Covid-19
La Generalitat recula, no endurece las restricciones y mantiene el toque de queda a las 1.00 horas en Fin de Año
Pese a admitir que la situación del virus “no es buena”, la Generalitat remarca que las medidas han funcionado para Nochebuena y Navidad
Sorpresa relativa tras la reunión del Procicat, el comité técnico de la Generalitat que gestiona la pandemia: tras revisar los datos epidemiológicos y la situación actual, por ahora no se endurecerán las restricciones en Cataluña y se mantiene el toque de queda a las 1.00 horas en Fin de Año. “Vamos mirando día a día, no descartamos nada, pero hoy hemos tomado esta decisión”, ha confirmado la titular de Salut, Alba Vergés (ERC) en rueda de prensa.
Por tanto, sigue vigente el plan de desescalada y las medidas para esta Navidad que entraron en vigor hace justo una semana, el lunes pasado: reducción del horario de bares y restaurante a cuatro horas repartidas entre la mañana y el mediodía; limitación de la movilidad en Cataluña y cierre perimetral de La Cerdanya y el Ripollès; reuniones de un máximo de 10 personas incluidos niños y de dos burbujas de convivencia; y toque de queda a las 1.00 horas en Fin de Año y a las 23.00 horas la noche de Reyes.
La sorpresa ha saltado después de que ayer el propio responsable de Interior, Miquel Sàmper (presente en la reunión de hoy y la rueda de prensa posterior) hablara claramente de la posibilidad de aplicar nuevas restricciones en una entrevista radiofónica. De hecho, incluso apuntó dos posibilidades: que el confinamiento nocturno para Fin de Año se adelantara a antes de la medianoche y estudiar un nuevo cierre en el sector de la restauración y la cultura, un amago de endurecimiento del plan de Navidad que finalmente no ha prosperado. Es más, la propia Vergés anoche en otra entrevista en TV3 aseguró que los contagios son “demasiado elevados como para pensar que es una situación que se puede mantener así, sin medidas” al ser preguntada por la situación epidemiológica.
Eso sí, la consellera Vergés ha admitido que la situación actual “no es buena” -”tenemos una pandemia que va creciendo”-, ha llamado a los catalanes a seguir a rajatabla las medidas vigentes y ha celebrado el alto grado de cumplimiento para Navidad y Nochebuena. Sin embargo, aún faltan días para conocer el impacto que pueden tener los encuentros navideños en la propagación del virus, como así reconocen desde Salut.
Según los datos de hoy, la velocidad de reproducción de la enfermedad (rt) sigue por encima de 1 pero ha bajado hasta 1,16 -100 infectan a 116- mientras que la incidencia acumulada en los últimos 14 días es de 341,75 por cada 100.000 habitantes, un dato al alza, eso sí. Sobre nuevos contagios, la cifra de las últimas horas es de 973 aunque podría estar desvirtuada por los festivos ya que la media es de unos 2.000 diarios. Y hay un total de 337 pacientes se encuentran ingresados en las ucis de centros públicos y privados.
Nuevo plan de rastreo
En la misma rueda de prensa, la consellera ha aprovechado para anunciar la rescisión del contrato de seguimiento y rastreo de casos de Covid-19 con Ferroser, filial de Ferrovial, el próximo 31 de enero.A partir de esa fecha, el Govern pondrá en marcha el sexto programa de salud pública desde el inicio de la pandemia, que comportará la contratación de entre 450 y 750 personas y una inversión de 19 millones de euros, y permitirá “ampliar las tareas de las personas dedicadas a la gestión de los contactos”.
Si hasta ahora estos profesionales llamaban a los contactos estrechos desde un ‘call center’, con la nueva gestión a cargo de la Agencia de Salud Pública de Catalunya, además, agendarán pruebas diagnósticas de los contactos estrechos, harán un cribado de salud emocional para derivar a los psicólogos del 061 o identificarán necesidades sociales.
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