Sociedad

Junta y Fiscalía se alían frente a las agresiones a sanitarios: "Denunciar sí que sirve"

"Los pacientes deben ser conscientes también de lo que se juegan cada vez que acuden a un centro de salud, a una consulta o a urgencias", advierte el fiscal superior, Santiago Mena

El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, conversa con el fiscal superior de Castilla y León, Santiago Mena, antes de la jornada
El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, conversa con el fiscal superior de Castilla y León, Santiago Mena, antes de la jornadaLeticia PérezIcal

La Consejería de Sanidad y la Fiscalía Superior de Castilla y León hacen piña y se alían con el objetivo de que afloren las agresiones a los sanitarios en la comunidad, para que estos sientan que sus denuncias sí sirven para algo.

Y es que los profesionales de la Sanidad están indignados y un tanto desprotegidos al ver como a pesar de que las agresiones están cotizando al alza tan solo se produjeron una docena de condenas penales en 2024, que pueden conllevar hasta 4 años y seis meses de pena, si se plantean vías como medidas cautelares previas de alejamiento antes de llegar a juicio.

"No es aceptable de ninguna manera que una persona en su puesto de trabajo reciba ese tipo de actuaciones y no haga nada porque no se siente protegida o porque no se siente respaldada o porque si hace algo tiene la sensación de que no se le va a dar alguna satisfacción", advertía este martes el Fiscal Superior de Castilla y León, Santiago Mena, en declaraciones recogidas por Efe.

Además, aseguraba que los sanitarios " a veces se sienten indefensos", y trasladaba que los fiscales, hasta donde puedan llegar "estarán muy detrás" porque les preocupan estas agresiones, "que afectan a casi toda la población" que antes o después va ser usuaria de la sanidad.

"Los pacientes deben ser conscientes de lo que se juegan cada vez que acuden a un centro de salud o una consulta o un servicio de urgencias", apuntaba el Fiscal Jefe, mientras explicaba que las conductas más graves son las de menor número, y que por eso no siempre se denuncia. Además, señalaba que los delitos leves de amenazas o coacciones generan "una desazón y un desasosiego en la prestación del servicio que repercute a todos".

"Queremos concienciar a los facultativos de que su denuncia sí que sirve", insistía.

El consejero Alejandro Vázquez, por su parte, explicaba que el objetivo de esta unidad de acción es establecer una protocolización nueva entre la Gerencia Regional de Salud y la Fiscalía además de abrir un canal de comunicación rápida para mejorar toda la tramitación de esas denuncias y plantar cara a una "lacra" que parece no tener fin.

Además, avanzaba que se ha convocado para la segunda semana de julio el Observatorio sobre agresiones para repasar los datos de 2024.

Tanto Vázquez como Mena han participado este martes en unas jornadas en Valladolid que buscan mejorar la formación tanto de los gerentes de la sanidad autonómica como del personal que se encarga de tramitar las denuncias por agresiones a los sanitarios y mejorar los canales de comunicación entre ambas partes.

Durnate sus intervenciones, el titular de Sanidad y el fiscal recordaban que los ataques al personal sanitario, por su condición de funcionario público, suponen un “atentado a la autoridad”, debido a que cuentan con una especial “salvaguarda” en el Código Penal. Además, consideró que no sólo incorporan las agresiones físicas, también las amenazas, las coacciones o los insultos.

En este sentido, cabe señalar que casi el 80 por ciento de las agresiones a profesionales sanitarios se cometen sobre mujeres, lo que supone un porcentaje superior al que representan dentro de la plantilla de la sanidad pública, según el fiscal, quien señalaba que se producen de forma mayoritaria en la Atención Primaria y las urgencias, así como sobre el personal administrativo.