La participación, factor electoral determinante pero no siempre definitivo en Andalucía

En las últimas elecciones celebradas en Andalucía, las del 19 de junio de 2022 en las que Juanma Moreno arrasó con la mayoría absoluta y el mejor resultado histórico de su formación, la participación fue del 56,13%, algo inferior a la de los comicios del 2 de diciembre de 2018 (56,56%) en los que ganó el PSOE pero la suma de PP, que igualó su peor resultado, y Cs, con Vox como apoyo externo en el Parlamento, dio la Presidencia a los populares. La participación es un factor determinante en la democracia, por definición, pero también arroja resultados dispares. La convulsa campaña de las municipales ha terminado con varios casos de presunta compra de votos, como en Mojácar (Almería) por parte de socialistas, y el levantamiento del secreto de sumario del caso del secuestro de una edil de Maracena, que ha salpicado incluso al número 3 de Juan Espadas. Se teme la desmovilización del electorado del PSOE-A.

El índice de participación en las once elecciones municipales que celebradas en Andalucía desde el inicio de la democracia (1979, 1983, 1987, 1991, 1995, 1999, 2003, 2007, 2011, 2015 y 2019) nunca ha alcanzado el 70% ni ha bajado del 60%, según datos oficiales del Ministerio del Interior consultados por Europa Press.

La participación en las municipales en Andalucía alcanzó el 61,96% en 1979; el 66,27% en 1983; el 66,72% en 1987; el 61,06% en 1991; el 68,81% en 1995; el 63,98% en 1999; el 65,57% en 2003; el 61,62% en 2007; el 65,84% en 2011; el 61,21% en 2015; y el 61,42% en 2019. En la última cita con las urnas de ámbito local, la participación se elevó en Andalucía mientras que se registraron 34.033 votos en blanco –un 0,88% de los sufragios emitidos– y 44.222 votos nulos –un 1,13%–.

Según el estudio del Centro de Estudios Andaluces (Centra) titulado «Cambios en el comportamiento electoral en Andalucía», sobre la base de las tres citas electorales de 2018-2019 –locales, generales y autonómicas–, «en el lapso relativamente breve de medio año» se observa «cómo se reequilibraba el sistema de partidos tras la primera conmoción de diciembre de 2018» y la irrupción de Vox en las autonómicas con doce diputados.

La participación en diciembre de 2018 en las autonómicas fue «particularmente baja» con un 56,6% de participación y la abstención de un 43,3%, más de 2,8 millones de votantes. El PSOE atribuyó a este factor –con la pérdida de 400.000 votos– su insuficiente victoria. Cuatro años después, con una pandemia por medio, los andaluces refrendaron la confianza en el presidente popular Juanma Moreno otorgándole una histórica mayoría absoluta. Con una participación aún menor, el PP obtuvo más votos, en total1.589 272 pasando, esto es 838.494 más. El PSOE, por su parte, perdió otros 122.564 y se quedó en 888.325.

En las generales de abril de 2019 la participación fue de un 73,3% del electorado andaluz y en las locales de mayo fue de un 61,4%, que fueron unas cifras más próximas a la media en cada uno de los niveles, señala el Centra. La participación, según el Análisis del ciclo electoral 2018-2019 (autonómicas, generales y municipales) de Jaime Andreu y Alejandro Romero Reche, mantiene una serie de patrones en la presente década respecto a la anterior. Uno de ellos es que suele ser ligeramente inferior al conjunto de España en las municipales y generales.

De hecho, en las municipales, el máximo y el mínimo para España y Andalucía coinciden en la misma convocatoria. El máximo se produjo en 2011, con un 66,23% en España y un 65,84% en Andalucía, mientras que el mínimo tiene lugar en 2015, con un 64,93% en España y un 61,21% en Andalucía.

Otra regularidad se refiere «a los distintos patrones de participación de las provincias andaluzas». Las provincias más participativas siguen siendo las de interior, especialmente Córdoba y Jaén, «que en las elecciones de primer orden (las generales) alcanzan porcentajes nunca inferiores al 70% y en las de máxima participación llegan hasta el 76 %», mientras que, «de entre las costeras, destacan Huelva y Cádiz por registrar una participación comparativamente baja: ninguna alcanza el 70% en las generales, incluso en las convocatorias en que más se movilizó el electorado en la comunidad». No obstante, «en las elecciones municipales la participación en la provincia de Huelva es comparativamente alta».

El examen de las distintas citas electorales de 2019 sugiere «que el PSOE ha mantenido en torno a una tercera parte del voto». En las autonómicas de 2022 llegó la gran debacle electoral.

En cuanto a la orientación del voto en las elecciones municipales, el PSOE ha pasado de 3.856 concejales, con el 32,5% de los votos en 2011 a 4.081 en 2015 (34,32%) y 4.209 (36,91%) en 2019. El PP, por su parte, obtuvo 3.148 concejales en 2011 (39,36%), 2.681 en 2015 (30,19%) y 2.486 en 2019 (26,79%). Las municipales de 2023 se presentan como una segunda vuelta de las autonómicas de 2022 y el partido de ida de las generales.