Castilla y León, otra vez por encima de los cien mil parados

Castilla y León no ha terminado bien el pasado año en materia de empleo, ya que cerró con 4.400 ocupados menos que un año antes hasta los 1.009.900, con 7.700 parados más, que deja en 106.00 los desempleados al final del año, y un 9,5 de tasa de paro, 2,26 menos que la media nacional que se situó en el 11,76. Esta subida contrasta con el dato nacional, que baja un 6,4 por ciento, con 193.400 personas menos, hasta los 2,8 millones de parados, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada hoy por el INE.

La tasa de paro masculina se situó en la Comunidad en el 7.66 por ciento ( 7,79 hace un año) y la femenina en el 11,60 (10,02) al final del 2023.

En cuanto al cuarto trimestre del año, Castilla y León perdió 9.500 ocupados (-0,93%); y 600 personas salieron de las listas del paro en la Comunidad (0,55 por ciento).

En el conjunto nacional, el mercado laboral cerró 2023 con 21,24 millones de ocupados, 783.000 más que al inicio del año, con un cuarto trimestre negativo en el que el empleo cayó en 19.000 personas.

Y en cuanto al paro, España concluyó el 2023 con 193.400 parados menos que al inicio del año, hasta los 2.830.600.

Castilla y León es una de las tres autonomías que anotan subidas del paro en 2023, junto a Canarias, que lo hace un 16,1 por ciento, y Baleares, un 6,7 por ciento.

Sin embargo, en términos intertrimestrales, la Comunidad apuntó una caída moderada del desempleo del 0,5 por ciento, con 600 parados menos que en el periodo comprendido entre julio y septiembre, con lo que Castilla y León encadena cuatro descensos intertrimestrales. En paralelo, en España creció el paro un 0,86 por ciento y 24.600 parados menos.

Por lo que respecta a la ocupación, en Castilla y León desaparecieron al cierre del cuarto trimestre del año 9.500 personas, en términos interanuales, y 4.400 en la intertrimestral, con lo que cifra global se sitúa ligeramente por encima del millón de ocupados (1,009 millones), la séptima comunidad con la mayor cifra.

En este caso, los ocupados en España se cerraron en 21,24 millones de personas, 19.000 menos que en el tercer trimestre de 2023.

En cuanto a los activos, Castilla y León ganó en el último año 3.400, un 0,3 por ciento más, hasta 1,11 millones. En España, con 24 millones de activos, el incremento fue de 589.600 (2,51 por ciento). Con respecto al pasado trimestre, Castilla y León perdió 10.100 activos, un 0,9 por ciento, mientras que España bajó un 0,18 por ciento (43.600).

Por su parte, la tasa de actividad se situó en Castilla y León en 54,59 por ciento (58,99 en España), la cuarta más baja del país, solo por detrás de Asturias (50,84 por ciento) y Galicia (53,19 por ciento).

Por provincias, cabe señalar que la tasa de paro se elevó en el último año en León, un 29,2 por ciento, con 4.500 más, hasta totalizar 19.900 parados. Le siguen Segovia, con un 14,5 por ciento más y 800 más, con 6.300 desempleados en global; Zamora, con un 13,3 por ciento más (1.400 más en el último año, hasta 11.900); Burgos, con un 13,1 por ciento (1.700 más, hasta 14.600 parados); y Valladolid, con un 12,5 por ciento de crecimiento del paro (2.400 más y un total de 21.500). Asimismo, se mantuvo estable en Salamanca, con 15.900 parados en global y bajó un 28,5 por ciento en Soria (1.000 parados menos, hasta los 2.500), un 19 por ciento en Palencia (1.200 desempleados menos y un total de 5.100) y en Ávila, donde cayó un 9,9 por ciento (que se traduce en 900 menos, con 8.200 en total).

Reacciones

Nada más conocerse los datos, desde UGT Castilla y León, aseguran que esta encuesta de la EPA es “nefasta” para Castilla y León ya que se sitúa “en la cola a nivel nacional en materia del desempleo”. Raúl Santa Eufemia, secretario de acción sindical y diálogo social de UGTCyL, asegura que la autonomía es “la que más ocupados pierde y la que menos activos gana” y que estos datos revelan "el gran desastre de esta tierra quemada”.

A su juicio, los datos son fruto del “ejercicio de monologuista” del director de Trabajo, que “no atiende a la sociedad, a las empresas, a los trabajadores, ni mucho menos a los sindicatos más representativos en la Comunidad”.

La CEOE Castilla y León advierte de que los datos confirman la fragilidad de la actual situación económica, en un contexto de incertidumbre e inestabilidad que podría condicionar el mercado laboral, afectándolo negativamente”.

Ante estos datos, apeló la patronal, el mantenimiento y la creación de empleo “deben convertirse en una prioridad”. Para ello, CEOE Castilla y León cree que “resulta obligado redoblar los esfuerzos en términos de flexibilidad, contención de las cargas impositivas y adecuación de los costes laborales a ese marco incierto, promoviendo seguridad y estabilidad regulatoria que genere confianza en los inversores y priorice el mantenimiento y la creación de empleo”.

Sin embargo, afeó las últimas medidas adoptadas por el Gobierno “sin tener en cuenta a los empresarios”, tal y como ha ocurrido con el acuerdo para la actualización del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en 2024, que es “incompatible con la supervivencia del tejido empresarial y, por tanto, del empleo”.

La Confederación Empresarial confió en que “no genere efectos de segunda ronda” y se traslade a la inflación, “añadiendo así un nuevo factor de riesgo a la ya patente ralentización de la economía y el empleo”.

Para CEOE Castilla y León, 2024 “debe ser el año en el que se apueste definitivamente por la industrialización, la innovación, la inversión en tecnología, la retención y atracción del talento, la internacionalización y por aumentar el tamaño de nuestras empresas para que podamos ganar competitividad, garantía todo ello del impulso de la economía potenciando la inversión empresarial y la creación de empleo”.