El proyecto de hidrógeno verde en Burgos va tomando forma

Cuenta atrás para que Burgos pueda contar con ambicioso proyecto empresarial en torno al hidrógeno verde llamado a dar un impulso a la dinamización económica y empresarial de la ciudad y en el que tendrá un especial protagonismo también la Universidad de Burgos (UBU)

Se trata de de un complejo donde se instalará un vivero de empresas de hidrógeno verde y energías renovables junto a la sede central del Campus universitario.

La alcaldesa, Cristina Ayala, (PP), ha presentado este lunes el proyecto en el que colaboran también la Cámara de Comercio e Industria de la provincia y la Fundación Caja de Burgos,, que se construirá en una parcela para un centro de investigación junto a la empresa cárnica Campofrío, que finalmente no salió adelante.

En concreto, serán dos parcelas para las que se aprobará un Estudio de Detalle que permitirá construir 10.000 metros cuadrados, aunque en la primera fase solo se van a desarrollar 2.500, y tanto la promoción como la financiación incluirán fondos públicos y privados.

El rector de la UBU, Manuel Pérez Mateos, destacaba que el campus burgalés encabeza un proyecto dotado con tes millones de euros de fondos europeos para impulsar plantas de generación y aprovechamiento de hidrógeno verde, metano y amoniaco y cuenta con 23 estudiantes matriculados en un máster en tecnologías de hidrógeno verde.

Por su parte, la Fundación Caja Burgos aportará su experiencia de más de una década apoyando el nacimiento de empresas y el de su propia incubadora empresarial, que funciona desde 2021, mientras que la Cámara de Comercio de Burgos, s colaborará en materia de formación, ayuda y canales de financiación de proyectos.

Hace unos meses, tras la firma de la adhesión de la ciudad de Burgos a la Asociación Castellano y Leonesa del Hidrógeno Verde, la primera edil aseguraba que Burgos lleva un tiempo trabajando con el objetivo de ser referente nacional en temas de hidrógeno verde”. Ayala decía que esta producción de hidrógeno verde es una forma sostenible de obtener energía a un precio adecuado. Algo que, en su opinión, es el reto al que se enfrenta la ciudad ahora para permitir que los procesos industriales sigan siendo competitivos.