La nueva Cascajares resurge de sus cenizas en tiempo récord y con más fuerza que nunca

Ocho meses después de que un incendio calcinara al completo sus instalaciones, la nueva fábrica de Cascajares, ubicada en la localidad palentina de Dueñas, ha inaugurado este lunes sus nuevas instalaciones recuperadas de las cenizas tras una inversión superior a los 12 millones de euros, con renovadas ilusiones y con gran optimismo ante el futuro que se avecina.

Una fábrica levantada en tiempo récord que, además, será capaza de triplicar la capacidad productiva de la compañía conocida por sus famosos capones. De hecho, creen que podrán tener listas 700.000 cenas de Navidad en diciembre. O lo que es lo mismo, en apenas dos meses y medio.

"Hace ocho meses prometí que íbamos a volver en un tiempo récord y con fuerza y hoy es el día", destacaba el director general de Cascajares, Alfonso Jiménez, quien avanzaba que mantendrán abierta la fábrica que se abrió de forma temporal en la Cistérniga al menos hasta principios del 2024 para conseguir llegar a todos estos hogares. "No queremos fallar”, apuntaba

a los periodistas en el exterior de las nuevas instalaciones, donde se ha procedido a colocar, en un acto simbólico, el cartel de la marca Cascajares que sobrevivió a las llamas en el incendio del pasado 26 de enero.

Jiménez recordaba el fatídico 26 de enero cuando se quemó todo, menos dos grandes cosas: el equipo humano y la marca "con las que no pudo el fuego", decía Jiménez.

El acto simbólico del cartel contaba la presencia de todos los trabajadores de la compañía, proveedores, clientes y "amigos" a los que Jiménez ha agradecido su ayuda para hacer posible "este milagro", así como a todas las administraciones, especialmente al Ayuntamiento de Dueñas y a la Junta de Castilla y León, por la "agilidad" que han tenido y que ha permitido tener la fábrica levantada en solo ocho meses, "un tiempo récord".

"Gracias a todos ellos hemos podido construir la fábrica de productos preparados más moderna de toda Europa", señalaba, a la vez que destacaba que es una fábrica segura "y preparada para crecer".

En este sentido ha destacado que la nueva fábrica, que ocupa una superficie construida de 5.600 metros cuadrados, casi el doble que la anterior, dentro de un complejo de 14.000 metros cuadrados, multiplica por tres la capacidad de producción de la antigua, donde se fabricaba un millón de kilos de producto al año.

"Estábamos preparando una ampliación para producir dos millones de kilos y con esta nueva fábrica vamos a tener la capacidad de fabricar hasta tres millones de kilos y poder crear más empleo y riqueza", afirmaba.

El reto inmediato es fabricar entre 600.000 y 700.000 cenas de Navidad. "Ese es nuestro objetivo, pero vamos a empezar poco a poco para estar totalmente listos a lo largo de noviembre y diciembre para hacerlo con más calidad y seguridad alimentaria", ha apuntado Alfonso Jiménez.

De forma paralela se mantendrá la producción en la fábrica de La Cistérniga (Valladolid) hasta principios de 2024 para asegurar el suministro y "no fallar a los clientes".

Ahora, la intención de Cascajares es aumentar también la plantilla. “Antes del incendio teníamos 74 trabajadores y nuestro objetivo es mantenerlos o incluso aumentar ya que a muchos de los eventuales que estaban por la campaña de Navidad se les acabó su contrato. Ahora se les va a volver a contratar y vamos a tener más empleados que incluso antes del incendio", apuntaba.

De momento a la plantilla fija se sumaran los eventuales que se contratan cada año para la campaña de Navidad, de forma que entre directos e indirectos se superen los cien trabajadores en España y los 40 en Canadá.

La nueva fábrica está dotada con el más actual sistema antiincendios para evitar que vuelva a suceder y por ello recomendaba a otros empresarios que estén preparados con planes de evacuación para los trabajadores y para evitar daños personales y planes de contingencia para no dejar el mercado sin suministro.

"Estamos todos en el bombo, puede pasar como nos pasó a nosotros aquella trágica noche y hay que estar muy preparados para que a nadie le pase nada", ha insistido el presidente de Cascajares que se ha referido al incendio ocurrido este fin de semana en una discoteca de Murcia para subrayar "la tremenda suerte" que tuvieron en Cascajares porque a ningún empleado le pasó nada.

"Eso es lo más importante. Para nosotros los trabajadores es lo más sagrado que tenemos", finalizaba Jiménez que ha reiterado el agradecimiento a toda la plantilla y la "ilusión recargada" con la que afrontan esta nueva etapa. “Nunca lo hubiéramos podido hacer solos”, terminaba.