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Las eólicas rompen la cortesía parlamentaria

PP y Cs critican que el PSOE aproveche la baja de Delgado por covid para hacerse con la presidencia de esta comisión de investigación: “No pueden caer más bajo”, dice el popular Salvador Cruz

La vicepresidenta de las Cortes , Ana Sánchez, antes de ser elegida presidenta de la comisión de investigación de las eólicas
La vicepresidenta de las Cortes , Ana Sánchez, antes de ser elegida presidenta de la comisión de investigación de las eólicasDos SantosIcal

La comisión de investigación sobre los parques eólicos abierta en las Cortes en la pasada legislatura da un nuevo tras hacerse con la presidencia de la misma la socialista Ana Sánchez, en detrimento de José Ignacio Delgado, de Ciudadanos, que tuvo que ser relevado después de contraer la covid y presentar su renuncia el 11 de marzo sin conocer lo que iba a suceder con la moción de censura y la marcha de María Montero del Grupo de Ciudadanos.

Este hecho, sumado al nuevo escenario en el Parlamento autonómico tras la pérdida de la mayoría de PP y Cs, ha provocado que en la nueva votación para elegir al presidente de esta comisión, se haya producido un empate entre la candidatura de Sánchez y la de Delgado a 40 votos entre los partidos del Gobierno y el Grupo Mixto que según el reglamento de las Cortes. Una igualdad desecha en favor de la socialista en virtud del artículo 34.1 del reglamento que, ante este tipo de casos, da mayoría al partido que hubiera tenido más votos en las elecciones autonómicas, en este caso el PSOE de Tudanca, que logró 35 representantes en la Cámara por los 29 de PP y 12 de Ciudadanos, que ahora tiene uno menos tras la marcha de María Montero.

Desde PP y Ciudadanos han acusado a los socialistas de «romper la cortesía parlamentaria», primero por pactar con una tránsfuga y después por aprovechar la enfermedad por covid de un procurador para hacerse con la presidencia de esta comisión. «En el PSOE ya no pueden caer más bajo», decía el popular Salvador Cruz, mientras que José Ignacio delgado, resignado, decía que pese a lo ocurrido su voluntad y la de su partido es que sigan los trabajos y se descubra la verdad «caiga quien caiga».

La nueva presidenta, Ana Sánchez, negaba la mayor al asegurar que la presidencia de esta comisión de investigación es fruto de la renuncia de José Ignacio Delgado, y recordar que el procurador de Cs ha mantenido en estos dos meses íntegros sus derechos como tal y que por ello pudo votar de forma telemática en la moción de censura fallida. “Para el PSOE -decía- esta nueva situación “es un acto de “justicia, decencia y verdad”.

También avanzaba su compromiso de trabajar con “transparencia” y agilidad con el objetivo de llegar “hasta el final” y depurar responsabilidades políticas y morales, más allá de las que se deriven de los tribunales, y recordaba el «bloqueo» al que han sometido PP y Cs a esta comisión.

“Ahora empieza la verdadera investigación sobre la corrupción del PP» apuntaba Sánchez, quien, para abrir boca, anunciaba también un nuevo calendario de comparecencias, que podría afectar de nuevo al presidente Fernández Mañueco pero también al consejero de Economía y Hacienda, carlos Fernández Carriedo.

Finalmente, desde Podemos también se han felicitado de este nuevo cambio y la procuradora Laura Domínguez rechazaba que esta comisión pueda estar acabada yaseguraba que ahora se podrá conocer la verdad de esta trama. Por ello, comprometía su empeño para que salga “algo factible”, después de tanto tiempo”, además de apoyar también que se amplíe el calendario de comparecientes.