El programa "Rural Care" de la Junta, un ejemplo en la Unión Europea

El modelo de cuidados "Rural Care", implantado por la Consejería de Familia e Igualdad e Oportunidades en Castilla y León se ha convertido en un auténtico éxito y en la mejor solución para cientos de personas mayores, dependientes y discapacitados puedan seguir residiendo en sus casas. Una iniciativa que ha superado todas las expectativas previstas, y que ha llamado la atención de la Unión Europea por tratarse de un modelo que ofrece prestaciones "a la carta" en función de sus necesidades y deseos.

La propia consejera Isabel Blanco se ha desplazado hasta Bruselas para explicar en la sede del Comité de las Regiones los resultados del programa piloto, y justo en un momento en el que Castilla y León ha sido galardonada por la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales de España.

Un encuentro donde se han dado cita profesionales y expertos del ámbito de los cuidados en Europa y que han podido conocer las características y particularidades del sistema asistencial de la Comunidad. "Se trata de atender a las personas desde sus propias decisiones, pero a través de una planificación que permita a los profesionales adelantarse a los problemas", indicaba Isabel Blanco.

Zoe Tzotze-Lanara, miembro del Comité Económico y Social Europeo, ha destacado este modelo como ejemplo de la UE en la transformación del medio rural y su estrategia en la lucha contra la despoblación, fundamentalmente a través de la creación de empleo. Además, ha puesto a la Comunidad como ejemplo ante el Consejo, en cuanto a la posible aplicación de las mismas medidas en otros países de la Unión.

Un modelo de atención integral, que como ha explicado Isabel Blanco, no sólo se aplica a los centros residenciales de Castilla y León sino que se ha venido implantando en los hogares del medio rural de la Comunidad y aplicándolo a los cuidados de larga duración en los hogares en los domicilios particulares.

Un programa piloto implantado en dos áreas vallisoletanas integradas por pequeños municipios, un total de 64 de la Tierra de Campos, donde residen 16.000 personas. Y hasta la fecha han sido 183 los usuarios que han recibido este servicio, lo que equivale a un incremento de las expectativas de casi un 25 por ciento. La edad media de los atendidos es de 82 años y un 43,1 por ciento de ellos tiene un elevado grado de dependencia.

Pero no sólo este proyecto piloto está dando resultados, sino otros como "Wellco" o "Procura" a los que se les unen "A Gusto en Casa" y sus derivados y que todos ellos, en su conjunto, , han permitido que 1.772 personas hayan desarrollado sus proyectos de vida en su propio entorno. Y con la ampliación de estos programa al entorno urbano en los próximos meses se espera que, a final de año, los beneficiarios superen los 2.000.

Una iniciativa que también es una vía para la dinamización de la economía rural, la creación de empleo y el asentamiento de población, ya que para proveer estos servicios se han necesitado a 50 asistentes, 48 de ellas mujeres. Ahora, el reto, como ha señalado la consejera es llevar a cabo la atención a mayores y dependientes a todos los rincones de la Comunidad más grandes y dispersas de Europa.