Fernández Carriedo asegura que las Cuentas de la Junta tienen en cuenta a familias y colectivos más castigados

El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, defendió que el proyecto de ley de Presupuestos de Castilla y León para 2021 que debaten desde este martes las Cortes regionales se dirige a atajar “los problemas que atraviesan muchas familias” y apoya a los colectivos más castigados por la crisis sanitaria provocada por la Covid-19.

En este sentido, recordó que, con algo más de 12.291 millones de euros, el 13,19 por ciento más que en 2018 cuando se aprobaron las últimas cuentas, el presupuesto que aspira a gestionar el próximo año es “realista”, “prudente” y “responsable”, tanto en el apartado de ingresos como en los gastos.

Además, Fernández Carriedo explicó que la Comunidad espera ampliar estos presupuestos con la aportación que finalmente llegue procedente de las ayudas europeas comprometidas a través del programa “Next Generation” -Próxima Generación-, cuyo reparto a través de proyectos competitivos aún está pendiente, aunque Castilla y León ha planteado más de 439 iniciativas por importe de 6.000 millones.

Por este motivo, pidió a los Grupos de la oposición a que, “por coherencia”, los apoyen, como hicieron con el Pacto de la Recuperación, y cuyas medidas están en los Presupuestos del próximo año. “En efecto, lo coherente cuando se firma un pacto es asegurar las dotaciones presupuestarias para su cumplimiento”, añadió el responsable regional de la cartera de Economía y Hacienda.

Para que este respaldo sea posible volvió a ofrecer el diálogo y la colaboración que caracteriza al Gobierno, para incluso poder mejorarlos, a través del debate parlamentario.

En cuanto al proyecto, Fernández Carriedo defendió que las Cuentas 2021 están pensadas para dar respuesta a los problemas que atraviesan “muchas familias” en este escenario derivado del coronavirus. “A ellas va dirigido nuestro esfuerzo”, aseguró, al tiempo que confió en que en 2022 se recupere la situación de 2019 y se marcó el triple objetivo de acabar el próximo año con menos recesión, paro y deuda.

En relación a los ingresos, el consejero destacó que los presupuestos se caracterizan también por ser “responsables y prudentes”, porque mantienen una gestión del endeudamiento razonable y no incorporan todavía los recursos procedentes de los Fondos de Nueva Generación de la Unión Europea, ya que señaló hasta ahora el Gobierno no ha comunicado qué cantidad nos corresponde a cada comunidad, ni su distribución temporal ni a qué tipo de proyectos podrá destinarse.

También aludió a la reforma del sistema de financiación autonómica, que aseguró debería basarse en la cohesión territorial y la igualdad de derechos entre todos los españoles. Indicó que se ha demostrado “claramente insuficiente y contrario a los intereses” de Castilla y León, pues indicó que con el anterior a 2009, la Comunidad habría recibido en los diez últimos ejercicios liquidados una media anual de 813 millones adicionales.

Sin subir impuestos

Además, resaltó que no se suben los impuestos, se congelan las tasas y se incorporan “importantes novedades” impositivas, que beneficiarán al medio rural. En el Impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados se establece un nuevo tipo reducido que rebaja en un 25 por ciento el gravamen de las adquisiciones de inmuebles en zonas rurales que se destinen a sede empresarial.

También se añade una bonificación del 95 por ciento en la tasa de servicios veterinarios, para paliar las consecuencias de la pandemia en el sector ganadero. En su conjunto, el total de beneficios fiscales de carácter tributario asciende a 366,37 millones de euros, que se estima beneficiarán a 155.478 contribuyentes.

Sociales

En relación a los gastos, el consejero destacó que son unas cuentas “eminentemente sociales”, que garantizan la prestación de los servicios sanitarios, de la educación y del sistema de servicios sociales. Entre las tres consejerías -dijo- van a disponer el 80 por ciento del gasto no financiero e indicó que las operaciones corrientes absorben el 90,08 por ciento de los gastos de funcionamiento de la Comunidad.

Fernández Carriedo subrayó el aumento de las partidas para personal para poder contar con un mayor número de profesionales para la prestación de servicios esenciales y el aumento de los gastos y las transferencias corrientes para garantizar el funcionamiento de los sistemas de salud y de servicios sociales, así como la oferta de enseñanzas.

Asimismo, indicó que los gastos financieros se han reducido en 40 millones con respecto al presupuesto anterior, al reducirse las obligaciones por gastos e intereses derivados de las emisiones de deuda pública, y de los préstamos a largo plazo.

El consejero puso énfasis en el carácter inversor de las cuentas, en las que las operaciones de capital concentran el 12,98 por ciento del presupuesto de gastos, con un aumento del 17,85 por ciento respecto al 2018, superior en cuatro puntos a los capítulos relativos a los gastos de funcionamiento.

Así, citó los incentivos a las empresas con 123 millones, el apoyo a las actividades de Ciencia y Tecnología con una cuantía de 296 millones y el compromiso con el medio rural, los acuerdos del Diálogo Social y las entidades locales, que recordó se beneficiarán de un aumento del 20,17 por ciento de las cantidades destinadas al Plan de Cooperación Local.

Por su parte, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, aplaudió que los Presupuestos de Castilla y León para 2021 hayan superado en las Cortes el primer trámite, y recordó que se trata de las cuentas “más elevadas de la historia” y que “permitirán reforzar el escudo social mientras vencemos al virus; y diseñar un futuro de prosperidad para esta tierra”. Igualmente, sostuvo que el acuerdo político “aún es posible”.

Y es que, en este primer paso los socios de PP y Cs frenaron hoy las enmiendas a la totalidad a las cuentas de la Comunidad para 2021 con el argumento de que son “realistas y sociales” para luchar contra la pandemia y mitigar su impacto y afear a la oposición que no las apoye cuando contienen las medidas del pacto para la recuperación, al que invitaron a volver. El PSOE afirmó que “no dan futuro”, Podemos criticó que no se refuerzan los servicios públicos, UPL acudió a la falta de compromiso con León y Vox censuró el excesivo gasto superfluo en “chiringuitos”