Sin opciones

Desahucio muy delicado en Zaragoza: nuevos plazos para Manuel, su mujer y sus cuatro hijos menores

“Los niños estaban durmiendo. Nos ha pillado en la cama. No sabíamos nada”, ha explicado en un diario digital

 Desahucio
DesahucioFlickr

Cruda la historia de Manuel, su mujer y sus cuatro hijos menores, aunque por el momento siguen en casa. Y es que su desahucio, previsto para ayer, ha sido aplazado hasta el 29 de septiembre. Viven, por ahora, en la céntrica zona del Gancho de Zaragoza.

Según cuentan en ‘El Español’, la situación de la vulnerable familia es especialmente preocupante. Manuel ha explicado que no tenían notificación alguna de la ejecución de su vivienda, pues se han enterado cuando ha llegado la unidad judicial y policial correspondiente. “Los niños estaban durmiendo. Nos ha pillado en la cama. No sabíamos nada”, ha dicho minutos después de celebrar el aplazamiento.

¿Cuál es la verdadera intención detrás de este intento de ejecución?

El padre de familia explica también que le frustra que el arrendador del piso no le hubiese puesto en preaviso de la vía judicial que ha decidido, pero además cuestiona la verdadera intención detrás de este intento de ejecución. “Le conozco desde hace 30 años. ¿Por qué no ha venido a avisarme como cuando me dice que hay que pagar algo? Esto es porque quiere vender el piso. Le metíamos dinero en el banco y nos lo rechazaba”, ha informado en el diario mencionado.

Con cuatro vástagos, de 15, 14, 8 y solo 3 años, estos dos residentes en Zaragoza se han quedado sin empleo tras varios meses haciendo trabajos de recogida de fruta. Así que ahora, a esta grave situación de vulnerabilidad económica, se les añade la preocupación por encontrar una nueva vivienda antes del 29 de septiembre-nueva fecha para el desahucio- que puedan pagar. “Intentaré por todos los medios buscar otra casa para que no pase esto y mis hijos no tengan que pasar por estas cosas”, indica.

Lo que ocurrió con la comitiva judicial que les iba a sacar

Así sucedió todo ayer. Agentes policiales y antidisturbios han llegado sobre las 10 de la mañana al popular barrio de El Gancho. No pocos representantes del Sindicato de Inquilinas estaban por la zona para paralizar por otro desahucio y, en cuanto lo han conseguido, rápidamente han ido a la calle de la vivienda de Manuel, su mujer y sus hijos para intentar llevar a cabo el mismo cometido.

Tras varios minutos de presión ejercida contra los policías allí presentes, conformando incluso dos cordones para que nadie se aproximara al inmueble, la comitiva judicial permitía que todos siguieran allí viviendo, al menos hasta el 29 de septiembre.

Además del grupo del Sindicato de Inquilinas, vecinos y trabajadores de la céntrica zona han celebrado en la misma calle de la vivienda de Manuel la buena noticia por la que, todavía, la familia con hijos tan pequeños no se queda de un momento para otro sin hogar.

Teresa, portavoz del Sindicato de Inquilinas, ha explicado en ‘El Español’ que parar dos desahucios en una misma mañana es sinónimo de un “flagrante éxito”. "Hemos ganado", gritaba mientras los agentes de policía abandonaban la zona.