Mañueco llama a formar talento que dé respuesta a las demandas de las empresas

Castilla y León se encuentra entre las cinco primeras regiones de la España autonómica cuyas empresas más gastan en I+D. En concreto, esta inversión supera en diez puntos a la media nacional. Además, la Comunidad es un referente en el sector farmacéutico ya que es la tercera autonomía con más plantas en este sector, y cuenta con el Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca, el Ibsal, que lidera este campo en España.

Estos son solo algunos de los ejemplos que le han servido al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, para sacar pecho y reivindicar el potencial de Salamanca y de Castilla y León en la transferencia del conocimiento y el desarrollo biotecnológico durante su intervención al inaugurar el encuentro "Salamanca Tech" que se celebra en el Palacio de Congresos y Exposiciones de la capital salmantina con la presencia de más de una decena de empresas tecnológicas y más de cuatrocientos asistentes.

"Queremos facilitar la especialización y atraer al talento para generar empleo de calidad", decía el jefe del Ejecutivo regional, mientras reafirmaba la apuesta de su Gobierno por la innovación tecnológica como “motor del cambio transformador”.

Asimismo, y ante un momento como el actual en el que el Gobierno de España sigue atacando a los empresarios, como se ha visto con Ferrovial y ahora de nuevo con el Grupo Inditex y Amancio Ortega, al que la ministra Ione Belarra ha llamado usureros, Fernández Mañueco defendía a los empresarios y llamaba a cuidarlos y protegerlos. “Es necesario apostar por el sector privado. Cuidar a las empresas es la mejor manera de crear empleo y apostar por os trabajadores”, apuntaba el presidente, mientras trasladaba a los empresarios que la Junta siempre estará su lado y ahora más si cabe a través de la Estrategia de Emprendimiento e Innovación que se desarrollará hasta el año 2027.

Asimismo, apelaba al equilibrio territorial en cualquier proceso de innovación para dar respuesta a las necesidades de la Comunidad, y especialmente en las zonas rurales, llamaba a aprovechar la oportunidades para aumentar la base de empresas innovadoras e incrementar los nichos de innovación y, sobre todo, defendía la necesidad de formar talentoque sea capaz de dar respuesta a la necesidades de las empresas.

“Salamanca y Castilla y León tienen mucho potencial para seguir siendo referente en innovación, que es sinónimo de futuro, de oportunidades, de empleo y de empleo de calidad. Estamos todos en ese tren y nos tenemos que preparar para llegar mucho más lejos de los que hemos llegado hasta ahora”, finalizaba el presidente.

Polo tecnológico

El director de esta jornadar, Juan Manuel Corchado, destacaba que Salamanca está sufriendo una verdadera transformación digital y que se ha convertido ya en un polo tecnológico. "Siete años después de la cuarta revolución industrial ya se está hablando de la quinta, que es la inteligencia artificial, y Salamanca, en este campo, el de la tecnología, será referente, como en muchos otros”, apuntaba, en declaraciones recogidas por Ical.

El presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias, destacaba el “notable” espacio colaborativo generado en la provincia salmantina, con la implantación del Irnasa y también con el futuro desarrollo del campus agroambiental, mientras que el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, exhibía músculo desde la capacidad que alberga la ciudad para generar transferencia de conocimiento hacia los centros productivos. “La ciudad está cambiando y queremos que nos miren porque aquí van a pasar cosas muy importantes en los próximos años. Los nuevos proyectos traerán más fondos, más empresas a instalarse, más alumnos a la Universidad y eso es lo que necesitamos”, afirmaba.

Finalmente, el rector de la Usal, Ricardo Rivero, apuntaba a la colaboración interinstitucional para ofrecer oportunidades de empleo a los jóvenes, y defendía que a las fortalezas clásicas del Estudio salmantino, como son el español o la biomedicina, han surgido otras muy importantes como las ciencias básicas y las humanidades, pero también las nuevas tecnologías. "Esto va a suponer un cambio como el que supuso en su día la electricidad”, decía.