión para hacer negocio.
¿Por qué no se amplia esa oferta, ante la demanda creciente?
Eso habría que preguntárselo al Gobierno, no lo entendemos. Máxime cuando la línea Málaga-Madrid es sin lugar a dudas una de las más rentables para ADIF. Espero que no sea porque se ha desviado máquinas y medios humanos a otros destinos, pero insisto, nos tememos que podría ser eso y lo peor, hay poco margen de maniobra para reaccionar con la temporada ya iniciada. No podemos entender el castigo que se nos impone. Esa circunstancia ha provocado que líneas aéreas como Iberia, Ryanair o Easyjet estén aumentando sus vueltos, que van prácticamente llenos cada día.
Esta semana viajó a La Palma para ceder un camión de bomberos a su Cabildo. ¿Orgulloso de la labor del Consorcio Provincial de Bomberos (CPB) tras el incendio de Benahavís y los de veranos anteriores?
El CPB es todo un ejemplo; tenemos el mejor equipamiento del mercado, no hay que escatimar gastos en materia de seguridad. Se presta atención no sólo a incendios sino a otro amplio abanico de contratiempos, como rescates, accidentes. Se ha demostrado que, en cualquier momento, la naturaleza te sorprende y surge una catástrofe que requiere de respuesta rápida. Y nuestros bomberos la han dado, la dan y la darán. No sólo en los incendios sino allá donde se les requiera, caso de La Palma, donde una delegación malagueña colaboró en las labores de control de la emergencia volcánica. Fueron 20 efectivos los allí desplazados que prestaron servicio durante 3.360 horas.
✕
Accede a tu cuenta para comentar