La Generalitat “tiene la obligación jurídica de resolver” la Actuación Territorial Estratégica (ATE) que afecta al nuevo campo de Mestalla con la opción de declarar su caducidad o acordar la sustitución del promotor, que en la actualidad es el Valencia CF, señalaron fuentes de la conselleria de Política Territorial.

Esta Conselleria solicitó a la Abogacía de la Generalitat documentación para aclarar aspectos del proceso y este jueves ha comunicado que ya dispone del informe correspondiente y de que éste “arroja luz y concreta el marco jurídico en el que se debe proceder”.

La última decisión al respecto, informan las mismas fuentes, la debe tomar el Consell en un acuerdo de su pleno, al tiempo que la Conselleria tiene la potestad, en caso de caducidad, de decidir si se derogan o no las previsiones de planeamiento o si es posible de derogar unas previsiones o mantener otras en función del interés general.

El conceller de Política Territorial, Arcadi Espada, afirmó que el informe “arroja luz, responde a dudas y establece el marco jurídico” en el que la Administración debe moverse en torno a esta ATE.

También señaló que el informe es contundente a partir de los realizados previamente por el ayuntamiento de València, la Generalitat y el Valencia CF e insistió en que determina la obligación jurídica de resolverla de forma anticipada.

“O la propiedad del Valencia CF da pasos adelante transparentes, creíbles, rápidos y económicamente viables para cumplir sus compromisos en torno a la finalización del estadio, o la ATE se resolverá de forma anticipada”, agregó el conseller.

También indicó que su obligación es garantizar el interés público “con sangre fría y con la ley en la mano”.

El debate sobre la concesión o no de una prórroga a la ATE para el nuevo estadio del club de Mestalla arrancó hace algunos meses y mientras las diferentes administraciones han sido críticas ante la inacción del club a la hora de asumir la conclusión de las obras del estadio, el Valencia ha afirmado que tenía prevista su reanudación, aunque sin dar pasos adelante al respecto.

El acuerdo global alcanzó el 12 de agosto entre el fondo internacional CVC y LaLiga hacía posible una inyección económica susceptible de ser aportada para que el club pudiera reiniciar las obras, pero durante esta semana el Valencia no ha dado muestras de hacerlo.

Las obras del nuevo Mestalla se iniciaron en agosto de 2007 y permanecen paradas desde febrero de 2009, antes de que la actual propiedad llegara al club, por falta de financiación. Ninguno de los anuncios de reiniciar las obras realizados durante estos doce años por el Valencia se ha llegado a plasmar.