Economía

Empresarios y sindicatos apuestan por una reforma laboral acordada con el Diálogo Social

Así lo indican durante el primer foro organizado entre el Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León y la Asociación Española del Derecho del Trabajo y Seguridad Social (AEDTSS)

El presidente del CES, Enrique Cabero; la presidenta de la AEDTSS, María Emilia Casas Baamonde; la presidenta de la CEOE Valladolid, Ángela de Miguel, y los secretario autonómicos de UGT y CCOO, Faustino Temprano y Vicente Andrés, participan en el primer el primer Foro CESCYL-AEDTSS sobre "Reformas laborales y de la Seguridad Social para la recuperación económica y social"
El presidente del CES, Enrique Cabero; la presidenta de la AEDTSS, María Emilia Casas Baamonde; la presidenta de la CEOE Valladolid, Ángela de Miguel, y los secretario autonómicos de UGT y CCOO, Faustino Temprano y Vicente Andrés, participan en el primer el primer Foro CESCYL-AEDTSS sobre "Reformas laborales y de la Seguridad Social para la recuperación económica y social"Rubén Cacho/IcalAgencia ICAL

CEOE Castilla y León y los sindicatos UGT y Comisiones Obreras (CCOO) apostaron, en Valladolid, por una reforma laboral acordada en el seno del Diálogo Social para evitar lo que ocurrió con la anterior aprobada de forma unilateral por el Gobierno de Mariano Rajoy en el año 2012.

Además, aprovecharon el primer foro organizado entre el Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León y la Asociación Española del Derecho del Trabajo y Seguridad Social (AEDTSS) para demandar una mejora de la formación de los trabajadores, para que sea acorde a las necesidades de las empresas.

El foro “Reformas laborales y de la Seguridad Social para la recuperación económica y social”, que tuvo lugar de forma semipresencial entre la sede del CES y de manera telemática, sirvió para reflexionar sobre las políticas de recuperación después de la pandemia de la Covid-19 y abordar un periodo de “incertidumbre” sobre el futuro.

La vicepresidenta de CEOE Castilla y León, Ángela de Miguel, reconoció que el país y la Comunidad se enfrentan a una situación “complicada”, lo que requiere la participación de los interlocutores sociales. A su juicio, el Diálogo Social es un espacio “fundamental” para llegar a los acuerdos necesarios. No en vano, consideró que el diseño del futuro para las relaciones laborales se tiene que construir “entre todos”.

Por su parte, el secretario autonómico de UGT, Faustino Temprano, exigió la derogación de las anteriores reformas laborales, sobre todo la de 2012, al considerar que no ha cumplido con ninguno de sus objetivos y, sobre todo, por que salió adelante sin el consenso del Diálogo Social, pese a que existía un acuerdo de reforma laboral, pactado entre CEOE, Cepyme, UGT y CCOO. “Al llegar al Gobierno, no respetó ni una sola coma y sacó adelante su propia reforma, que fue aprobada por real decreto”, recordó.

Temprano se mostró esperanzado en llegar a un acuerdo de la reforma laboral en España con el beneplácito del Diálogo Social. “Las relaciones laborales del siglo XXI no pueden ser iguales a las del XX”, significó. No en vano, apostó por adecuar el mercado del trabajo y que los empresarios y trabajadores sean los que intenten regularizar el futuro de las relaciones laborales.

En caso de no lograr un acuerdo con los agentes sociales, el líder de UGT demandó “valentía” al Gobierno central para que exista una nueva reforma laboral o una contrarreforma y así cumplir con los objetivos marcados para que haya trabajo, empleo de calidad, trabajadores con derechos, abordar el tema de la formación y bajar la precariedad laboral, entre otras cuestiones.

De Miguel subrayóla necesidad de buscar medidas beneficiosas para todos los que participan en las relaciones laborales como son las empresas y los trabajadores. Acuerdos que, precisó, deben servir para encontrar mecanismos que mejoren y apoyen a los colectivos que tienen situaciones más complicadas pero también para cohesionar la Comunidad y ayudar a la fijación de población en el territorios. “Hay que facilitar a las empresas poder quedarse en Castilla y León, y por tanto a sus trabajadores”, aseveró, informa Ical.

El secretario general de Comisiones Obreras en Castilla y León, Vicente Andrés, declaró que las “habichuelas” del mundo del trabajo se juegan ahora en el ámbito nacional, ya que el Ejecutivo central es quien tiene las competencias en la materia. “Es allí donde debemos dirimir los grandes desafíos del mundo del trabajo”, expuso.

