El gusano que tiene en vilo a los agricultores sorianos

Los agricultores de Soria han alzado la voz este sábado, y no precisamente por los bajos precios, las exigencias medioambientales de la PAC o por la competencia desleal que sufren, e incluso por la sequía, sino por un gusano que está causando estragos e los cultivos, sobre todo en la zona sur, en concreto en Almaluez, Taroda, Arcos de Jalón y Monteagudo de las Vicarías: se trata del zabro.

Y es que la escasez de heladas y de lluvias han ayudado a la propagación de los focos, sobre todo, en aquellas parcelas donde se realiza la siembra directa.

El zabro (zabrus tenebrioides) es un insecto coleóptero cuyas larvas pueden ocasionar daños en los cereales. El periodo entre nascencia y encañado es el de mayor riesgo. La sintomatología típica se asocia a que se alimentan del parénquima foliar respetando la nervadura, lo que provoca un aspecto de deshilachado en las hojas muy característico.

El técnico de la organización agraria de la comarca de Almazán, Nacho Marcos, asegura que los agricultores conocen cómo hacer frente a las larvas que deja este escarabajo, porque no es la primera vez que pasa, sin embargo, advierte de que el problema está en que existen restricciones en el uso del producto sanitario que lo combate más eficazmente.

“Ahora mismo solo hay una materia activa que esté registrada para combatir el zabro en cereal y y no tiene solo un producto de contacto ni ninguna persistencia, entonces es muy difícil que con ese producto se pueda hacer un buen control del problema”, indica, en declaraciones recogidas por Ical.

Hace cinco años que prohibieron utilizar el fitosanitario más eficaz, según el técnico, y con la materia activa que está en vigor actualmente no se combate el escarabajo, por lo que solo resta hacer labores con aperos para controlar la plaga y romper todo el ciclo que implica la siembra directa.

“ El zabro, al final, si las condiciones climáticas son adecuadas empieza por rodales pequeñitos pero se va extendiendo muy rápidamente. Entonces, las parcelas se han visto muy afectadas”, reseña Marcos, mientras subraya que la larva está por debajo de la tierra y es difícil de controlar sino es con aperos.

Nacho Marcos subrayó que el zabro solo se puede combatir o bien con productos químicos permitidos, cuya materia activa es muy poco eficaz, o con labores mecánicas, que rompen el ciclo de la siembra directa, y agregó que otras zonas de Valladolid y Burgos también se ven afectadas. “En Soria el problema es el zabro y no los topillos”, recalcó.

La Consejería de Agricultura recomienda que el tratamiento se realice al amanecer o al atardecer, momentos de mayor actividad larval, y con productos autorizados e inscritos en el Registro Oficial de Productos Fitosanitarios.

Para prevenir futuras apariciones del zabro, se sugiere la rotación de cultivos, evitar siembras de cereal sobre cereal, retrasar la fecha de siembra y realizar labores en el terreno para eliminar rastrojos y ricio, preferiblemente con volteo para exponer larvas al exterior.