Cuatro de cada diez personas atendidas por Cáritas Valladolid en 2021 acuden por primera vez

“La vulnerabilidad tiene rostro de mujer”. Así de contundente se mostró hoy el director de Cáritas Diocesana de Valladolid, Guenther Eduardo Boelhoff, al presentar la memoria de la institución correspondiente al año 2021, que concluye que el volumen de personas atendidas se elevó un 21 por ciento hasta las 1.426 personas, de las cuales el 73 por ciento fueron mujeres. Además, en su intervención puso sobre la mesa que casi el 38,8 por ciento de las personas atendidas requirieron la ayuda de Cáritas por primera vez, una tendencia que calificó como “creciente”, y que relacionó con una cruda realidad: “Hoy por hoy el nuevo pobre es un trabajador de clase media”.

En ese sentido, apuntó que la tendencia con salarios congelados e inflación disparada está dibujando un panorama donde “a las familias les está costando muchísimo llegar a fin de mes”. “Se ven obligadas a discernir adónde pueden llegar y de qué tienen que prescindir, y eso empuja hacia nosotros a muchas personas y familias que llegan por primera vez a Cáritas”, señaló. Además, expuso que en los últimos años se está produciendo “un goteo incesante de personas” en Valladolid en situación de protección internacional que “están en una situación administrativa irregular, y no tienen espacios donde vivir con dignidad y un espacio donde poder cuidar a sus hijos”.

La memoria, hoy presentada junto al obispo auxiliar de la Archidiócesis de Valladolid, Luis Argüello, y el delegado episcopal de Cáritas , José Colinas, recoge además que el 40 por ciento de los usuarios del servicio son hogares con menores, y el 60 por ciento tiene nacionalidad española.

De todos los participantes en sus programas, 455 han tomado parte en los itinerarios personalizados de empleo (con una inversión de más de 460.000 euros); 514 en programas de infancia, adolescencia y juventud (178.000 euros), 290 personas en el programa de mujer (491.000 euros), 199 personas en el programa de mayores atendidos por soledad no deseada (114.000 euros), 222 personas en el programa de adicciones y prisión (91.000 euros), 483 en el programa de personas sin hogar (624.000 euros) y 234 en el programa de cooperación internacional (99.000 euros). En total, La inversión realizada por Cáritas el pasado año en sus diferentes programas sociales ascendió a 3,2 millones de euros, de los cuales el 68,5 por ciento procedía de donaciones privadas y el 31,5 por ciento restante de financiación pública.

En total, la entidad contó con el trabajo de 521 voluntarios y 57 trabajadores, además de tener 798 socios y 1.781 donantes. Del acompañamiento a 9.251 personas se beneficiaron en total 14.873 personas, y la dotación en ayudas directas a las fmailias se incrementó un 18,5 por ciento respecto a 2020, y en más del doble respecto al año 2019, con 548.700 euros en total, una cifra “preocupante” a juicio de Boelhoff, que señaló que se han visto obligados a “salir al paso de cientos de familias que no podían afrontar el pago del alquiler, el recibo de la hipoteca o el suministro de bienes esenciales”.

En ese sentido, el 51 por ciento del importe de las ayudas económicas prestadas a las familias se dedicaron a la vivienda (de ellas el 54,5 por ciento para apoyar alquileres y el 24 por ciento a suministro energético). El resto de ayudas económicas se ha repartido entre sufragar gastos de alimentación y enseres básicos (24 por ciento) y relacionados con la salud (10 por ciento).

Semana de la caridad

El obispo auxiliar de la Archidiócesis de Valladolid, Luis Argüello, aprovechó la presentación de la memoria para dar a coconer la Semana de la Caridad que hoy arranca en Valladolid, y que se prolongará hasta el próximo domingo con el lema ‘Somos lo que damos. Somos amor’, que “relaciona la celebración de la eucaristía con la caridad”. “La palabra caridad a veces parece desprestigiada. Parece que es un amor menor que la justicia, y sin embargo quiere ser un amor que supere a la correspondencia, que desborda a la justicia y la incluye, que desborda los deberes que tenemos como cristianos”, explicó antes de referirse a los “grandes desafíos” que hay por delante “para toda la ciudadanía”, como la guerra de Ucrania, los desajustes de la inflación o las amenazas en suministros de sectores básicos. “Como iglesia nos gustaría estar a la altura para responder a la llamada de las personas con necesidad”, señaló.

Así, en declaraciones recogidas por Ical aseguró que “el capitalismo ha promovido como estrategia de consumo a individuos autónomos, autosuficientes e independientes”, y “ahora se ven las consecuencias”. “Las reglas del juego han puesto en solfa la significación de la familia, y como consecuencia llega la soledad no deseada”, lamentó. Antes de exponer que la iglesia quiere trabajar “rostro a rostro y ofrecer vínculos”, que a su juicio “no son los enemigos de la libertad, como pretende hacer ver la trampa del neoliberalismo”. “Da la impresión de que el progresismo hace el juego a estos planteamiento, haciendo un elogio de una vida individualista que luego tiene sus consecuencias. Nos gustaría activar la conciencia de ciudadanos y vecinos que se sienten responsables de quienes caminan a su lado”, defendió.

El delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Valladolid, José Colinas, explicó que la programación diseñada con motivo de la Semana de la Caridad arranca esta tardea las 17.00 horas en la Parroquia de San Andrés, con la inauguración de la exposición ‘Encontrar para encontrarnos’, que podrá visitarse martes y jueves de 11 a 13 horas, y miércoles y jueves en ese horario matinal y también de 17 a 19 horas por las tardes. La muestra tiene el doble propósito de “escuchar las historias de personas que han tenido que huir de la pobreza y de la persecución por motivos políticos, que ahora viven en nuestra sociedad, y promover espacios de encuentro para esas comunidades”.

El objetivo de la Semana de la Caridad es “visibilizar y sensibilizar sobre alguna de las realidades lacerantes actuales”, y por ello el miércoles y jueves se dedicarán a “las nuevas pobrezas”. Así, el Centro Diocesano de Espiritualidad acogerá el miércoles a las 18.00 horas un encuentro de voluntariado de mayores, que pretende visibilizar un “tema tabú” como “la realidad de la soledad”. Un día después, la directora del Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, María Ángeles Salvador, impartirá la charla ‘Estos días azules, este sol de la infancia’, sobre la soledad en el arte. Y el programa concluirá el viernes en la Plaza de Portugalete con un concierto a cargo de los cantautores Juanjo Hernández y Manolo Copé, con entrada libre.