Servicios penitenciarios

Cataluña usará drones en las cárceles ante la saturación de presos

Los sindicatos y funcionarios alertan de un colapso operativo

La cárcel de Quatre Camins
La cárcel de Quatre Camins Europa Press

Cataluña ha superado la barrera de los 9.000 presos y el propio Govern empieza a reconocer una situación de “saturación” en el sistema penitenciario. El conseller de Justicia, Ramon Espadaler, ha anunciado un plan de ampliación de plazas y la instalación de nuevos sistemas de seguridad en los centros. Esto incluye inhibidores de drones y de móviles, además de 256 nuevas plazas en la prisión de Mas d’Enric, en el Tarragonès.

El aumento de internos es sostenido y refleja una tendencia que se agrava año tras año. Solo en los últimos doce meses, el número de reclusos ha crecido en más de 500. Las prisiones de Brians 2, Quatre Camins y Brians 1 concentran la mayor parte de la población penitenciaria, mientras los sindicatos y funcionarios alertan de un colapso operativo.

De esta manera, el Govern tiene previsto hacer nuevas plazas en los centros penitenciarios de Cataluña,y poner más medios tecnológicos (inhibidores de drones y de móviles) para garantizar “la seguridad y la convivencia” en los centros penitenciarios, según explico Espadaler.

Actualmente, en las prisiones hay 9.098 reclusos, medio millar más que a principios de año. Sin embargo, esta cifra no llega a los 10.532 que acogieron los penales catalanes el 2010. En concreto, se ha diseñado un plan integral, que se prevé implantar entre los años 2026 y 2028, en el cual se crearán 256 plazas más en la prisión de Mas d’Enric (donde ahora hay 908 reclusos), en El Catllar, en el Tarragonès, con la instalación de dos módulos prefabricados, como los existentes, y al tener espacio en las instalaciones. Se prevé que las plazas entren en funcionamiento el año que viene, y ahora se estudia el número de funcionarios que requerirá.

Así lo explico Espadaler en una atención a los medios previa a la reunión del Comitè Nacional de Seguretat i Justícia, que encabezó el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y al que asistieron también la consellera de Interior y Seguridad Pública, Núria Parlon, y el conseller de Presidencia, Albert Dalmau.

Espadaler subrayó que en el horizonte de este plan está la reinserción de las personas privadas de libertad, así como la mejora de la seguridad y de la convivencia dentro de los centros penitenciarios, dos factores que no entiende como "antitéticos, sino como absolutamente complementarios: cuanta más seguridad, mejor convivencia".

El plan responde a los principales retos que el actual Govern ha detectado: el primero, el aumento de la población penitenciaria, debido al incremento de la población de Cataluña --que ha pasado de 6 millones en 1991 a más de 8 en 2025-- y a un aumento de los efectivos de los diferentes cuerpos policiales, un hecho que se ha traducido en una mayor eficacia.

Todo esto ha redundado en un aumento continuado de la población penitenciaria desde 2021, que según los modelos de predicción utilizados por el departamento se esperaba que fuese de un incremento anual de un 3,21%, y que no sólo se está cumpliendo sino que se está superando.

En este sentido, Espadaler ha confirmado que se esperaba que en 2025 hubiese 8.769 internos en las prisiones catalanas, pero que en septiembre de este año ya se han alcanzado los 9.098, lo que supone un déficit de capacidad en los centros penitenciarios de hombres adultos en régimen ordinario: "Ahora no estamos saturados, pero si se mantuviese esta tendencia podríamos llegar a la saturación".