Economía

Vuelve a bajar el paro en Castilla y León

Un total de 8.286 personas encontraron un puesto de trabajo en el mes de mayo

La situación laboral del sector servicios recupera poco a poco la normalidad
La situación laboral del sector servicios recupera poco a poco la normalidadPhotogenic/Claudia AlbaEuropa Press

Poco a poco. Así va la senda del crecimiento económico en Castilla y León, como demuestra este nuevo descenso de las cifras del paro del mes de mayo. El desempleo bajó en la Comunidad en 8.286 personas, hasta los 160.434, un 4,91 por ciento menos que en abril, con lo que encadenó tres meses a la baja, y además sumó 7.536 afiliados a la Seguridad Social, el 0,83 de incremento, que dejan en 910.989 los cotizantes en la Región.

En el conjunto nacional, según los datos publicados por los ministerios de Trabajo y de Inclusión, el número de desempleados inscritos en los registros públicos de empleo (SEPE) disminuyó en 129.378 personas en mayo, el -3,31 por ciento de caída, hasta dejar la cifra de parados en 3.781.250, marcando así el mayor recorte de la serie histórica que comenzó en 1996; y la Seguridad Social ganó 211.923 afiliados, hasta los 19.267.221.

Respecto al mismo mes del 2020, Castilla y León sumó 26.128 afiliados a la Seguridad Social, el 2,95 por ciento de incremento, y 9.858 parados menos que hace un año, con un recorte del 5,79 por ciento. El paro cayó en todas las Comunidades Autónomas en mayo respecto al mes anterior, con un descenso del 8,2 en Baleares y el 7,6 en Navarra, con el -1,8 de Canarias en el otro extremo, y Castilla y León anotó la sexta mayor caída en términos relativos, con ese -4,9 por ciento, y la quinta en dato absoluto con esos más de 8.200 parados menos.

El paro bajó en todas los sectores en mayo en la Comunidad, especialmente en el de servicios, con 5.656 parados menos, tras levantarse parte de las restricciones por la Covid-19 al decaer el estado de alarma; con 1.033 menos en agricultura, 739 en industria, 451 en la construcción y 407 menos en el colectivo de sin empleo anterior.

Todas las provincias registraron descensos en el desempleo en mayo en la Comunidad, con caídas entre el 6,21 por ciento de Burgos y el 5,97 de Zamora, y el -3,46 de León en el otro extremo. En mayo se formalizaron 64.175 contratos en Castilla y León, 10.990 más que en abril, con un repunte del 20,66 por ciento (13,89 por ciento de media nacional), y 29.919 más que hace un año, el 87,34 por ciento de incremento (81,67). Y con datos del mes anterior, en la Región 86.033 parados recibieron prestaciones por desempleo, con 40.205 prestaciones contributivas y 39.805 subsidios, y 6.023 rentas activas de inserción.

Por sectores, de los 160.434 desempleados de la Comunidad, 110.102 corresponden al sector servicios, 16.801 no han llegado a trabajar nunca; 13.958 a la industria, 9.328 a la agricultura y 9.845 a la construcción.

Por otra parte, en mayo se firmaron en la Comunidad un total de 64.175 contratos en la Comunidad, lo que significa una subida del 20,66 por ciento con respecto al abril (+10.990). A nivel nacional, los contratos suscritos fueron 1.545.308, lo que supone una subida del 13,89 por ciento (+188.463). En variación interanual el incremento fue mucho mayor por el efecto de la pandemia el año pasado y el número de contratos suscritos en Castilla y León subió un 87,34 por ciento (+29.919), alza que en el conjunto nacional fue del 81,67 por ciento (694.691).

Del total de los 64.175 contratos suscritos en Castilla y León el pasado mes, 58.459 fueron temporales, el 91,05 por ciento y 5.716 indefinidos.

Por último, en cuanto a los beneficiarios de las prestaciones por desempleo en mayo en Castilla y León, ascendieron a 86.033 personas, de las que 40.205 tienen una prestación contributiva, 39.805 un subsidios y 6.023 se benefician de la renta activa de inserción.

Afiliación a la Seguridad Social

El número de afiliados a la Seguridad Social en Castilla y León aumentó en 7.536 personas en el mes de mayo con respecto a abril, lo que supuso un repunte del 0,83 por ciento y sitúa la cifra total de afiliados en la Comunidad en 910.989, según los datos ofrecidos por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

En el conjunto de España el número medio de afiliados a la Seguridad Social se situó en 19,26 millones de personas, lo que representó un aumento de 211.923 cotizantes respecto a la media de abril, con un incremento del 1,11 por ciento.

En la evolución anual, los cotizantes a la Seguridad Social también crecieron en Castilla y León. En concreto, en un 2,95 por ciento, con 26.128 afiliados más. El ritmo fue mayor que en el conjunto del país, donde el dato creció un 3,83 por ciento, al registrar 711.092 más.