Momento del “gran cambio”

Asimismo, señaló que ya ha habido acuerdos con el Diálogo Social en materia de Seguridad Social y se han abierto mesas de negociación para abordar las reformas laborales y los procesos de concertación. Andrés consideró que, tras la pandemia, es el momento del “gran cambio” y la “gran transformación”. no solo en España sino en Europa y el mundo. “Esperamos que no volvamos a la normalidad como ocurrió en la crisis de 2008 y con una recuperación llena de desigualdades y con un mundo más contaminante”, confesó.

El líder de CCOO demandó, según Ical, que la crisis sanitaria sirva para la “transformación” necesaria, para lo que son vitales los fondos europeos de recuperación y ayudar a crear un nuevo mundo del trabajo, una nueva forma de producir y una nueva forma de igualdad.

La representante de la patronal reconoció que el país no acaba de “encajar bien” el tema de la formación en las relaciones laborales. “Es fundamental para diseñar el mundo laboral del futuro, donde la formación debe tener un papel clave en un mundo en constante cambio. Se nos exige mayor adaptación y hay que mejorar la formación de los trabajadores”, añadió.

Los responsables sindicales aprovecharon la inauguración del foro para denunciar la situación por la que atraviesa el Diálogo Social en Castilla y León, después de contar con un modelo “muy potente” en los últimos 20 años, impulsado por el anterior presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera. “Ahora, tenemos un Gobierno de coalición en la Comunidad que hace temblar las bases del acuerdo y el Diálogo Social, por lo que estamos en un momento de cierta debilidad, que esperamos poder revertir”, afirmó Vicente Andrés.

Más duro fue su homólogo en UGT quien destacó que Castilla y León ha sido “muy avanzado” en el Diálogo Social pero, en la actualidad, hay un problema de convencimiento con los acuerdos. “Se cree o no se cree en el Diálogo Social. Si vas al Diálogo Social por obligación y por no crees en él está condenado al fracaso”, añadió.

Y es que ambos recordaron que las competencias en materia laboral recaen en el Estado pero en la Comunidad se abordan las relaciones laborales como los mecanismos de solución de conflicto, las ayudas a las empresas en crisis y deslocalizaciones y los planes de empleo.

La presidenta de la AEDTSS, María Emilia Casas, apuntó que la pandemia del COVID se debe aprovechar para no volver a lo que se tenía antes. “No sé lo que tenemos pero, desde luego, no podemos volver a lo de antes. Pensar que esto ha sido un paréntesis y que vamos a volver al estado de cosas anterior y al ordenamiento jurídico laboral y de Seguridad Social y a la concertación social que había antes de la pandemia es imposible”, manifestó.

También coincidió con que los fondos europeos son una oportunidad para igualar los derechos del trabajo y que ocupen el lugar central que les corresponde y que para el mercado no se diluya sin más en el mercado. sino que tenga valor en sí mismo. Y es que apuntó que el trabajo debe tener la importancia vital y social que merece. “Otra de las enseñanzas de la pandemia de que sin trabajo no vamos a ningún lado por que, tal y como dice la Organización Internacional del Trabajo (OIT), no es una mercancía sino un factor esencial para la sociabilidad y la vida en común. En el confinamiento, cuando no se pudo trabajar, todos fuimos conscientes de su importancia”, reflexionó.

Además, la profesora Casas señaló que durante la pandemia las administraciones se han centrado en las políticas pasivas que activas y que hay un “grave fallo” con la formación, que no ocupa el lugar que le corresponde en el sistema de relaciones laborales.

Por último, hizo mención a la contratación laboral, que se ha “exacerbado” durante la pandemia y es algo “típicamente” español ya que el país cuenta con la mayor tasa de temporalidad en la Unión Europea. Algo que, señaló, produce consecuencias “tremendas” en las rentas salariales, la estabilidad en el empleo y la organización de la vida de las personas.

El presidente del CES de Castilla y León, Enrique Cabero, recordó que este foro es el primero tras el convenio de colaboración entre la institución y la Asociación Española del Derecho del Trabajo y Seguridad Social, lo que permitirá organizar dos encuentros anuales, uno en primavera y otro en otoño. Cabero abogó por una necesaria reflexión, en profundidad, desde los espacios participativos y pluralistas sobre las líneas de reformas laborales y de Seguridad Social. El foro también sirvió para rendir un homenaje al catedrático de Derecho del Trabajo y profesor de la Facultad de Ciencias del Trabajo de la Universidad de León (Ule), Germán Barreiro González.