Símbolos religiosos
¿Qué países en Europa han prohibido el uso del velo en espacios públicos, como pide Junts para Cataluña?
En las últimas semanas, el debate se ha instalado en Cataluña
El debate sobre la prohibición del velo islámico integral en espacios públicos ha irrumpido con fuerza en Cataluña. Junts per Catalunya ha planteado recientemente una propuesta para vetar el uso del niqab y otras prendas que oculten el rostro en espacios públicos, alegando razones de seguridad, convivencia y neutralidad institucional. La medida ha generado una intensa polémica tanto en el ámbito político como en el social, y ha reabierto una cuestión sensible sobre los límites de la libertad religiosa y el respeto a la mujer.
El secretario general de Junts, Jordi Turull, afirmó este martes que su partido ha adoptado esta postura inspirándose en experiencias previas de otros países europeos. Según Turull, es una cuestión de respeto a los derechos y libertades de las mujeres, pero también de seguridad y convivencia. Pero, ¿qué países han implantado realmente este tipo de medidas?
Francia: pionera en la prohibición
Francia fue el primer país europeo en prohibir el velo integral en lugares públicos. La ley, aprobada en 2010 y en vigor desde abril de 2011, establece que “nadie puede ocultar su rostro en el espacio público”, lo que incluye calles, tiendas, administraciones, transportes públicos y cines. Las personas que incumplen esta norma pueden ser sancionadas con una multa de hasta 150 euros. La norma fue convalidada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) en 2014.
Además, Francia prohíbe desde 2004 el uso de símbolos religiosos, incluido el hiyab (velo que no cubre el rostro), en las escuelas públicas, aunque esta medida no se aplica en la universidad. También existen restricciones para los empleados públicos, que deben mantener una estricta neutralidad religiosa en el ejercicio de sus funciones. Esta regulación ha generado críticas por parte de organismos internacionales como el Comité de Derechos Humanos de la ONU.
Bélgica: prisión por llevar niqab
Bélgica fue el segundo país de la Unión Europea en aplicar una prohibición general del velo integral en lugares públicos. La ley, que entró en vigor en julio de 2011, sanciona el uso de prendas como el burka o el niqab con multas de entre 15 y 25 euros y penas de hasta 7 días de cárcel. La norma contempla excepciones para celebraciones como el carnaval.
En 2017, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ratificó la legalidad de esta legislación, avalando el argumento belga de que la prohibición persigue fines legítimos de “convivencia social”. La norma se aplica en todo el país y no distingue entre espacio público cerrado o abierto: su ámbito de aplicación incluye la calle, los edificios públicos y el transporte.
Países Bajos: prohibición parcial
En Países Bajos, la ley contra el velo integral entró en vigor en 2019, aunque su alcance es más limitado. Se prohíbe el uso de cualquier prenda que cubra el rostro, incluidos pasamontañas y cascos integrales, en escuelas, hospitales, edificios públicos y transporte público. En la vía pública, en cambio, el uso del niqab sigue siendo legal.
La norma fue presentada como una medida de seguridad y convivencia, aunque generó rechazo tanto en la sociedad como entre los profesionales encargados de aplicarla. Algunos conductores de autobús, policías y funcionarios expresaron públicamente su negativa a imponer sanciones, argumentando que no querían contribuir a una legislación que consideraban estigmatizante.
Dinamarca: oposición social pero ley vigente
Dinamarca prohibió el velo integral en agosto de 2018 pese a la oposición de diversos colectivos y protestas multitudinarias. La norma sanciona con multas que van desde 1.000 hasta 10.000 coronas danesas (130 a 1.300 euros) a quienes reincidan en el uso del niqab o burka en el espacio público.
El Gobierno danés justificó la medida por razones de seguridad y cohesión social. Sin embargo, la decisión fue ampliamente criticada por sectores feministas, musulmanes y de derechos humanos, que consideran que la norma vulnera libertades individuales y se basa en prejuicios culturales.
Austria: prohibiciones progresivas
En Austria, la prohibición del velo integral se aplica desde octubre de 2017 en todos los espacios públicos. Las multas por infringir esta norma pueden alcanzar los 150 euros. Esta medida se enmarca en una serie de políticas de laicismo promovidas por el gobierno austriaco, similares a las adoptadas en Francia.
