¿Quién dice que para disfrutar de aguas turquesas y arena dorada hay que cruzar el Atlántico hasta Punta Cana? A tan solo unos kilómetros de la capital tinerfeña, Santa Cruz de Tenerife, se encuentra una joya costera que, cada vez más, atrae tanto a turistas como a locales de todas las partes de la isla: la Playa de Las Teresitas.

Este arenal artificial, situado en el pueblo pesquero de San Andrés, se ha establecido como uno de los destinos más singulares de Tenerife. A diferencia de la mayoría de playas de origen volcánico en las Islas, Las Teresitas presume de una arena dorada que fue importada directamente del desierto del Sahara en los años 70, un ambicioso proyecto que transformó una modesta costa en un rincón digno de postal.

Con una extensión cercana a 1,5 kilómetros y protegida por un extenso dique, Las Teresitas ofrece aguas tranquilas y poco profundas, ideales para familias con niños o para quienes buscan un baño relajado. Esta configuración convierte la playa en el lugar perfecto para el descanso.

Qué hacer en Las Teresitas

Las Teresitas no es solo un lugar para extender la toalla y tomar el sol. Su entorno está preparado para ofrecer una experiencia completa. Dispone de amplias zonas de aparcamiento gratuito, duchas, puestos de socorrismo y una línea de chiringuitos y restaurantes -que se ponen bien ricos en verano- donde se puede saborear lo mejor de la cocina canaria. Las papas arrugadas con mojo, el pescado fresco o el pulpo a la gallega son solo algunas de las delicias que se pueden probar.

Para los más activos, la playa también es un pequeño paraíso deportivo: kayak, pádel surf, esnórquel o incluso yoga sobre la arena son solo algunas de las actividades que pueden disfrutarse en un entorno inmejorable.

Muy cerca de allí, el pueblo de San Andrés añade un plus de encanto. Con su aire marinero, sus terrazas al borde del mar y su ambiente tranquilo, invita a pasear sin prisas y disfrutar de un almuerzo con sabor a salitre.

Naturaleza y paisajes únicos a un solo paso

Y si aún queda tiempo para explorar, Tenerife ofrece contrastes naturales sorprendentes. Desde Las Teresitas se puede acceder fácilmente al Parque Rural de Anaga, una Reserva de la Biosfera con senderos entre bosques milenarios de laurisilva. También merece la pena una excursión al imponente Parque Nacional del Teide, hogar del volcán más alto de España.

Un destino para cualquier época del año

Las Teresitas puede visitarse durante todo el año, aunque en estos meses la zona se pone cruda por la cantidad de personas que recibe, especialmente los fines de semana. Sin embargo, quienes prefieran una experiencia más tranquila pueden optar por acudir entre semana.