Política

Elecciones europeas en mitad de la legislatura: la mejor encuesta

Moreno y Espadas se volcarán en la campaña para pulsar la situación andaluza

El presidente del PP andaluz y de la Junta, Juanma Moreno
El presidente del PP andaluz y de la Junta, Juanma MorenoLa Razón

Ni Juanma Moreno ni Juan Espadas se presentan a las elecciones europeas del próximo 9 de junio, pero ambos extraerán conclusiones autonómicas de los resultados electorales porque, a diferencia de otras citas con las urnas de carácter nacional o europeo, ambos están muy comprometidos con el líder nacional de sus respectivos partidos.

En el caso del presidente de la Junta de Andalucía, su apuesta por Alberto Núñez Feijóo es absoluta. En 2019, la situación era distinta, el liderazgo de Pablo Casado estaba en entredicho y las relaciones con el partido a nivel nacional no eran las mejores. De hecho, pese a que el PP ya gobernaba en Andalucía merced al pacto con Ciudadanos y el apoyo parlamentario de Vox, el PSOE arrasó en la cita electoral y obtuvo prácticamente el doble de votos que el PP en la región. Los socialistas contaron con 1.546.535 sufragios y el 40,54% de los votos y los populares se quedaron en 848.485 apoyos y el 22,24% del total. Ciudadanos, que venía de obtener más apoyos que el PP de Casado en las generales de ese año, se quedó en 496.089 votos.

Para Juan Espadas también es una cita importante porque su liderazgo en Andalucía está cuestionado y solo se mantiene por la voluntad de Pedro Sánchez. El secretario general del PSOE-A ha asumido el papel de portavoz de las políticas del presidente del Gobierno en el Senado y confía en que las elecciones europeas sirvan para frenar la caída electoral del PSOE en todas las elecciones en la comunidad desde que sucedió a Susana Díaz al frente de los socialistas andaluces.

Las elecciones europeas coincidirán también con el ecuador de la actual legislatura en Andalucía, ya que las autonómicas se celebraron el 19 de junio de 2022. Por tanto, los resultados servirán también para conocer de primera mano la fortaleza actual de los partidos políticos en Andalucía dos años después de la actual mayoría absoluta del PP. La última encuesta del Centro de Estudios Andaluces mantiene que Moreno no sufre desgaste y que el PP-A ganaría unos nuevos comicios autonómicos con el 46,1% de los votos y una ventaja de 24,9 puntos sobre el PSOE-A, que se quedaría en el 21,2% de los sufragios.

Las elecciones europeas no son extrapolables a unas autonómicas donde pese más la figura del candidato. Además, a diferencia de otros procesos electorales, la circunscripción es única en España e integra a todo el territorio nacional, pero sí servirá para evaluar tendencias.

En 2019, el PSOE, con Josep Borrell de candidato y Pedro Sánchez en uno de sus mejores momentos, ganó ampliamente los comicios. En 2014, fue el PP el que superó al PSOE por una diferencia de 3 puntos a nivel nacional aunque en Andalucía la victoria fue para los socialistas con más de 10 puntos de ventaja, diferencia similar a la que obtuvieron en 2009.

En este contexto, el PP andaluz espera que las elecciones europeas sirvan para mantener el «status quo» actual en la comunidad, con una diferencia amplia que sitúe a los populares andaluces como una referencia en el seno del partido a nivel nacional. Así, Juanma Moreno, que presidió ayer en Sevilla la reunión del Comité Electoral de su partido para la cita electoral del 9 de junio, aseguró que su formación «está preparado» para afrontar la campaña y se va a «volcar» para ganarlas en Andalucía y «reforzar» así la «voz» de sus ciudadanos en Bruselas.

Por su parte, los socialistas también eligieron Sevilla para iniciar la precampaña electoral. Ante la presencia de Juan Espadas, el acto estuvo protagonizado por la cabeza de lista del PSOE al Parlamento europeo, Teresa Ribera, y la vicesecretaria general del partido, María Jesús Montero. La estrategia socialista será similar a la que siguieron en las últimas elecciones generales: trazar una frontera entre el socialismo como ejemplo de «progreso»; y la ultraderecha y la derecha como «involución». Según Montero, «nos jugamos mucho» y hay que «parar esa ola reaccionaria que nos preocupa mucho a la gente de progreso de este país y del resto del mundo, que está recorriendo mucha parte del planeta».