En Barbate pasan cosas

Hoy quiero contarles un secreto de mi pueblo que seguramente les va a sorprender. Muy poca gente lo sabe, apenas se habla de ello, no se lo cuenten a nadie, será nuestro secreto. Pero en Barbate pasan cosas.

En Barbate, los días de levante, las olas se peinan los tirabuzones blancos antes de llegar a la orilla de la playa de El Carmen, se acicalan, muy coquetas, para seducir a quienes las esperan sin dejarles ver su pelo arremolinado. El viento cuando sopla canta, y canta y canta, y el sol cuando calienta abraza. El mar es mucho más azul que el mismo cielo y la nieve querría ser la arena de las playas de mi pueblo.

No se lo cuenten a nadie, es un secreto, pero en mi pueblo, el sol sonríe cada día antes de acostarse, antes de dejarse caer en su almohada de la playa de Zahora.

En Barbate las mujeres aprendieron a trabajar de las demás mujeres y enseñaron a los atunes a descansar en camas de lata y colchones de aceite. En mi pueblo nacieron los hombres más valientes, los que atrapaban el mar con sus redes, aunque muchos se enamoraron de la sal y no volvieron.

En Barbate el atún sabe a atún, el vino sabe a vino, y el pescado no se fríe porque salta de la sartén al plato huyendo de la llama. En mi pueblo el tomate sabe a tomate y casi que no le hace falta ni aceite ni vinagre, si acaso una pizca de sal. Y el pan siempre dice la verdad.

En Barbate, a veces, África se puede tocar con la punta de los dedos y el Atlántico se llena desde los acantilados de la Breña, llena de piñones que se bajan de los pinos soñando con cruzar el estrecho. Mi pueblo huele a mar, a sal y a verde y todo el que llega desde lejos nos cuenta una historia, nos regala su tiempo y las terneras bajan del Retín a darse un chapuzón antes de almorzar.

En mi pueblo, las noticias se cuentan en las casapuertas, el mercado es una fiesta adornada con aletas, escamas y sangre roja, muy roja, y la gente sonríe, aunque no tenga motivos. Pasan muchas cosas bonitas cada día en mi pueblo.

Créanme, yo que he nacido, crecido, vivo y moriré en Barbate, les puedo contar bajito este secreto, en Barbate pasan cosas, muchas cosas que casi sin darse cuenta les harán muy felices. Por favor no lo cuenten, será nuestro secreto, hay muy pocas personas que saben lo que de verdad pasa cada día en Barbate. Pero en Barbate pasan cosas.