Pactos

Trias, incapaz de atar la alcaldía de Barcelona, implora ayuda a Collboni

A falta de una semana para la constitución de los ayuntamientos, los votos del PP podrían ser decisivos para escoger a un nuevo alcalde, pero sin Colau en el gobierno municipal

28M.- Trias agradece la actitud "colaborativa" de ERC y dice que el PSC se resiste
28M.- Trias agradece la actitud "colaborativa" de ERC y dice que el PSC se resisteEuropa Press

Xavier Trias, candidato de Junts, ganó las pasadas elecciones con once concejales. Uno más que el PSC y dos más que los comunes de Ada Colau. Sucede, sin embargo, que la mayoría en el Ayuntamiento es 21, y que Barcelona, a grandes rasgos, es de izquierdas (24 de 41) y no es independentista (16 de 41). Es decir, por mucho que Junts haya ganado las elecciones siempre va a existir la posibilidad de una mayoría alternativa. Trias lo sabe y, a falta de una semana para la constitución de los ayuntamientos se le empiezan a notar los nervios. Sobre el papel hay dos posibles alternativas. Un frente de izquierdas, con PSC, ERC y comunes, que sumaría 24. O bien un acuerdo más trasnochado con PSC, comunes y el concurso de un actor externo como el PP. Esta ultima posibilidad requeriría de un poco de imaginación, tal y como ha dicho la propia alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, El candidato del PP, Daniel Sirera, no se ha negado a inverstir al socialista Jaume Collboni, siempre y cuando Colau no participe del gobierno municipal.

Xavier Trias aseguró ayer que «no será fácil» conseguir un acuerdo con el PSC y ERC para gobernar Barcelona en los próximos cuatro años. El candidato de Junts admitió que «Collboni se resiste» a este pacto a tres bandas. «No les gusta», reconoce. En cambio, explica que hay mucho mejor sintonía con el republicano Ernest Maragall. «Estos días tengo una situación de una actitud muy positiva y muy colaborativa con ERC», explicó. Y eso mientras PSC y Junts negocian por la diputación de Tarragona para echar a los republicanos, tal y como ya ha sucedido con el ayuntamiento de Roses. Trias reconoce que probablemente no podrá elegir y cree que un posible gobierno con ERC con 16 concejales es «difícil», pero no imposible. «He gobernado cuatro años con 14 concejales», recordó. Sobre Colau, Trias aseguró que «no sé qué maquina pero no acepta haber perdido las elecciones», asegura. Y le recomienda aceptar la realidad para no acabar «haciendo el ridículo».

Colau, por su parte, sigue insistiendo en su mensaje de que existe la «oportunidad para formar un gobierno progresista, fuerte y estable» con PSC y ERC. La alcaldesa explicó que las conversaciones están abiertas, que «no será sencillo, pero la posibilidad está encima de la mesa», y aseguró que su formación hará los máximos esfuerzos hasta el último minuto para conseguir este pacto. «Barcelona se merece que hagamos el máximo esfuerzo para que esta mayoría progresista se traduzca en un gobierno que mantenga a Barcelona como un faro de esperanza de políticas progresistas para el país y para toda Europa», añadió.

Así las cosas, si persisten los vetos cruzados, la llave de la gobernabilidad en Barcelona la tendrá el PP. Sirera ha asegurado que «en ningún caso» votará a Trias en la sesión de investidura del 17 de junio y que tampoco apoyará al socialista Jaume Collboni si pacta con Ada Colau. De hecho, subrayó que las afirmaciones de algunos ministros socialistas sobre el apoyo de los populares a un «candidato separatista» son falsas.

Sirera reconoció, sin embargo, que la posición del PP «no es fácil», pero que «la pelota está en el tejado de los socialistas», a quien pide garantías de que no gobernará con Ada Colau. «Lo que no puedo hacer es apoyar a Collboni, darle un cheque en blanco y que después de las generales me encuentre que forma gobierno con Colau», afirmó. Desde el PP han asegurado que la decisión sobre cuál será el voto a la investidura «aún no está 100% decidida», pero que Sirera no votará a la candidatura de Trias ni la de Collboni en esas condiciones, otra opción podría ser que acabara votándose a sí mismo.

El popular explicó que tanto Trias como Collboni le han llamado «para que les ayude a ser alcaldes» y que les respondió que «esto no va de sillas». «Yo lo que quiero es explorar un gobierno constitucionalista que ponga en marcha de nuevo Barcelona». Sirera cree que este gobierno «bien llevado» y con «un PP que lo condicione» podría servir para «sacar adelante Barcelona».

El debate sobre la alcaldía, de Barcelona, mientras, ya ha dado el salto a la política nacional. «Feijóo dice que nunca acordaría nada con separatistas, pero en Barcelona vemos que están dispuestos a allanar el camino a que el Ayuntamiento esté en manos de independentistas de Puigdemont con tal de evitar que haya un socialista de alcalde en Barcelona», afirmó el portavoz del grupo socialista, Patxi López. Sociedad Civil Catalana también se ha pronunciado al respecto y emplaza a las «formaciones constitucionalistas a dar la batalla por la libertad y la igualdad entre todos los ciudadanos y a impedir la formación de gobiernos secesionistas en aquellos municipios donde esté en manos del constitucionalismo».