Sociedad

Salamanca inscribe para siempre el nombre del abogado Fernando García-Delgado en piedra de Villamayor

La presidenta de la Abogacía Española descubre una inscripción junto al Colegio Oficial de Abogados del que fue decano, en recuerdo a quien también se puso al frente de los letrados castellanos y leoneses

La presidenta del Consejo General de la Abogacía Española, Victoria Ortega, y el decano del Colegio Oficial de Abogados de Salamanca, Javier Román, participan junto al alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, en el homenaje a Fernando García-Delgado, quien fuera presidente del Consejo de los Ilustres Colegios de Abogados de Castilla y León. En la imagen, junto a su viuda, Inmaculada García
La presidenta del Consejo General de la Abogacía Española, Victoria Ortega, y el decano del Colegio Oficial de Abogados de Salamanca, Javier Román, participan junto al alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, en el homenaje a Fernando García-Delgado, quien fuera presidente del Consejo de los Ilustres Colegios de Abogados de Castilla y León. En la imagen, junto a su viuda, Inmaculada GarcíaDavid Arranz www.davidarranz.comAgencia ICAL

La ciudad de Salamanca rindió homenaje este martes 11 de octubre al abogado que fuera decano del Colegio Oficial de la provincial y presidente del Consejo de Colegios de Abogados de Castilla y León, Fernando García-Delgado García, con una inscripción en la esquina de la calle Caldereros con la plaza de Colón, junto a la sede de los letrados salmantinos.

En el acto, junto a familiares y amigos del homenajeado, participó la presidenta del Consejo General de la Abogacía Española, Victoria Ortega Benito, así como el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, el actual decano del Colegio de Abogados de Salamanca, Javier Román, y su viuda, Inmaculada García Regalado.

Victoria Ortega aseguró durante su discurso, señalado para cerrar el emotivo acto, que su intervención lo era como presidenta de la Consejo General de la Abogacía Española, pero “sobre todo como amiga”, una condición que ensalza “el recuerdo, la presencia y, a veces, la inevitable nostalgia” por quien dejó entre sus conocidos “una enorme ausencia”.

Ortega expresó su “admiración” por García-Delgado, quien, para ella, fue “un gran abogado hasta el final”, cuya trayectoria estuvo marcada por “su sentido ético en el ejercicio profesional y por hacer de la excelencia práctica un sello propio”. La presidenta de la Abogacía Española elogió además su vocación de jurista, destacando que “el trabajo era su modo de vida” y que “era una abogado que quería serlo y se sentía como tal”.

Por otro lado, Victoria Ortega subrayó su “pura coherencia” en el sentido de la “armonía perfecta entre su pensamiento y su obra”, pero también “entre sus sueños y la realidad”. Finalmente, sobre su trayectoria de detuvo en dos de sus hitos profesionales, como fue la celebración en Salamanca del congreso nacional de abogados y la asunción por parte del Colegio que presidió de la sede que aún lo acoge.

Compromiso y talento

El acto fue abierto por el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, quien destacó que García-Delgado fue una persona “comprometida” con la profesión y con sus compañeros en la defensa de sus intereses, “con presencia cercana y perseverancia” en todos los ámbitos, local y provincial, autonómico y nacional.

De su carácter fundador, el alcalde también se refirió a la sede, “muy bien situada, al lado mismo de los Juzgados”. “Diríase que supo poner las cosas en su sitio”, apostilló. García Carbayo subrayó igualmente el “compromiso docente” de Fernando García-Delgado, “transmitiendo así en la Universidad que lo formó el talento que atesoraba”. Y de su ejercicio profesional, resaltó una trayectoria profesional “fecunda e impecable”, con la que “supo ganarse el cariño y respeto de todos”.

Trayectoria en la que la colaboración con el Ayuntamiento de Salamanca fue “constante”, según el regidor, destacando los acuerdos sobre mediación concursal, los programas de asesoramiento a las personas mayores o las conferencias en los centros educativos “para sembrar la semilla del ejercicio de la abogacía en los corazones de los niños”.

Por estos motivos, concluyó el alcalde, “la sociedad debe reconocer la valentía y el compromiso de las personas que deciden dar un paso al frente en defensa de su colectivo y asumen la responsabilidad de dirigir sus corporaciones, porque rinden un servicio público impagable a los ciudadanos”.

Su actual sucesor en el cargo al frente de los abogados salmantinos, Javier Román, destacó sobre García-Delgado que “siempre tuvo claros sus objetivos” en el ejercicio de representación de sus compañeros, como fueron “defenderlos manteniendo su independencia” y “pelear la imagen del colectivo a todos los niveles”. “Lo hizo no bien, sino estupendamente. Buena prueba de ello es este acto al que asisten representantes de todos los estamentos, no solo a nivel institucional, sino también amistades”, señaló.

Finalmente, la viuda de Fernando García Delgado, Inmaculada García Regalado explicó que conoció a su marido cuando contaba con 23 años, cuando se colegió, y enseguida pasaron de tener una relación de compañeros profesionales a “compañeros de vida”. “La menos protagonista debería ser yo porque las loas a Fernando deberían venir de fuera y no de dentro de casa”, manifestó durante su escueta intervención.

Trayectoria de García-Delgado

Fernando García-Delgado García, natural de Salamanca, se licenció en Derecho por la Universidad de esta ciudad en 1973 y se colegió en esa circunscripción con el número 983 desde el año 1975, adscrito a los Colegios de Abogados de Madrid y Valladolid.

Fue elegido decano del Colegio Oficial de Abogados de Salamanca en 1995, cargo en el que permaneció una década, hasta 2005, y en 2006 fue proclamado presidente del Consejo de los Ilustres Colegios de Abogados de Castilla y León en las primeras elecciones democráticas del mismo por los nueve decanos de la Comunidad, nombramiento que repitió en 2010 y 2014. Asimismo, fue consejero del Consejo General de la Abogacía Española desde 1995.

Entre sus áreas de conocimiento profesional figuran el Derecho Civil, Mercantil, Laboral y Penal, y entre su actividad docente, la Facultad de Derecho de la Universidad salmantina y la Escuela de Práctica Jurídica, en la que, como profesor adjunto desde 1995 impartió el máster en práctica jurídica, y materias como ética y deontología profesional.

García-Delgado fue además distinguido durante su vida con la Gran Cruz al Mérito en el ejercicio de la Abogacía concedida por el Consejo General el 4 de octubre del año 2003, la Gran Cruz al Mérito en el ejercicio de la Abogacía del Consejo Regional de Castilla y León 26 de noviembre de 2004 y la Cruz Distinguida de Primera Clase de la Orden de San Raimundo de Peñafort el 25 de junio de 2012, concedida por el ministro de Justicia, informa Ical.