Cádiz corta el grifo: las duchas de las playas no tendrán agua

El alcalde de Cádiz, Bruno García (PP), ha anunciado el cierre de las duchas existentes en las playas de la localidad, que dejarán de estar operativas para su uso, a excepción de las que se encuentren en los módulos para personas con movilidad reducida, y mantendrá disponibles con agua los lavapiés. Así, lo ha contado en una rueda de prensa celebrada este viernes 11 de agosto tras la reunión semanal de la Junta de Gobierno Local, donde se han acordado y aprobado estas normas, con las que se une a otros municipios costeros de las provincias de Cádiz y Málaga que ya han implementado estas medidas.

La norma, que entrará en vigor desde el lunes 14 de agosto, forma parte de una fase a corto plazo dentro de un plan municipal que prevé otras acciones como campañas de sensibilización a la ciudadanía sobre el buen uso del agua en medios locales y a través de la megafonía de las playas. Para facilitar esta concienciación, también se colocarán carteles informativos en las zonas de duchas en las que se avisarán de que estos elementos estarán fuera de servicio para "ahorrar agua". Mientras que en los lavapiés también habrá cartelería en la que se indique que su uso es "sólo para pies" y que "no se malgaste el agua".

El gasto de agua de las duchas de la playa supone "un 0,6%", según palabras del alcalde, una medida que "conciencia más que resuelve un problema" pero con la que se pretende dar visibilidad a la problemática en torno a la sequía y que la población "tome conciencia" de la situación actual, "que es difícil", ha apostillado, haciendo referencia al 19,86% en que se encuentran de media los embalses de la provincia de Cádiz. "Nuestra intención es que estas medidas sirvan para colaborar en la reducción del consumo de agua y en la concienciación. Esto es un problema de todos que tenemos que resolver entre todos y conseguir que haya un ahorro en el consumo del agua", ha añadido.

Según sus palabras, estos cortes de agua en las duchas de las playas "no tienen sentido" si no van acompañados de una sensibilización y de una concienciación. Por eso, ha hecho un llamamiento "en la medida de lo posible a todos los gaditanos" para que hagan "un uso responsable del consumo del agua". García ha detallado además, que otras de las decisiones adoptadas por el Gobierno local es la realización de un estudio, por parte de las delegaciones de Medio Ambiente y Agua de Cádiz, para que los pozos de agua subterránea de la ciudad puedan usarse para el baldeo y la limpieza de las calles, una medida a largo plazo

"Como saben, el baldeo actual de la ciudad de Cádiz, casi el 90%, se hace con agua potable. Y esto es lo que en el fondo queremos cambiar", ha manifestado a los periodistas, añadiendo que "van a iniciar un camino en colaboración con San Fernando", con quienes comparten una empresa común para la depuración del agua, y siguiendo la misma línea de lo manifestado por la alcaldesa de San Fernando, la socialista Patricia Cavada, quien ha dicho que el baldeo debe hacerse con agua no potable. "Nosotros estamos absolutamente de acuerdo", ha aseverado. Sobre esta medida a largo plazo, el alcalde ha aseverado que es "la que tiene que cambiar" y que, aunque quiere que la ciudad de Cádiz esté limpia, "queremos que sea con agua que no se agota".

La capital se une así a otros municipios de la provincia gaditana que ya retiraron el suministro de agua en las duchas de sus playas como San Roque, Vejer, Chipiona y La Línea, antes de que empezara el verano. En este sentido, Los Barrios también ha cerrado las duchas y lavado de pies existentes en la playa de Palmones por "un uso indebido". En el resto del litoral gaditano se han señalado recomendaciones de un uso responsable del agua. En concreto, el Ayuntamiento de Tarifa ha limitado el empleo de las duchas repartidas por el litoral tarifeño con un horario específico. De tal forma que este servicio estará abierto a diario desde las 12,00 horas a las 21,00 horas con la idea de favorecer el consumo responsable.

Al hilo de lo anterior, en El Puerto de Santa María se han vuelto a instalar este verano duchas inteligentes, alimentadas por una placa solar, que permite a los técnicos del servicio de playas activarlas a distancia y monitorizar su uso mediante una aplicación móvil. Además, estos técnicos recibirán a través de dicha aplicación los datos de consumo, conteo de usuarios, horas de mayor demanda o aviso de avería a tiempo real.

Por otro lado, Málaga también se ha unido a estas medidas, ya que desde el pasado 8 de agosto, la capital malagueña ha cortado el agua de las duchas de sus playas pero manteniendo el servicio de lavapiés, reduciendo el agua para el riego e implantando el cierre del parque acuático del Pacífico. En este sentido, el decreto de la Junta de Andalucía ha obligado a muchas localidades, sobre todo de las comarcas del Guadalhorce y Axarquía, a reducir o prohibir el uso de agua potable para baldeo de calles, riego de parques y jardines o campos de golf, llenado y rellenado de piscinas privadas, entre otros.

Asimismo, los municipios malagueños del Rincón de la Victoria, Algarrobo, Vélez-Málaga, Mijas o Torrox también han cortado el servicio de duchas en las playas, mientras que Torremolinos lo ha reducido al 50% y Benalmádena ha retirado el muelle de los pulsadores como medida de ahorro.

En este contexto, hay municipios de la provincia malagueña que han ido mucho más allá y han decidido establecer cortes de suministro de agua a la población, especialmente, durante la noche, en sus núcleos urbanos y zonas diseminadas. Este es el caso de al menos diez pueblos en la provincia como: Almáchar, Benamargosa, Casabermeja, Colmenar, El Borge, Iznate, Moclinejo, Periana, Sedella y Vélez-Málaga. La mayoría de estos municipios se abastecen en gran medida del embalse de La Viñuela, que se encuentra en mínimos históricos al estar por debajo del 9% de su capacidad. Además, cabe destacar la situación que se vive en Casabermeja, donde el suministro de agua se corta en el pueblo desde las 14,00 horas hasta las 8,00 horas del día siguiente, mientras que en las zonas rurales, solo hay agua unas seis horas a la semana.

Por el lado contrario, en el resto de provincias costeras andaluzas, tales como Huelva, Granada y Almería no han tomado ningún tipo de medida con respecto a restricciones de consumo de agua en las duchas de sus playas.