La Comandancia de Soria, la primera de Castilla y León y la quinta de España en contar con una carta de servicios

La Comandancia de la Guardia Civil de Soria se convierte en la primera de Castilla y León en presentar su carta de servicios, un compromiso con la calidad de los mismos que se replicará en otras dos comandancias de la Comunidad en 2023, según avanzó el general jefe de la XII Zona de la Guardia Civil en Castilla y León, Luis del Castillo.

La delegada del Gobierno de España en Castilla y León, Virginia Barcones, el teniente coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Soria, Andrés Velarde y el general jefe de la XII Zona de la Guardia Civil en Castilla y León, Luis del Castillo, presentaron hoy la carta de servicios de Soria, un “compromiso con la calidad y el carácter benemérito del cuerpo, asumido, a día de hoy, por tan sólo otras cuatro comandancias de España”.

Entre los objetivos que se marca la carta de servicios de la Comandancia de Soria destacan el fomento de la cultura de seguridad entre los menores y la comunicación con los mayores de 65 años a través de más de 850 acciones informativas.

El impulso de la prevención en materia de medio ambiente, en especial la prevención de incendios forestales (2.250 actuaciones al año); aumentar el servicio humanitario; impulsar el control de armas y explosivos; prestar un servicio de calidad al ciudadano; y fomentar la seguridad de las explotaciones agrícolas y ganaderas, son otros compromisos adquiridos en la carta de servicios, según destacó Velarde.

A esto se unen el impulso de la protección del patrimonio histórico; reducción los tiempos de espera a la atención al ciudadano; el mantenimiento de los contactos y entrevistas con el sector de la seguridad privada y mejorar los servicios preventivos en materia de seguridad vial.

Barcones precisó que las cartas de servicio es un documento que se debe actualizar cada tres años y cuando las circunstancias cambien, y agregó que se trata de asumir el reto de mejorar su autoexigencia, con la renovación de los compromisos de calidad y con la concreción de los indicadores de calidad para su seguimiento y valoración. “Este cuerpo quiere seguir afianzado la seguridad de los ciudadanos para prestarles auxilio, atención e información y haciéndolo con cercanía, seguridad, excelencia y calidad”, resaltó.

Asimismo, indicó que la Guardia Civil a su cartera de servicios tradicionales se unen otros como la instrucción de atestados, la investigación penal, la instrucción de expedientes administrativos, el otorgar de acreditaciones, licencias de armas y la divulgación de la cultura de la seguridad.

La delegada del Gobierno precisó que la benemérita establece dos compromisos: uno general para alcanzar la mayor seguridad y otro dirigido a los usuarios para que reciban los servicios con la mayor calidad.

En este sentido, recordó que el compromiso con la ciudadanía en general es conservar el despliegue territorial y mantener las nueve comandancias, nueve compañías y 260 puestos de Castilla y León.

“Es el objetivo el mantenimiento de la red desplegados por todo el territorio y hay un estricto seguimiento de los servicios que se presta al ciudadano”, agregó, para aclarar que la carta de servicios, establece los indicadores precisos, y, en el caso de que el ciudadano considere que no se han cumplido con los compromisos declarados en la carta, puede formular las reclamaciones oportunas.

Asimismo, Barcones recalcó que el Gobierno central asume la mejora de mejorar las condiciones laborales de los agentes con el incremento del salario medio de los agentes en un 38 por ciento entre 2018 y 2025 y con la mejora de las infraestructuras, entre ellas, las obras de la Comandancia de Soria a la que se destinarán 7,5 millones de euros, la mayor inversión de Castilla y León. “También llegarán vehículos híbridos y eléctricos y un mayor número de agentes”, precisó.

Finalmente, la delegada recordó que otro de los objetivos del Gobierno ha sido recuperar el número de efectivos que había en 2017 en Castilla y León que alcanzaba los 7.129, un reto casi superado pues a día de hoy se han alcanzado los 7.000, frente a los 6.600 que había en 2017, informa Ical.