Cultura

Amalia Iglesias y Rubén Abella reciben el Premio de la Crítica de Castilla y León

La ganadora se cuestiona si "es posible escribir poesía después de Gaza"

Amalia Iglesias y Rubén Abella reciben el Premio de la Crítica de Castilla y León
Amalia Iglesias y Rubén Abella reciben el Premio de la Crítica de Castilla y LeónR. Valtero/Ical

La poeta Amalia Iglesias, una de las ganadoras del XXII Premio de la Crítica de Castilla y León junto al novelista Rubén Abella, se ha preguntado durante la entrega del premio este sábado en Valladolid si "es posible escribir poesía después de Gaza", y ha tenido un recuerdo para las víctimas del "genocidio atroz ante la indiferencia y pasividad del mundo".

Iglesias ha reivindicado el "humanismo" sobre las ideologías y ha sostenido que igual que "Theodor Adorno se preguntaba hacia 1950, si ¿es posible escribir poesía después de Auschwitz? Hoy es pertinente preguntarse si es posible escribir poesía después de Gaza".

Así lo ha trasladado durante la entrega del galardón que ha tenido lugar en el Círculo de Recreo vallisoletano y que se enmarca en los actos de la 58ª Feria del Libro de Valladolid (FLV).

Iglesias, premiada por su poemario 'Tampoco yo soy un robot', ha recordado los versos de John Donne en 'Las campanas doblan por ti' que sirvieron de inspiración a la obra de Ernest Hemingway para 'Por quién doblas las campañas' y ha incidido en que "todos somos una humanidad que debíamos escuchar ese sonido de las campanas y hacer pensar que somos nosotros mismos".

En su intervención, también ha recordado sus orígenes en Menaza - hoy una pedanía del municipio palentino de Aguilar de Campoo, al que se ha referido como "un pequeño pueblo de labradores en el límite con Cantabria" porque "el paisaje y la naturaleza han sido el principio seminal" de su escritura.

"Quizás aquella soledad fue el germen de la poesía como una necesidad de expresar la verdad y la belleza, en esa Castilla de la que a menudo se ha hablado mucho de la España Vacía -pero para mí la soledad, la lentitud, ese paisaje fue un comienzo", ha evocado.

Iglesias ha terminado con un poema de Nuccio Ordine titulado 'La utilidad de lo inútil' cuyo principio ha compartido el otro ganador del premio de la Crítica por su obra 'Dice la sangre', el escritor Rubén Abella, quien también se ha referido a la soledad de los escritores que se pasan "mucho tiempo ordenando y desordenando palabras".

"Así tiene que ser, porque levantar castillos de letras robustos que no se caigan con el viento requiere esfuerzo y concentración. Escribimos un poco aislados, un poco a ciegas, de modo que cuando llegan los premios son una bendición", ha sosetnido.

Para Abella, "la literatura sólo cobra vida cuando las obras se leen y los premios ayudan a que este milagro se produzca".

Por su parte, la viceconsejera de Acción Cultural de la Junta, Mar Sancho, ha valorado la "magnífica cosecha literaria" de Castilla y León en 2024 en una multiplicidad de géneros y ha calificado como "absolutamente fascinante" el poemario de Amalia Iglesias, "una de las poetas clásicas" de la Comunidad.

"Como lectora, me descolocó; y es que en ocasiones necesitamos que la poesía nos despierte, casi que nos abofetee, que nos haga pensar y que nos haga ver los ojos de otra manera", ha reflexionado.

Y del libro de Abella ha valorado su perfección y dificultad en una "novela mosaico" con multiplicidad de personajes.