Coronavirus

Cataluña probará su ensayo clínico en Igualada para combatir el coronavirus

Tratará a 195 enfermos con un antiviral y a sus contactos con un fármaco antimalárico para romper la cadena de contagio

Confinameinto en la comarca de Igualada (Barcelona)
Vista de la entrada principal del Hospital de Igualada (Barcelona).Susanna SaezAgencia EFE

Con poco más de tres meses circulando, el Covid-19 ha tenido tiempo suficiente para demostrar que es una enfermedad muy contagiosa. A día de hoy, cada infectado en España está contagiando a una media de 3,1 personas. Para revertir el número de contagios por coronavirus, actualmente, hay tres fórmulas, la higiene, quedarse en casa para disminuir el número de contactos y rebajar el periodo de contagio de los casos más leves, así como de los contactos de una persona infectada. En base a esta última premisa, hoy arranca un ensayo en Cataluña que tiene como objetivo cortar la cadena de transmisión y evitar el contagio. En otras palabras, que las personas afectadas no puedan transmitir el virus y que sus contactos no lleguen a desarrollar la enfermedad. Participarán 195 personas que han dado positivo de coronavirus y 2.805 contactos.

La idea de centrarse en frenar el poder de transmisión del SARS-Cov-2 ha salido de la Fundación Lucha contra el Sida del Hospital Germans Trias i Pujol, donde trabajan Bonaventura Clotet (IrsiCaixa) y Oriol Mitjà, el médico que hace unos años dio con una pastilla para erradicar una enfermedad llamada pian, que ataca a los niños de una isla de Papúa Nueva Guinea, y que ya en enero, cuando el SARS-CoV-2 no había llegado a Europa, en base a fórmulas matemáticas, reclamaba medidas de contención para no llegar a la situación que hoy está viviendo España.

Doble intervención: una con enfermos y otra con contactos

En colaboración con el Departamento de Salud y de la Agencia del Medicamento, que ha acelerado los trámites burocráticos, Mitjà ha ofrecido detalles esta mañana sobre este ensayo. Hay dos líneas de intervención. Se administrará un fármaco a 195 infectados y otro a los 15 contactos más estrechos de cada positivo (compañeros de trabajo y familia), que suman 2.805 personas. “La ciencia nos dice que un positivo contagia entre un 5 y 10% de amigos y compañeros de trabajo, y a un 15% de sus familiares. Y que esta capacidad de contagio tiene una duración de 14 días”, ha venido a decir Mitjà.

Un antiviral que se emplea para el VIH para los enfermos

A los enfermos se les dará un antiviral que ya se emplea con el virus del Sida. Se llama darunivir/cobicistat. Como ha contado el mismo Mitjà, “se trata de un inhibidor de la proteasa, que es una proteína necesaria para que el virus SARS-Cov-2 se reproduzca”. “Trabajamos con la idea de que si cortamos la capacidad que tiene el virus para replicarse, reduciremos la carga viral y a la vez la capacidad de este microorganismo para infectar a otros”. Los pacientes tomarán este medicamento durante siete días. El objetivo es reducir el número de días que la persona infectada tiene carga viral. Ahora, son 14.

Un fármaco contra la malaria para los contactos

Paralelamente, a los contactos, se les dará un medicamento que conocen algunos pacientes de enfermedades autoinmunes como el lupus, una patología rara que hizo famosa el “Doctor House”. Se trata de la hidroxicloriquina. Es un fármaco seguro, que también se usa contra la malaria y la artritis reumatoide. Los contactos lo tomarán durante cuatro días. “Este medicamento creemos que evita que el virus se acople a la célula huésped”, ha detallado Mitjà. “Y también impide que el virus crezca”, añadió. Después de administrar este fármaco, se estudiará, a lo largo de 14 días, si disminuye la tasa de contagio. El objetivo es evitar que los contactos desarrollen la enfermedad.

Mitjà explicó que esta metodología se aplica ya con otras infecciones. Como ejemplo puso el meningococo invasivo. Cuando un niño da positivo, se trata y a sus compañeros de clase. Se les da un antibiótico de forma profiláctica.

Los primeros resultados se conocerán en 21 días.

En rueda de prensa donde han ofrecido los detalles de este ensayo, Mitjà ha estado acompañado por la consejera de Salud, Alba Vergés; el director general de Investigación e Innovación en Salud, Robert Fabregat; el director de la Agencia de Calidad y Evaluación Sanitarias (AQuAS) del departamento, César Velasco.

El ensayo arranca en Igualada y el Norte de Barcelona

Con el objetivo de cortar la cadena de transmisión y evitar el contagio, el ensayo tratará a infectados de la zona de Igualada, confinada desde el jueves por un fuerte brote de origen no controlado, y en la llamada zona MetroNorte (Vallès Occidental, Vallès Oriental, Maresme y Barcelonès Nord). Esta zona cuenta con el Hospital Germans Trias i Pujol, donde trabajan los investigadores que lideran el ensayo. La consellera de Salud hizo un llamamiento para que cuando los profesionales ofrezcan a pacientes y contactos participar en este ensayo, se presten. Todos los pacientes positivos que participen en el ensayo serán con síntomas leves.

250 ensayos en marcha en todo el mundo

La lucha contra el Covid-19 se lidia ya desde muchos frentes. Además del aislamiento social para reducir el número de contactos, lavarse las manos y taparse con el antecodo al toser, la Organización Mundial de la Salut (OMS) cuenta ya con 250 ensayos. Cataluña participa en tres, en este, un antiviral para pacientes graves y una tecnología más eficaz que la PCR para detectar el coronavirus. En el antiviral para pacientes graves, remdesivir participa e Hospital Clínic de Barcelona, el Hospital Universitario de Cruces de Baracaldo (Vizcaya) y el Hospital Universitario la Paz de Madrid. Y en el test participa la profesora Laura M. Lechuga, responsable del grupo NanoB2A del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología.

Ayuda de la Fundación Bill y Melinda Gates

La titular de Salud, además, ha explicado que esta mañana se ha puesto en contacto con el Ministerio de Sanidad para ofrecer todos los detalles sobre el estudio clínico. Y Mitjà ha detallado que el ensayo está coordinado por profesionales asistenciales y de salud pública en el territorio para obtener los datos que se analizarán. Cataluña está trabajando para crear un consorcio para desplegar estrategias similares de prevención en otros países. Para financiarlo cuentan con entidades privadas y el apoyo de la Fundación Bill y Melinda Gates.