En 2018, Austria aprobó además una ley que impedía a niñas menores de diez años llevar el velo en guarderías y escuelas primarias. No obstante, esta norma fue anulada por la Corte Constitucional en 2020, al considerar que vulneraba el principio de igualdad y discriminaba a las niñas musulmanas.
Alemania: diferencias según el estado
Alemania no ha aprobado una prohibición nacional del velo integral en espacios públicos, pero desde 2017 obliga a mostrar el rostro en situaciones de verificación de identidad. Además, la normativa varía mucho según el estado federado. En algunos Länder se prohíbe el uso del velo en las escuelas públicas.
En el caso de los empleados públicos y militares, el uso del velo integral está vetado en todo el país. En cuanto al hiyab, su regulación depende de cada estado, y en 2015 el Tribunal Constitucional limitó la posibilidad de prohibirlo a casos en los que suponga una amenaza real para el funcionamiento del centro educativo.
Italia: prohibiciones regionales y penas severas
Italia no cuenta con una legislación estatal específica sobre el velo integral, pero varias regiones han adoptado restricciones. Lombardía y Véneto, por ejemplo, prohíben el uso de esta prenda en hospitales y edificios públicos. La iniciativa fue impulsada por fuerzas conservadoras como la Liga Norte.
En 2011, una diputada del partido de Silvio Berlusconi promovió una ley que prevé penas de hasta un año de prisión y multas de hasta 30.000 euros para quienes lleven el velo integral en lugares públicos. Aunque esta norma no se ha aplicado de forma generalizada, sentó un precedente legal significativo.
Bulgaria: multas crecientes
Bulgaria aprobó en 2016 una ley que prohíbe cubrir el rostro en lugares públicos, salvo por motivos de salud o profesionales. La primera infracción se sanciona con una multa de 200 leva (unos 102 euros) y las siguientes pueden alcanzar los 1.500 leva (unos 767 euros).
La medida fue presentada como una forma de proteger la identidad nacional y garantizar la seguridad pública. Aunque en Bulgaria la población musulmana representa un porcentaje relativamente pequeño, la ley fue defendida como una acción preventiva contra la radicalización.
Letonia: cultura y seguridad
Letonia se sumó en 2017 al grupo de países que restringen el uso del velo integral. La prohibición se argumentó en la necesidad de preservar los valores culturales del país báltico y garantizar el orden público. La normativa afecta a todos los espacios públicos y fue impulsada por el Ministerio de Justicia.
Aunque la comunidad musulmana en Letonia es muy reducida, el Gobierno justificó la medida como parte de una política de integración y control social. La decisión fue respaldada por una mayoría parlamentaria y no ha generado gran controversia social.
Noruega: solo en el ámbito educativo
Desde agosto de 2018, Noruega prohíbe el uso del velo integral en todos los centros educativos, públicos y privados, incluyendo universidades y guarderías. La norma también se aplica a los empleados de estas instituciones.
El gobierno noruego argumentó que el uso del niqab dificultaba la comunicación entre alumnos y profesores y afectaba la calidad educativa. La prohibición no se extiende a otros espacios públicos, lo que hace de Noruega uno de los países con una legislación más acotada territorialmente.
Suiza: referéndum y multas de 1.000 francos
En Suiza, la prohibición del velo integral fue aprobada mediante un referéndum celebrado en 2021. La medida establece sanciones de hasta 1.000 francos suizos (unos 1.030 euros) para quienes oculten su rostro en espacios públicos. Aunque no menciona explícitamente prendas islámicas, la iniciativa fue impulsada por sectores que criticaban el uso del niqab y el burka.
La legislación suiza no solo prohíbe vestimentas religiosas que tapen el rostro, sino también otras prendas que dificulten la identificación, como pasamontañas. La medida ha sido criticada por organizaciones de derechos humanos que la consideran discriminatoria, pero sigue en vigor a nivel federal.
España: competencias municipales
En España no existe una ley estatal que prohíba el uso del velo integral, pero varios municipios han aprobado ordenanzas restrictivas. El primer caso fue el de Lleida en 2010, que incluyó en su Ordenanza de Civismo y Convivencia la prohibición del niqab en instalaciones municipales.
Actualmente, diez ayuntamientos han adoptado medidas similares, ocho de ellos en Cataluña. Estas normas municipales no se extienden a la vía pública, pero sí afectan a edificios y servicios de titularidad pública, como bibliotecas o centros cívicos.