Emprendedores
Cada vez hay más proyectos de investigación incubados en las universidades
La Junta impulsa diez ‘startups’ y explora nueve proyectos en colaboración con grupos de investigación de las instituciones académicas
La Consejería de Economía y Hacienda, a través del Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (ICE), trabaja en el desarrollo de la competitividad en el marco de su programa de innovación abierta Wolaria con dos pilares del emprendimiento innovador, las ‘startups’ o nuevas empresas, que proceden de una nueva edición de la Aceleradora de ICE y grupos de investigación con vocación empresarial que participan en un programa pionero para favorecer el desarrollo de proyectos de investigación incubados en las universidades de Castilla y León.
Con su acceso a la aceleradora, diez ‘startups’ han finalizado la primera fase de un proceso de trabajo basado en un campus de cuatro meses en el que se ha trabajado de forma colectiva, e iniciarán una segunda fase de escalado que dura cinco años.
A partir de ese momento, el trabajo será individual con cada proyecto en los ámbitos del negocio, tecnología, finanzas, gestión, marketing y ventas, ‘networking’ y espacios físicos y, sobre todo, en la aceleración de mercado, para lo que dispondrán de un acompañamiento integral en la vida del proyecto.
Durante ese tiempo, y como refuerzo, desde Wolaria innovación abierta, a la aceleración estratégica le seguirá el crecimiento en el mercado, de la mano de otras empresas y organizaciones de Castilla y León que les plantearán retos y demandas.
Por otra parte, y como paraguas de la innovación empresarial, también vía transferencia de conocimiento, ICE ha reforzado el marco de colaboración con las universidades de la Comunidad para poner el acento en la llegada al mercado de las soluciones innovadoras que surgen de los grupos de Investigación. Así, se ha trabajado en un programa formativo con responsables de transferencia universitaria basado en una metodología que permite validar las tecnologías desarrolladas por los investigadores, contrastar los modelos de negocio en mercado y crear nuevas compañías.
Los diez proyectos que han recibido su diploma al finalizar esta primera parte de su proceso de aceleración se suman a los impulsados en el marco de aceleración de la que fue la primera aceleradora pública en 2012.
Su campo de actuación abarca aspectos tan diversos como la transformación y comercialización de sangre animal para obtener suero para la investigación y empresas farmacéuticas, soluciones paramejorar la seguridad en las operaciones del sector aeroespacial, el desarrollo integral de instalaciones de producción, almacenamiento, distribución y comercialización de hidrógeno y oxígeno verdes, o la construcción y explotación de plantas industriales para aplicación de un proceso químico dirigido al tratamiento de cenizas procedentes de incineradoras.
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