En la Comunidad, el 79 por ciento de los afiliados se correspondió con el régimen general, con 720.190 personas, mientras que el 20,9 por ciento restante fueron autónomos, con 190.745. El régimen especial de Minería del Carbón se cerró con 54 afiliados. Por lo que respecta al general, incluye el Sistema Especial Agrario, con 13.464 efectivos, y el Sistema Especial Hogar, con 16.682.

Por provincias, y en cuanto a la variación mensual, en mayo todas ganaron afiliados. El mayor repunte en términos relativos, lo experimentó la provincia de Segovia, con una subida del 1,15 por ciento, y 694 afiliados nuevos, hasta los 61.187. Les siguieron Zamora, con un 1,12 por ciento más y 636 afiliados, hasta los 57.294, y Soria, con un 1,10 por ciento más y 431, hasta los 39.436 cotizantes. Mientras, en términos absolutos, las provincias con mayores repuntes fueron Valladolid, con 2.083 afiliados nuevos, un 0,98 por ciento más, hasta los 215.445; seguida por Burgos, con 1.337 nuevos, hasta los 145.726, lo que supuso un avance del 0,93 por ciento.

Ávila registró un 0,94 por ciento de cotizantes nuevos, con 495 y hasta los 52.959; mientras que en León fue del 0,56 por ciento, con 876 más para un total de 157.630. El mismo porcentaje registró Salamanca, con 660 más, hasta los 118.854 afiliados. Por su parte Palencia sumó 325 afiliados, un 0,52 por ciento más, hasta los 62.457.

En lo que respecta a la variación interanual, todas aguantaron los efectos de la Covid-19, con los datos relativos más significativos en las provincias de Zamora (4,14 por ciento y 2.276 afiliados más), Soria (3,68 por ciento más y 1.399 afiliados), Segovia (3,30 por ciento más y 1.957), León (3,28 por ciento y 5.003 afiliados) y Salamanca (3,15 por ciento y 3.627). Por debajo del incremento del tres por ciento se situaron Ávila, con un 2,91 por ciento (1.496); Valladolid, con un 2,69 por ciento (5.644); Burgos, con un 2,64 por ciento (3.748), y Palencia, con un 1,59 por ciento y 979 afiliados nuevos.

Trabajadores en ERTE

Por otra parte, el número de trabajadores en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) siguió cayendo en mayo hasta cerrar el mes con 22.079 en Castilla y León, 2.334 menos que el mes anterior. Castilla y León llegó a tener 145.505 trabajadores en un ERTE en el mes de abril del 2020, que fue el pico máximo durante la pandemia de la Covid-19. En el conjunto nacional, los trabajadores en ERTE son 542.142 personas acogidas a uno, 95.439 menos que al final de abril y el nivel más bajo desde el inicio de la pandemia.

Reacciones

La Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León consideró que los datos del desempleo y afiliación a la Seguridad Social correspondientes a mayo reflejan el alivio de las restricciones a la actividad económica tras la reciente finalización del estado de alarma con motivo del covid-19.

Fuentes de la patronal destacaron que el paro en Castilla y León ha bajado el 4,91 por ciento respecto a abril (8.286 personas), frente al 3,31 por ciento de España, y que la afiliación a la Seguridad Social se incrementó en 7.536 personas (0,83 por ciento) respecto al mes de abril. En el análisis de los datos publicados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, la CEOE de Castilla y León ha apreciado “una tendencia positiva del mercado laboral, a pesar del deterioro que aún sufre, lo que obliga a mantener la prudencia, pues la evolución de la economía y el empleo se verá condicionada por la marcha de la pandemia”.

Por su parte, Comisiones Obreras (CC.OO) calificó de “esperanzadora” la caída del paro registrada en mayo en Castilla y León, mes en el que salieron del desempleo 8.286 personas en la Comunidad y en el que la afiliación a la Seguridad Social se incrementó en 7.536 cotizantes.

No obstante, el sindicato advirtió de la situación de los trabajadores que aún están protegidos por las prestaciones de los ERTE, más de 22.000 en Castilla y León, y de las personas autónomas con el cese de actividad, que en la Comunidad suman 21.841, “ya que no está escrito que todas ellas puedan salvar su puesto de trabajo al término de la pandemia”.

En un comunicado fuentes de CC.OO también indicaron que en el mercado laboral dependerá de la a evolución de la pandemia y recalca que el mantenimiento del empleo en aquellos sectores más afectados se hace cada vez más complicado.

En la misma línea, UGT achacó el descenso del paro del 4,91 por ciento registrado en la Comunidad a la “reapertura de actividades y el cese del estado de alarma” ante la Covid-19, pero ha reclamado una mayor calidad en la contratación. El secretario de Acción Sindical y Coordinador del Diálogo Social de UGTCyL, Raúl Santa Eufemia, reconoció el descenso del paro por la reapertura de actividades y del cese del estado de alarma, “unido a una mejora de las expectativas económicas a causa del buen ritmo de vacunación, lo que provocara, durante el periodo estival, otro impulso a la contratación”.

En este sentido incidió en que la UGT de Castilla y León exige que “en el sector servicios se dé un giro para conseguir una mayor calidad contractual que se refleje en jornadas, horarios y en salarios justos, entre otros aspectos”.