En las Islas Canarias se esconde uno de los pueblos más hermosos de España, un lugar que ha cautivado a viajeros y expertos por igual. La revista National Geographic, en su sección de Viajes, lo describe como un enclave que se encuentra "en medio de una tempestad petrificada". Esta poética imagen no es casualidad, ya que el escritor español Miguel de Unamuno fue quien, en su momento, bautizó a este fascinante rincón como el escenario donde la naturaleza parece haberse detenido en el tiempo, creando una atmósfera única y sobrecogedora.

El Archipiélago Canario ha atraído en numerosas ocasiones la atención por la singularidad de sus paisajes. Desde sus playas de aguas cristalinas, que evocan el paraíso, hasta sus imponentes y únicos paisajes montañosos, Canarias se presenta como un destino que deslumbra por su diversidad natural. Son incontables los aspectos que dotan a las Islas de un encanto especial, convirtiéndolo en un lugar incomparable para quienes buscan belleza en cada rincón.

¿Cuál es el pueblo canario considerado uno de los más bonitos?

Tejeda, dividido en varios barrios, atrae casi toda la atención hacia su pintoresco casco antiguo. Las casas blancas, con sus balcones de madera y artesonados mudéjares, se alinean a lo largo de dos callejones empedrados, creando una estampa de gran belleza. Los rótulos de los comercios, en perfecta armonía con el entorno, contribuyen a esta atmósfera encantadora, donde el contraste entre las edificaciones y el verde de la naturaleza y las rocas circundantes da la sensación de estar ante una exquisita maqueta viviente. A lo largo de la calzada, una baranda se asoma al abismo, revelando más casas en la distancia, mientras el camino asciende hacia la cumbre, donde el majestuoso Roque Bentayga domina el paisaje, marcando el inicio de los impresionantes atardeceres.

Gastronomía de Tejeda

Las papas, los quesos, los vinos y las mieles, junto con la renombrada almendra, son los productos estrella de Tejeda. Estos manjares, que representan la esencia de la gastronomía local, se ofrecen en los numerosos establecimientos distribuidos principalmente por su calle principal, convirtiéndose en una parada obligada para los visitantes que se adentran en el corazón de la isla. Cada uno de estos productos, fiel reflejo de la tradición y el sabor canario, atrae a quienes buscan una experiencia auténtica y deliciosa.

Platos tradicionales como el caldo de papas, el potaje de berros o jaramagos y la carne de cabra siguen siendo servidos con esmero en los establecimientos más tradicionales de Tejeda, que conviven con una oferta gastronómica más moderna, que incluye pizzerías, cocina contemporánea, opciones veganas, menús del día y braserías. Junto a bodegas prestigiosas como Bentayga o Peña Rajada, que ofrecen vinos de altura elaborados a partir de varietales canarios premiados, también se encuentran tiendas tradicionales que preservan el sabor auténtico de la isla. Un ejemplo destacado es el despacho de pan centenario de Abraham Romero, donde cada elaboración es artesanal y se especializan en productos como el pan de papas, una delicia local que sigue cautivando a quienes buscan lo genuino.

Cómo llegar a Tejeda

Para llegar a Tejeda desde Las Palmas de Gran Canaria, puedes tomar la autovía GC-1 y luego la GC-15 en dirección a Valleseco. Desde allí, continuarás por la carretera GC-600, que te llevará directamente a Tejeda, atravesando un paisaje montañoso con vistas impresionantes. El trayecto en coche dura aproximadamente una hora, dependiendo del tráfico.

Si prefieres usar el transporte público, puedes tomar un autobús desde la estación de San Telmo en la capital, con la línea 350, que conecta Las Palmas con Tejeda. El viaje en autobús dura alrededor de 1 hora y 45 minutos.

Si vienes desde el Aeropuerto de Gran Canaria, la opción más rápida es tomar la autovía GC-1 en dirección a Las Palmas y luego seguir las indicaciones hacia Valleseco por la GC-15, para finalmente tomar la GC-600 hasta llegar a Tejeda. El trayecto en coche desde el aeropuerto es de unos 40-45 minutos.