Castilla y León y Galicia, dos regiones hermanas que miran al futuro desde la gestión, la experiencia y la eficacia del PP de Feijóo

El popular Alfonso Rueda le ha dado una nueva mayoría absoluta, la quinta de forma consecutiva tras las cuatro de Feijóo, al Partido Popular en la Comunidad Autónoma de Galicia, bastión y feudo inexpugnable para esta formación de centro derecha que gobierna en casi en todas las regiones del país, con un poder territorial absoluto.

El triunfo del candidato del PP gallego, además de hundir al PSOE de Sánchez, que logra con nueve escaños el peor resultado de su historia en tierras gallegas, apuntala y consolida al proyecto del PP nacional en su afán por llegar nuevamente a La Moncloa.

En apenas unos meses se celebrarán las elecciones vascas y las europeas, sobre todo estas últimas al ser circunscripción única, que pondrán de relieve la necesidad o no de unos nuevos comicios generales en España si prosigue esta tendencia.

Desde el PP de Castilla y León, con su presidente Alfonso Fernández Mañueco al frente, están muy contentos también por el triunfo sin paliativos de Rueda en Galicia, región vecina y hermana, con la que comparten las mismas inquietudes, problemas y demandas en muchos ámbitos, todos ellos terrenales y urgentes, como las comunicaciones o la reivindicación de la igualdad con todos los territorios de España. Dos autonomías que, además, en este 2024 van a celebrar juntas la próxima edición de Las Edades del Hombre, la exposición de arte sacro más importante del mundo. Dos territorios amigos y dos líderes que se llevan muy bien.

De hecho, Mañueco ha estado varias veces arropando a Rueda en actos de partido y mítines tanto en precampaña como en campaña, y anoche, tras conocerse los resultados electorales, el presidente de la Junta era de los primeros también en felicitarle, con un mensaje claro y contundente en las redes sociales.

"¡Enhorabuena Alfonso Rueda!Miramos al futuro de España desde la gestión, la experiencia y la eficacia que en nuestra nación representa Núñez Feijóo. Un abrazo amigo", escribía el jefe del Ejecutivo autonómico en su perfil personal de la red social "X", mientras acompañaba este mensaje con una imagen reciente de ellos dos charlando animadamente.

Mañueco, cuando ha tenido ocasión, siempre ha tenido palabras de afecto y elogios para con Rueda, al que siempre, desde que relevó a Feijóo en la Xunta de Galicia, ha considerado como un presidente "fiable y eficaz", pero también "comprometido" con el progreso de su tierra.

"Con él es muy fácil trabajar en favor de las personas de Galicia y de Castilla y León. Como presidente de la comunidad vecina y amigo personal, tiene todo mi apoyo y colaboración”, decía Mañueco el pasado mes de enero del presidente gallego.

Y hace apenas una semana, en un mitin de campaña, el presidente del PP regional pedía una victoria clara y rotunda de Rueda, algo que se ha cumplido, y hacía un llamamiento a los gallegos a acudir en masa en masa a votar, lo que se ha conseguido también ya que la participación ha sido histórica.

"Cada voto es único y decisivo», decía hace siete días Fernández Mañueco, quien siempre destaca también las buenas relaciones existentes entre la Xunta de Galicia y la Junta y los proyectos en los que trabajan ambos Gobiernos como son la lucha contra la despoblación, el Corredor Atlántico, las infraestructuras o la calidad de los servicios públicos, o que se trate dedos comunidades que «no ponen muros».

Mañueco, además, siempre ha apostado por la estabilidad política que ofrezca seguridad a las familias, tranquilidad a los empresarios y al medio rural, tanto en su tierra, como ahora en Galicia, y asegura que Rueda es la persona ideal para dar esa estabilidad porque tiene experiencia en la gestión